El documento trata sobre el estrés, definiéndolo como un estado de tensión física y psicológica que experimentan los seres vivos al adaptarse al medio. Explica las tres fases del estrés según Hans Selye: alarma, resistencia y agotamiento. También describe los factores que lo generan, sus efectos en la salud, y formas de aliviarlo como la musicoterapia.
1. UNIVERSIDAD DE CUENCA
FACULTAD DE CIENCIAS
MÉDICAS
ESCUELA DE TECNOLOGIA
MÉDICA
AREA DE FONOAUDIOLOGIA
DOCENTE: PSC. MIRIAM LUCIO
ALUMNA: PAOLA PONCE
ENSAYO EL ESTRÉS
2. INTRODUCCION
En nuestro medio se ha vuelto muy común ver a personas completamente atareadas y
estresada con el quehacer cotidiano, ya sea por razones laborales, sociales, psicológicas en
fin existen un sinnúmero de razones por las cuales muchas veces nos enfrascamos en ruta
sin salida, sea cual sea estas razones muchas veces no somos capaces de liberarnos de dicha
carga, al contrario tendemos a provocar mayor tensión, lamentablemente la mayoría de
personas no nos damos cuenta del daño que producimos a muestro organismo y por ende a
las personas que nos rodean, pero gracias a varias técnicas desarrolladas ahora podemos
tratar de controlar el estrés y llevar todo de una mejor forma.
El estrés
El estrés corresponde al estado de tensión física y psicológica que sufren los seres vivos en
su proceso de adaptación al medio que los rodea, supone un hecho habitual de la vida del
ser humano, ya que cualquier individuo, con mayor o menor frecuencia, lo ha
experimentado en algún momento de su existencia. (1)(4)
El estrés ha sido estudiado bajo diferentes modelos explicativos. Hans Selye, propulsor del
primero de ellos y creador del concepto que lo condujo a formular su teoría general de
adaptación, plantea en esta en tres fases: alarma, resistencia y agotamiento. (1)
1. La primera es la fase de alerta. En reacción a un estresor, el hipotálamo estimula las
suprarrenales (en su parte medular) para secretar la adrenalina, cuyo objetivo es suministrar
la energía en caso de urgencia. Habrá entonces una serie de respuestas del organismo como
un aumento de la frecuencia cardíaca, una vasodilatación, un aumento de la vigilancia
(puesta en juego también por la noradrenalina [NA]). (3)
2. La segunda fase es la fase defensa (o resistencia), se activa solamente si el estrés se
mantiene. Las suprarrenales (en la zona fasciculada) van a secretar entonces un segundo
tipo de hormona, el cortisol. Su papel, es esta vez, el de mantener constante el nivel de
glucosa sanguínea para nutrir los músculos, el corazón, el cerebro. Por una parte, la
adrenalina suministra la energía de urgencia; por otra, el cortisol asegura la renovación de
las reservas. Es una fase de resistencia, el organismo debe " aguantar”. (3)
3. 3. La fase de agotamiento (o de relajamiento) se instala si la situación persiste y se
acompaña de una alteración hormonal crónica (con consecuencias orgánicas y
psiquiátricas). Si la situación persiste todavía más, es posible que el organismo se encuentre
desbordado, inclusive agotado. Poco a poco las hormonas secretadas son menos eficaces y
comienzan a acumularse en la circulación. Resultado: el organismo está invadido de
hormonas que tendrán un impacto negativo sobre la salud. (3)
Los factores que lo generan se denominan “ estresores” , y el entorno en el cual aparecen,
situación estresante, el análisis del estresor se descompone en tres fases (1) (3)
