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1. EVLJ 2011 RCCJ Col Sesión 7 - En Pentecostés, María, llena de la plenitud del Espíritu Santo, recibe su misión de
ser Madre de la Iglesia (Hch 1,14; 2,1-4).
7. Discípulos Misioneros al modo de María, Discípula y Misionera (DA
265-272) 2. María discípula-misionera: María evangelizada y evangelizadora
La máxima realización de la existencia cristiana como un vivir trinitario de
María se nos presenta como modelo para cuantos dejándose guiar por el Espíritu “hijos en el Hijo” nos es dada en la Virgen María quien por su fe (cf. Lc 1, 45) y
Santo, acogen y conservan en su corazón, como una buena semilla (Cfr. Mt 13, obediencia a la voluntad de Dios (cf. Lc 1, 38), así como por su constante
23,) las palabras de la revelación, esforzándose por comprenderlas lo más posible meditación de la Palabra y de las acciones de Jesús (cf. Lc 2, 19.51), es la discípula
para penetrar en las profundidades del misterio de Cristo. (Juan Pablo II, más perfecta del Señor (Cf. LG 53). (DA 266)
catequesis, 4.VII.90) María es nuestro «modelo en el camino evangelizador» precisamente en la misma
medida en que es mujer de fe, signo profético y mediadora nuestra.
1. María, llena del Espíritu “Llena eres de Gracia” (Lc 1, 28)
Ya en el momento de la anunciación María había experimentado la venida del 1. María evangelizada. Por el Evangelio sabemos que María recibió una Buena
Espíritu Santo. El Ángel Gabriel le había dicho: El Espíritu Santo vendrá sobre ti y Noticia, es pues “evangelizada”:
el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra: por eso el que ha de nacer será Cuando el ángel Gabriel le anunció que sería la Madre del Mesías, del Hijo de Dios
santo y será llamado Hijo de Dios' (Lc 1, 35). Por medio de esta venida del (Lc 1,30-35).
Espíritu Santo a Ella, María fue asociada de modo único e irrepetible al misterio de Cuando los pastores le compartieron lo que se les había dicho acerca del niño
Cristo. En la Encíclica Redemptoris Mater escribí: En el misterio de Cristo María recién nacido: que era "El Salvador, el Mesías, el Señor". (cfr. Lc 2, 19-17)
está presente ya 'antes de la creación del mundo' (Cfr. Ef 1, 4) como Aquella que el En el Templo de Jerusalén, cuando Simeón toma a Jesús a Jesús y lo presenta como
Padre 'ha elegido' como Madre de su Hijo en la Encarnación, y junto con el Padre "Luz para iluminar a los gentiles, y Gloria del pueblo de Israel"; y a María le
la ha elegido el Hijo, confiándola eternamente al Espíritu de santidad' (Rom 8). profetiza su participación en su misión salvífica: "¡Y a ti misma una espada te
(Beato Juan Pablo II, catequesis, Junio, 28. 1989) atravesará el alma!" (Lc 2,32-35).
El mismo Jesús, de doce años, tras haber sido hallado por sus padres en el Templo
María y el Bautismo en el Espíritu “La poder del Altísimo te cubrirá con su de Jerusalén, le invita a penetrar más en el misterio de su filiación divina y de su
sombra” (Lc 1, 25) futura misión: "¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre?" (cfr. Lc
Es característico de la RCC el énfasis en la efusión del Espíritu Santo, llamada 2,51).
"Bautismo en el Espíritu", como experiencia fundacional. El Espíritu Santo es alma En la boda de Caná, El deja ver Su gloria por su intercesión y le deja saber su
de la Iglesia, le da sus dones y carismas, le da forma al Cuerpo, marca su identidad, colaboración en su misión mesiánica, (cfr. Jn 2,4-5).
le hace misionera. En la Pasión Jesús, en la cruz, le comunica su misión de maternidad espiritual para
Así mismo el Espíritu Santo manifiesta su presencia en María, ella no es ajena a con todos los discípulos de Jesús (cfr. Jn 19,26) y después de resucitado, Jesús
su acción: El la desposa y enriquece con sus dones y engendra en ella el Mesías. debió comunicar a su Madre la gran noticia de su resurrección gloriosa.
