Este documento recomienda lavarse las manos en varias situaciones, incluyendo antes y después de comer y cocinar, después de ir al baño, cambiar pañales, tocar animales, manipular alimentos, toser o estornudar, limpiar productos de limpieza, visitar personas enfermas, curar heridas, ir al centro de salud, manipular dinero, tocar manillas de puertas y usar transporte público. El lavado de manos frecuente con agua y jabón es importante para prevenir infecciones.