2. Habilidad terapéutica en la
relación con el niño
Es importante que el
terapeuta establezca una
relación tierna y amigable
con el niño.
La actitud del terapeuta
sugiere una aceptación
del niño tal y como es.
Evita hacer todo tipo de
halago en lo relativo a
acciones y palabras.
El terapeuta muestra una
actitud de permisividad por
medio de expresiones faciales.
4. Se muestra aceptante de los
sentimientos del niño
aunque sean violentos y
agresivos.
El terapeuta intenta comprender el
mundo de valores y significados del
paciente.