1. Recepción del estresor y filtro de las informaciones sensoriales por el tálamo.
2. Luego, programación de la reacción al estrés poniendo en juego el córtex prefrontal
(implicado en la toma de decisión, la atención, la memoria a corto plazo) y el sistema
límbico por un análisis comparativo entre la nueva situación y los " recuerdos”: la respuesta
se hará en función de la experiencia. (3)
3. Finalmente, activación de la respuesta del organismo. Esta respuesta pone en juego el
complejo hipotálamo-hipofisario, así como la formación reticular y el locus coeruleus. (3)
El estrés puede provocar distintos problemas de salud, entre ellos están el asma, el infarto
de miocardio y las alteraciones gastrointestinales e inmunológicas (McEwen, 1995). Así, la
descripción de la conexión entre el estrés y la enfermedad se basa en el concepto de
alostasis, que se refiere a la posibilidad de que se produzcan cambios fisiológicos relevantes
con el fin de mantener la homeostasis frente a la demanda de aumento de la actividad
(Sterling y Eyer, 1988); este sistema alostático se pone en marcha por la acumulación de
distintos acontecimientos aversivos que dan lugar al desgaste de los tejidos y órganos,
provocando, a largo plazo, la enfermedad (McEwen, 1995). Por último, las experiencias
estresantes proceden de tres fuentes básicas: el cuerpo, el entorno y los pensamientos; la
primera fuente de estrés es de carácter fisiológico, existiendo innumerables circunstancias
en la vida que afectan al organismo como por ejemplo: las problemáticas y dificultades de
la adolescencia, el envejecimiento, etc. Las amenazas procedentes del ambiente producen
en el cuerpo cambios, concretamente, las que se refieren a la adaptación, ya que con ellas el
ser humano se ve obligado a mantener horarios rígidos en su vida diaria, a aguantar las
exigencias de las relaciones sociales, a soportar el ruido, contaminación y las
4. aglomeraciones de la gran ciudad, influyendo negativamente en su seguridad y su
autoestima. (4)
Se ha propuesto que en el sistema parental el estrés durante los tres primeros años de vida
es especialmente crítico en relación con el desarrollo emocional y conductual del niño, así
como para el desarrollo de la relación padres-niño, altos estresores asociados al niño se
relacionan con la percepción de una disminución del apoyo social, lo cual a su vez se
correlaciona con un incremento de síntomas de depresión, ansiedad y hostilidad. Por otro
lado, las madres cuyo sentido de competencia y apego hacia sus hijos ha sido dañado,
experimentan un mayor estrés psicológico (5)
En lo que concierne al estrés " agudo", existen diferencias hombre-mujer en:
•La respuesta al estresor: el hombre activa preferentemente el córtex prefrontal, mientras
que la mujer activa más bien el sistema límbico. (3)
•La respuesta al estrés psicosocial: la reacción hipotalámica es más importante en el
hombre que en la mujer. (3)
Se han propuesto varias alternativas para tratar de aliviar a las personas estresadas una de
ellas es la músico terapia pues está comprobado que existe una respuesta vegetativa,
fisiológica e involuntaria de nuestra respiración, y la frecuencia cardíaca o pulso sanguíneo
ante la audición de diferentes composiciones musicales, las cuales siguen el ritmo de la
música, funciones en la relajación y sobre todo en el sueño, disminuyen su actividad. (2)
Conclusión
Finalmente podemos decir que el nivel de estrés que tengamos va a influir mucho en
nuestro organismo, ya sea de manera fisiológica o psicológica, se ha comprobado que
personas estresadas muchas veces pueden provocarse a sí mismas problemas del habla
como por ejemplo disfonías, ya que todas sus cuerdas vocales se tensan de tal forma que se
les hace imposible pronunciar palabra alguna, siendo necesaria la terapia para volver a
recuperar la fonación, cabe recalcar que no solo se pueden producir enfermedades
lingüísticas sino además conductuales y trastornos que con el tiempo pueden provocar
daños irreversibles a nuestro organismo y porque no decirlo a nuestro entorno social.
5. Bibliografía
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2.- GARCIA-VINIEGRAS, Carmen R Victoria; RODRIGUEZ MARTINEZ, Jazmín;
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