En diferentes momentos en María recibió una particular efusión de Espíritu Santo
para ir realizando el proyecto de Dios sobre ella, que podemos tomar como sus 2. María evangelizadora. María fue evangelizadora, mostrando a su hijo Jesús
"bautismos en el Espíritu": Mesías e Hijo de Dios:
- En su concepción inmaculada. María fue preservada del pecado original y fue María evangelizó a Isabel, cuando le dio su saludo y le reveló, en el Magnificat, las
llena de la gracia del Espíritu Santo.“Llena eres de Gracia” (Kejaritoméne, Lc 1, grandes cosas que Dios había obrado en ella (cfr. Lc 1,39-56).
28). Evangelizó a José, cuando le compartió sobre su milagrosa concepción por obra del
- En la Encarnación del Hijo de Dios en sus entrañas virginales. María fue hecha Espíritu Santo. (cfr. Mt 1,18)
Madre del Hijo de Dios; es la gracia de su maternidad divina. (Theotókos, Lc 1,35). Evangelizó a los Pastores de Belén, cuando les mostró a Jesús Salvador, Mesías y
- En la Visitación a su prima Isabel “del alma de María brota un canto de júbilo, el Señor, (cfr. Lc 2,16-20).
Magnificat, en el que también ella expresa su alegría: 'Mi espíritu se alegra en Dios Evangelizó a los Magos de Oriente, cuando María les mostró a su hijo, el recién
mi salvador' (Lc 1, 47).… María en aquel momento sintió que subían de lo más nacido "Rey de los judíos" (cfr. Mt 2,11).
hondo de su alma los versos del cántico de Ana, madre de Samuel (cfr. 1 Sm 2, Evangelizó a Simeón de Jerusalén y a Ana la profetisa, cuando les presentó a Jesús
1.10) y de otros pasajes del Antiguo Testamento, para dar expresión a los y entregó al niño en brazos de Simeón (cfr. Lc 2,22-38).
sentimientos de la 'hija de Sión', que en ella encontraba la más alta realización” Evangelizó a la gente de Nazaret, presentando humilde y sencillamente a su hijo
(Beato Juan Pablo II, catequesis, 13.VI.90) Jesús. (Cfr. Lc 2,39-40)

2. Evangelizó a los participantes en la boda de Caná, cuando invitó a los sirvientes a de la Palabra en la vida del discípulo y misionero. El Magnificat … revela que en
que hicieran lo que les ordenara Jesús: "¡Haced lo que él os diga!" (Jn 2,5). Ella la Palabra de Dios se encuentra de verdad en su casa, de donde sale y entra con
Evangelizó a todos los que estaban presentes en el Calvario, acompañando con su naturalidad. Ella habla y piensa con la Palabra de Dios; la Palabra de Dios se le
presencia y su silencio, a su Hijo, en el momento en que El daba su vida por la hace su palabra, y su palabra nace de la Palabra de Dios. Además así se revela que
salvación de la humanidad. (cfr. Jn 19, 25) sus pensamientos están en sintonía con los pensamientos de Dios, que su querer es
Evangelizó a los discípulos en la resurrección y en Pentecostés, testificando con su un querer junto con Dios. Estando íntimamente penetrada por la Palabra de Dios,
presencia la glorificación de su Hijo y aceptando ser la Madre de la Iglesia de Ella puede llegar a ser madre de la Palabra encarnada” (DCE 41). (DA 271)
Jesús. (Hch 1,14). Respuesta obediente: la fe de María significa confianza en Dios, que implica
negarse a sí mismo y entregarse, en obediencia amorosa, a la verdad de Dios. Esta
3. María evangelizadora hoy. Desde el cielo, donde vive y reina con Cristo fe, en la oscuridad de los misteriosos caminos de Dios, se convierte en conformidad
glorificado, además de su constante intercesión por todos los hijos que Jesús le ha con Él. En su Sí al nacimiento del Hijo de Dios de su propio seno, por gracia del
regalado, se ha hecho presente en la historia de los pueblos trayendo el mesnaje de Espíritu Santo, María permite que su cuerpo, así como su ser más profundo, sean
esperanza y amor de Dios. Podemos resaltar cuatro de sus apariciones que son convertidos en la morada de la Presencia Divina. En ese Sí, el deseo de María y el
altamente evangelizadoras. de su Hijo —que en sí mismo es el de la libre respuesta a la voluntad del Padre—
En México, en el Tepeyac, a Juan Diego, y todo el pueblo indígena 1531. A Santa coinciden, y así la Encarnación se hace posible.
