España ha experimentado una modernización desde las últimas décadas que ha cambiado su forma de vida, estableciendo una democracia desde la Transición y consolidando un Estado de bienestar, aunque la crisis de 2008 ha hecho peligrar los gastos públicos. La sociedad española actual se ha vuelto más abierta e intercultural debido a la globalización, mayor libertad y educación para los jóvenes, y reconocimiento de derechos para las mujeres, a pesar de que todavía existen desigualdades y la población enveje