1. Planificación de Comunidad de indagación
Materia: Formación Ética y Ciudadana
Curso: 5to “A”
Tiempo estimado: 80 minutos
Tema: La Libertad y los condicionamientos
Coordinadoras: Carina Rampello- Verónica Romero
I-
Objetivos didácticos.
Introducir y problematizar el concepto de libertad.
Trabajar con la metodología de la comunidad de indagación.
Aplicar los conceptos teóricos a situaciones de la vida cotidiana.
II-
Contenidos conceptuales.
El actuar de las personas.
La Libertad y los condicionamientos.
III-
Contenidos procedimentales.
Argumentación de las opiniones propias.
Brindar puntos de vista.
Desarrollo de una actitud crítica.
Empleo de ejemplos.
IV-
Contenidos actitudinales.
Tolerancia ante la diversidad.
Participación activa en la comunidad de indagación
Respeto por los turnos de habla.
V-
Actividades.
Nos ubicaremos en círculo para poder trabajar como una comunidad de indagación. Luego,
propondremos leer entre todos la fábula el “Lobo y el perro”, tomando una oración de la misma
cada uno. Luego se pedirá a los alumnos que trabajen en grupos de a dos elaborando preguntas a
partir de los temas planteados en el texto. Se las leerá y anotará en el pizarrón enumerándolas.
Mediante una votación, se seleccionará una pregunta que luego se pondrá en discusión. Para
respetar los turnos de habla se utilizará un objeto que circulará para reconocer quién tendrá la
palabra. Durante la discusión se intentará poner en juego las habilidades del pensamiento, tales
como: entender el texto, dar razones, definir términos, prever consecuencias, buscar alternativas,
hacer buen uso de los ejemplos, comparar, contrastar, resignificar y desarrollar la empatía.
Finalmente se procederá a dar un cierre a la comunidad, teniendo en cuenta los tres aspectos:
sustantivo:¿Qué temas tratamos?; procedimental: ¿Pudimos dar razones?, ¿Cuándo?, ¿Definimos
términos?, ¿En qué momento?,¿Pudimos prever consecuencias?, ¿Cuándo?, ¿Se buscaron
2. alternativas?, ¿Se dieron ejemplos?, ¿En qué momento?, ¿Se hicieron comparaciones?, ¿Cuándo?,
¿Se pudo desarrollar la empatía?;y actitudinal: ¿Fuimos tolerantes con el otro?, ¿Nos pudimos
escuchar?
VI-
Materiales curriculares.
Fotocopia del texto seleccionado.
Pizarrón.
Objeto para dar la palabra.
VII-
Evaluación.
Se evaluará a lo largo de la clase:
Participación.
Capacidad de relacionar los temas tratados con conocimientos previos.
Capacidad de expresión y argumentación.
Actitud crítica y creativa respecto a la temática planteada.
VIII-
Anexo.
Plan de discusión:
¿Qué nos dice este cuento?
¿Por qué les parece que se refiere a ese tema?
¿Con qué otros temas podríamos relacionar el cuento?
¿Qué preguntas se hacen con respecto a esos temas?
¿Alguna vez les pasó algo parecido? ¿Cuándo?
¿En qué situación ustedes fueron el lobo y en cuáles el perro? ¿Por qué?
¿Cómo se sintieron ante esa situación?
Jean de Lafontaine: “El lobo y el perro”
Un lobo que se encontraba hambriento y a estas alturas muy flaco casi huesos, se encontró a un
mastín gordo y sano, que andaba recorriendo el bosque. Atacarlo y comerlo hubiera sido lo
correcto para el lobo, pero la realidad es que hubiera sido también, una pelea feroz, con un
enemigo bien dotado. El Lobo se le acerca para dialogar y alagar lo bien que se lo veía, a lo que el
mastín respondió: -No estás tan bien como yo, porque no quieres, deja el bosque y a tus amigos.
Sígueme y tendrás una vida excelente. Y el lobo preguntó: ¿Y qué tendré que hacer? –Casi nada,
dijo el Perro: atacar a quien ponga en peligro al amo; querer a los dueños de casa, y siempre
complacerlos. Con algo tan simple como eso que te digo, tendrás las sobras de todas las comidas,
huesos de pollos, carne fresca, frutas y verduras; y también cariño, como un elemento extra.” El
Lobo, se sintió feliz y lleno de gozo. Mientras caminaban hacia la casa del amo del mastín, el lobo
se dio cuenta que el perro tenía el cuello pelado. “¿Qué es eso? preguntó. –Nada.- ¡Cómo nada! –
Una tontería.- Pero algo es, esa peladura en el cuello. –Será la señal del collar con el que a
3. vecesestoy atado.- ¡Atado! exclamó el lobo: tú ¿No vas y venís a dónde querés? –No siempre, pero
eso, ¿qué importa? –Importa tanto, que no quiero ni el más grande de los tesoros, por renunciar a
mi libertad. Termino de decir el lobo, y se alejó corriendo, sin mirar atrás.
IX-
Bibliografía del alumno.
Lafontaine, J. “ El lobo y el perro”, www.cuentosyfabulas.com.ar
X-
Bibliografía del docente.
Kohan, W.- Waksman, V. (Comp.): ¿Qué es filosofía para niños? Ideas y propuestas para
pensar la educación, Oficina de publicaciones del CBC UBA, Bs. As., 1997.
Diseño Curricular Jurisdiccional, segundo ciclo.
Melagrani, A.: Material de circulación interna cátedra EDI, Rosario, 2013.
Lafontaine, J. “ El lobo y el perro”, www.cuentosyfabulas.com.ar
4. Planificación Comunidad
de indagación
Coordinadoras: Rampello, Carina - Romero, Verónica
Carrera: Profesorado de Educación Primaria
Curso y división:3ro, 3ra
Cátedra:E.D.I
Tema: La libertad y sus condicionamientos
Profesora:Melagrani, Amdrea
Año:2013
5. “El lobo y el perro”, Jean de Lafontaine
Un lobo que se encontraba hambriento y a estas alturas muy flaco casi
huesos, se encontró a un mastín gordo y sano, que andaba recorriendo el
bosque. Atacarlo y comerlo hubiera sido lo correcto para el lobo, pero la
realidad es que hubiera sido también, una pelea feroz, con un enemigo bien
dotado. El Lobo se le acerca para dialogar y alagar lo bien que se lo veía, a lo
que el mastín respondió: -No estás tan bien como yo, porque no quieres, deja
el bosque y a tus amigos. Sígueme y tendrás una vida excelente. Y el lobo
preguntó: ¿Y qué tendré que hacer? –Casi nada, dijo el Perro: atacar a quien
ponga en peligro al amo; querer a los dueños de casa, y siempre
complacerlos. Con algo tan simple como eso que te digo, tendrás las sobras
de todas las comidas, huesos de pollos, carne fresca, frutas y verduras; y
también cariño, como un elemento extra.” El Lobo, se sintió feliz y lleno de
gozo. Mientras caminaban hacia la casa del amo del mastín, el lobo se dio
cuenta que el perro tenía el cuello pelado. “¿Qué es eso? preguntó. –Nada.¡Cómo nada! –Una tontería.- Pero algo es, esa peladura en el cuello. –Será la
señal del collar con el que a veces estoy atado.- ¡Atado! exclamó el lobo: tú
¿No vas y venís a dónde querés? –No siempre, pero eso, ¿qué importa? –
Importa tanto, que no quiero ni el más grande de los tesoros, por renunciar a
mi libertad. Termino de decir el lobo, y se alejó corriendo, sin mirar atrás.