Bernardita Soubirous, en Lourdes, Francia, 1858. A los niños de Fátima, Portugal, María, carismática: María es la perfecta carismática... Ella construye el cuerpo
1917. Y las apariciones a los jóvenes de Medjugorjie, en Yugoeslavia, a partir de físico de Cristo y, al mismo tiempo, su Cuerpo Místico, a través de la fe. Todos los
1981. carismas de María son un florecimiento de su carisma fundamental: ser la Madre de
Afirman los Obispos en Aparecida: Nuestros pueblos… encuentran la ternura y el Jesús (p. Rene Laurentin).
amor de Dios en el rostro de María. En ella ven reflejado el mensaje esencial del Así lo afirma el Catecismo de la Iglesia: Para ser la Madre del Salvador, María
Evangelio. Nuestra Madre querida, desde el santuario de Guadalupe, hace sentir a fue "dotada por Dios con dones a la medida de una misión tan importante" (LG 56).
sus hijos más pequeños que ellos están en el hueco de su manto. Ahora, desde El ángel Gabriel en el momento de la anunciación la saluda como "llena de gracia"
Aparecida, los invita a echar las redes en el mundo, para sacar del anonimato a (Lc 1, 28). En efecto, para poder dar el asentimiento libre de su fe al anuncio de su
los que están sumergidos en el olvido y acercarlos a la luz de la fe. Ella, reuniendo vocación era preciso que ella estuviese totalmente poseída por la gracia de Dios.
a los hijos, integra a nuestros pueblos en torno a Jesucristo. (DA 265) (CEC 490)
Artífice de comunión: Fortalece los vínculos fraternos entre todos, alienta a la
reconciliación y el perdón, y ayuda a que los discípulos de Jesucristo se
3. María maestra de vida. experimenten como una familia, la familia de Dios. En María nos encontramos con
Lo que la fe católica cree acerca de María se funda en lo que cree acerca de Cristo, con el Padre y el Espíritu Santo, como asimismo con los hermanos. (DA
Cristo, pero lo que enseña sobre María ilumina a su vez la fe en Cristo. (CEC 487) 267)
Interlocutora del Padre en su proyecto de enviar su Verbo al mundo para la
salvación humana, María con su fe llega a ser el primer miembro de la comunidad 4. Nueva Evangelización y María.
de los creyentes en Cristo, y también se hace colaboradora en el renacimiento Decían los obispos de America en el Sinodo de la Evangelización: «El Espíritu
espiritual de los discípulos. Del Evangelio emerge su figura de mujer libre y fuerte, Santo es el principal evangelizador e impulsa a la Iglesia que está en América a
conscientemente orientada al verdadero seguimiento de Cristo. Ella ha vivido por cantar con María el Magníficat, su “canto de alabanza”…» .
entero toda la peregrinación de la fe como madre de Cristo y luego de los Y el Papa Juan Pablo II en su Carta Apostólica sobre la preparación para el
discípulos, sin que le fuera ahorrada la incomprensión y la búsqueda constante del Jubileo del año 2000 recomienda que María «se propone a todos los cristianos
proyecto del Padre. Alcanzó así a estar al pie de la cruz en una comunión profunda, como modelo de fe vivida» (TMA, 43) . Esto significa que, al entregarse a la
para entrar plenamente en el misterio de la Alianza. (DA 266) Nueva Evangelización, la Iglesia deberá adoptar una postura esencialmente
mariana, tanto en la misión ad intra como en la ad extra.
