Las empresas deben lidiar con grandes cantidades de información sobre proveedores, clientes, empleados, facturas y pagos para operar de manera eficiente. Sus procesos de negocio coordinan las actividades de trabajo que utilizan esta información. El desempeño de una empresa depende de qué tan bien están diseñados y coordinados sus procesos de negocios, los cuales pueden darle una ventaja competitiva si le permiten innovar o desempeñarse mejor que sus rivales.