La gripe aviar es una enfermedad vírica que afecta principalmente a aves acuáticas salvajes y de corral, y en raras ocasiones puede infectar humanos. El subtipo H5N1 ha causado brotes desde 2003 infectando millones de aves y cientos de humanos. Los síntomas en humanos incluyen fiebre alta y otros síntomas gripales. El tratamiento con oseltamivir puede mejorar la supervivencia si se administra temprano. El principal factor de riesgo de infección humana es la exposición a aves infectadas
2. ¿Qué es la gripe aviar?
La gripe aviar es una enfermedad infecciosa vírica de las
aves (en especial de las aves acuáticas salvajes, tales
como patos y gansos) que a menudo no produce signos
manifiestos. Los virus de la gripe aviar pueden
extenderse a las aves de corral domésticas y causar
brotes a gran escala de enfermedad grave. También se
ha observado que algunos virus de la gripe aviar pueden
cruzar la barrera entre especies y causar enfermedad o
infección subclínica en el ser humano y otros mamíferos.
La mayoría de los virus de la gripe aviar no infectan al
ser humano, pero algunos, como el H5N1, causan
infecciones humanas graves.
3. Historia de la gripe aviar por virus
H5N1
El subtipo hiperpatógeno H5N1 infectó por vez primera al ser
humano en 1997, durante un brote aviar registrado en la Región
Administrativa Especial de Hong Kong (China). Desde su
reaparición generalizada en 2003 y 2004, este virus aviar se ha
propagado de Asia a Europa y África, y se ha arraigado en las aves
de corral de algunos países, produciendo millones de casos de
infección en estos animales, varios cientos de casos humanos y la
muerte de muchas personas. Los brotes en las aves de corral han
tenido repercusiones graves en los medios de vida de las personas,
la economía y el comercio internacional de los países afectados. La
circulación continua de virus H5N1 en las aves de corral,
especialmente cuando es enzoótica, sigue suponiendo una
amenaza para la salud pública, dado que estos virus pueden causar
enfermedad grave en el ser humano; además, cabe la posibilidad
de que sufran cambios que los hagan más transmisibles entre las
personas.
4. Características médicas
El periodo de incubación de los casos humanos de gripe
aviar por H5N1 puede ser superior a los 2 o 3 días
habituales en la gripe estacional. Los datos actuales
indican que el periodo de incubación oscila entre 2 y 8
días, pudiendo llegar hasta los 17 días.
Los síntomas iniciales son fiebre alta, generalmente de
más de 38 ºC, y otros síntomas gripales. En algunos
pacientes también se han descrito manifestaciones
tempranas tales como diarrea, vómitos, dolor abdominal,
dolor torácico, y sangrado por la nariz y las encías.
5. Tratamiento de la gripe
Hay pruebas de que algunos antivíricos, en
particular el oseltamivir, debe prescribirse en
las 48 horas siguientes al inicio de los
síntomas, pueden reducir la duración de la
fase de replicación del virus y mejorar las
perspectivas de supervivencia, también se
debe considerar la posibilidad de administrar
el fármaco en fases más tardías de la
enfermedad.
6. Factores de riesgo
El principal factor de riesgo de infección humana
parece ser la exposición directa o indirecta a aves
de corral infectadas, enfermas o muertas, o a
entornos contaminados. No hay datos que indiquen
que se pueda transmitir al ser humano a través de
la carne o los huevos de ave bien cocinados. No
obstante, el sacrificio, desplume, manipulación de
las carcasas y preparación para el consumo de
aves de corral infectadas, especialmente en el
entorno doméstico, probablemente sean factores de
riesgo.
7. Posibilidad de pandemia
Las pandemias de gripe (brotes que afectan a gran parte
del mundo) son acontecimientos impredecibles pero
recurrentes que pueden tener consecuencias sanitarias,
económicas y sociales mundiales. Las pandemias de
gripe se producen por la convergencia de dos factores
clave: la aparición de un virus de la gripe capaz de
causar una transmisión sostenida de persona a persona,
y una escasa o nula inmunidad de la mayoría de las
personas frente a ese virus. En un mundo tan
interconectado como el actual, una epidemia local puede
convertirse rápidamente en una pandemia, dejando poco
tiempo para preparar una respuesta de salud pública
que detenga la propagación de la enfermedad.