María, modelo de vida en el Espíritu.
Mujer de fe: «Feliz la que ha creído» (cfr Lc . 1, 45) Este elogio dirigido a María En la Escuela de María: Afirman los Obispos en Aparecida: “María es la gran
por su prima Isabel es un concepto clave en mariología. Por su fe María acompaña misionera, continuadora de la misión de su Hijo y formadora de misioneros. Ella,
a esos grandes hombres de fe de la Antigua Alianza, cuyas alabanzas son cantadas así como dio a luz al Salvador del mundo, trajo el Evangelio a nuestra América. En
en la Epístola a los Hebreos. (cfr Heb 11) el acontecimiento guadalupano, presidió junto al humilde Juan Diego el
Escucha de la Palabra: Ella, que “conservaba todos estos recuerdos y los Pentecostés que nos abrió a los dones del Espíritu. Desde entonces son incontables
meditaba en su corazón” (Lc 2, 19; cf. 2, 51), nos enseña el primado de la escucha las comunidades que han encontrado en ella la inspiración más cercana para

3. aprender cómo ser discípulos y misioneros de Jesús. Con gozo constatamos que se
ha hecho parte del caminar de cada uno de nuestros pueblos, entrando Taller
profundamente en el tejido de su historia y acogiendo los rasgos más nobles y
significativos de su gente. Las diversas advocaciones y los santuarios esparcidos a Lea y comente:
lo largo y ancho del Continente testimonian la presencia cercana de María a la “En aquellos días – escribe el evangelista san Lucas – se levantó María y se fue
gente y, al mismo tiempo, manifiestan la fe y la confianza que los devotos sienten con prontitud a la región montañosa, a una ciudad de Judá” (Lc 1,39). El de María
por ella. Ella les pertenece y ellos la sienten como madre y hermana.” (DA 269) es un auténtico viaje misionero. Es un viaje que la lleva lejos de casa, la empuja al
La Iglesia, como la Virgen María, es madre. (DA 268) mundo, a lugares extraños a sus costumbres cotidianas, la hace llegar, en un cierto
Actitud mariana de Servicio: “ Con los ojos puestos en sus hijos y en sus sentido, hasta los límites de lo que ella podía llegar. Está precisamente aquí,
necesidades, como en Caná de Galilea, María ayuda a mantener vivas las actitudes también para todos nosotros, el secreto de nuestra vida de hombres y de cristianos.
de atención, de servicio, de entrega y de gratuidad que deben distinguir a los La nuestra, como individuos y como Iglesia, es una existencia proyectada fuera de
discípulos de su Hijo. Indica, además, cuál es la pedagogía para que los pobres, en nosotros. Como ya había sucedido a Abraham, se nos pide que salgamos de
cada comunidad cristiana, “se sientan como en su casa” (NMI 50). Crea comunión nosotros mismos, de los lugares de nuestras seguridades, para ir hacia los demás, a
y educa a un estilo de vida compartida y solidaria, en fraternidad, en atención y lugares y ámbitos distintos. Es el Señor el que nos lo pide: “Recibiréis la fuerza del
acogida del otro, especialmente si es pobre o necesitado. En nuestras comunidades, Espíritu Santo que descenderá sobre vosotros, y seréis mis testigos... hasta los
su fuerte presencia ha enriquecido y seguirá enriqueciendo la dimensión materna de confines de la tierra (Hch 1,8). Y es siempre el Señor el que, en este camino, nos
la Iglesia y su actitud acogedora, que la convierte en “casa y escuela de la pone junto a María como compañera de viaje y madre solícita. Ella nos da
comunión” (Ibid. 43), y en espacio espiritual que prepara para la misión. (DA 272) seguridad, porque nos recuerda que con nosotros está siempre su Hijo Jesús, según
Testimonio para el Mundo: Ella atrae multitudes a la comunión con Jesús y su lo que prometió: “yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo"
Iglesia, como experimentamos a menudo en los santuarios marianos. Por eso la (Mt 28,20).
