PARASITOSIS INTESTINAL en Pediatría, Enfermería y Familiar II
Efectos del café en el cerebro
1. EFECTOS DEL CAFÉ EN EL CEREBRO
Azyade Velázquez Durán. FACICO UAEM.
La cafeína es un estimulante del sistema nervioso, esto significa que disminuye el
sueño y potencia la concentración, debido a que bloquea el receptor de
adenosina. La adenosina es una sustancia que tiene una acción sedante e
inhibitoria en la actividad neuronal, además de mantenerse alerta en lo que ocurre
en el cerebro, también está al tanto de lo que sucede en los tejidos del cuerpo.
Nuestro sistema nervioso monitoriza continuamente los niveles de adenosina
mediante una serie de receptores y cuando estos alcanzan cierto punto, decide
que es hora de descansar. En ese momento comenzamos a sentir sueño o se nos
hace más difícil concentrarnos. En pocas palabras, gracias a la adenosina, nuestro
cerebro sabe cuándo necesitamos descansar.
Sin embargo, la cafeína inhibe la función de la adenosina ya que, en práctica, la
suplanta en el sistema nervioso. Como las moléculas de la cafeína son similares a
las de la adenosina, los receptores de adenosina acogen la cafeína. No obstante,
en vez de activarlos, como haría la adenosina y provocar el sueño, la cafeína los
bloquea. De esta forma, otros agentes estimulantes, como la dopamina y el
glutamato, hacen su trabajo y mantenemos nuestro nivel de alerta.
Esto indica que en realidad el café no es un estimulante, sino que actúa dejándole
la vía libre a otras sustancias que sí tienen un poder activador. Básicamente, lo
que hace la cafeína es eliminar de nuestro cerebro la señal que indica que
estamos cansados y necesitamos dormir o tomar una pausa, obligándolo a
trabajar y mantenerse despierto y concentrado.
La acción de la cafeína varía significativamente de una persona a otra, en
dependencia de factores genéticos o incluso del estilo de vida. No obstante, en
sentido general, tardamos una media de cinco a seis horas en procesar toda la
cafeína y eliminarla de nuestro organismo. Por supuesto, cuando comenzamos a
beber café con frecuencia (bebidas energéticas o cualquier sustancia con
cafeína), desarrollamos una tolerancia de manera que necesitamos más para
obtener el mismo nivel de alerta y concentración. Los neurocientíficos creen que al
final el cerebro logra descubrir la cafeína y desarrolla más receptores de
adenosina, para que esta pueda cumplir su trabajo.
Sin embargo, el consumo regular de cafeína también disminuye los receptores de
norepinefrina, una hormona similar a la adrenalina, que junto con la serotonina,
nos hace sentir bien y mejora nuestro estado de ánimo. Por tanto, beber café con
frecuencia puede empeorar nuestro humor. El consumo de cafeína puede ser
beneficioso en ciertas situaciones, pero no debe convertirse en un hábito ni en una
dependencia.