El documento habla sobre no agobiarse por el mañana y confiar en la providencia de Dios. Jesús les dice a sus seguidores que no se preocupen excesivamente por el futuro porque eso les quitará la paz. En su lugar, deben mantener la serenidad y vivir cada día abiertos a las bendiciones de Dios, confiando en su protección aunque no puedan prever todo lo que pasará. La oración final pide guiad para vivir comprometidos pero sin ansiedad y confiar en Dios como su roca y salvación.