Iglesia, como la Virgen María, es madre. Esta visión mariana de la Iglesia es el El evangelista relata que “María permaneció con ella (con su pariente Isabel) unos
mejor remedio para una Iglesia meramente funcional o burocrática. (DA 268) tres meses” (Lc 1,56). … La caridad de María... no se detiene en la ayuda concreta,
sino que alcanza su culmen en el dar al mismo Jesús, en “hacerle encontrar”. Es
Conclusión: una vez más san Lucas quien lo subraya: “en cuanto oyó Isabel el saludo de María,
Hoy, cuando en nuestro continente latinoamericano y caribeño se quiere saltó de gozo el niño en su seno” (Lc 1,41). Estamos así en el corazón y en el
enfatizar el discipulado y la misión, es ella quien brilla ante nuestros ojos como culmen de la misión evangelizadora. Estamos en el significado más verdadero y en
imagen acabada y fidelísima del seguimiento de Cristo. Ésta es la hora de la el objetivo más genuino de todo camino misionero: dar a los hombres el Evangelio
seguidora más radical de Cristo, de su magisterio discipular y misionero al que nos vivo y personal, que es el mismo Señor Jesús. Y la de Jesús es una comunicación y
envía el Papa Benedicto XVI: “María Santísima, la Virgen pura y sin mancha es una donación que – como atestigua Isabel – llena el corazón de alegría: “apenas
para nosotros escuela de fe destinada a conducirnos y a fortalecernos en el camino llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno” (Lc 1,44).
que lleva al encuentro con el Creador del cielo y de la tierra. … Permanezcan en la Jesús es el verdadero y único tesoro que nosotros tenemos que dar a la humanidad.
escuela de María. Inspírense en sus enseñanzas. Procuren acoger y guardar dentro Es de Él de quien los hombres y mujeres de nuestro tiempo tienen profunda
del corazón las luces que ella, por mandato divino, les envía desde lo alto” nostalgia, aun cuando parecen ignorarlo o rechazarlo. Es de Él de quien tiene gran
(Benedicto XVI, Discurso al final del rezo del Santo Rosario en el Santuario de necesidad la sociedad en que vivimos, Europa, el mundo entero.
Nuestra Señora Aparecida, 12 de mayo de 2007). (DA 270) A nosotros se nos ha confiado esta extraordinaria responsabilidad. Vivámosla con
alegría y con compromiso, para que la nuestra sea verdaderamente una civilización
en la que reinen la verdad, la justicia, la libertad y el amor, pilares fundamentales e
Bajo la mirada vigilante de la Madre, la comunidad eclesial crece como una insustituibles de una verdadera convivencia ordenada y pacífica. Vivamos esta
familia renovada por la fuerte efusión del Espíritu y, dispuesta a aceptar los responsabilidad permaneciendo asiduos en la escucha de la Palabra de Dios, en la
desafíos de la nueva evangelización, contempla el rostro misericordioso de Jesús en unión fraterna, en la fracción del pan y en las oraciones (cfr Hch 2,42).
los hermanos, especialmente en los pobres y necesitados, en los alejados de la fe y (Benedicto XVI, Discurso con motivo de la conclusión del mes de mayo en el
del Evangelio. En particular, la Iglesia no teme proclamar ante el mundo que Cristo Vaticano, Mayo 31 de 2010)
es "el camino, la verdad y la vida" (Jn 14,6); no teme anunciar con alegría que la
"buena noticia le tiene su centro o, mejor dicho, su contenido mismo, en la persona
de Cristo, el Verbo hecho carne, único Salvador del mundo" (RVM, 20) (Juan
Pablo II, 12 de Enero de 2003).