1. MENSAJE MILENARIO DEL
HOMBRE DE QANCHIS – CUSCO
Hugo Carlos Taype Retamozo
Adrián Alejandro Pocco Cáceres
Editorial Pensamiento y Acción
- Cusco 2018 -
2. Los profesores Taype y Pocco demuestran sobriedad científica
y ética; ellos constataron que no existen fuentes escritas sobre
Tambomachay. Cuando los descubridores describen los
pictogramas-litogramas, se esmeran en aproximarse, como
herederos presenciales de los arcaicos artistas, a la
cosmovisión primitiva que llevó a plasmar en imágenes eternas
los mensajes sobre la dura vida de aquellos tiempos de
cazadores y recolectores. Este nuevo hallazgo se produjo en
Tambomachay.
“Educar al ser humano, para liberar
a la humanidad”
B. Guevara G
3. MENSAJE MILENARIO DEL HOMBRE DE
QANCHIS CUSCO
“Si la historia es creación de los hombres y las
ideas, podemos encarar con esperanza el porvenir.
De hombres y de ideas, es nuestra fuerza”.
José Carlos Mariátegui
4. MENSAJE MILENARIO DEL HOMBRE DE
QANCHIS CUSCO
Primera edición, febrero 2018
Tiraje: 200 ejemplares
Hecho el depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú
Registro N° 2018-03513
Derechos de autor:
Hugo Carlos Taype Retamozo
Adrián Alejandro Pocco Cáceres
Presentación:
Mg. Bladimiro Guevara Gálvez
Diseño: Yuri Guevara Mesías
Editorial Pensamiento y Acción
Impreso en Talleres Gráficos
Pasaje Cabo Pantoja N° 147,
Breña
Tf. 6500850 - Celular
975145079
Correo: bladigg@gmail.com
5. 1
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Presentación
Nuestros amigos y colegas, Hugo Taype y Adrián Pocco,
avanzados de la pedagogía y de la identidad cultural cusqueña,
nos sorprenden ahora con valiosos hallazgos arqueológicos.
1. En la comunidad campesina de Tucsa, distrito de
Combapata, provincia de Canchis, Región Cusco, en el abrigo
rocoso de Tambomachay, reubicaron una compleja muestra de
arte parietal, mural, rupestre, con escenas de caza de
camélidos y otros.
2. También en Tucsa, en el sector de Santa Bárbara, existiría
un abrigo denominado Pukamachay, con pintura de un
camélido color blanco ya descubierto en 1974 por el
antropólogo Percy Paz, a la que hace referencia varios
investigadores y ponentes, señalando la misma imagen
diseñado hace 43 años por el descubridor antes citado, pero
ninguno ha ofrecido nuevas evidencias de su ubicación, para
reestudiarlo.
Los profesores Taype y Pocco demuestran sobriedad
científica y ética; ellos constataron que no existen fuentes
escritas sobre Tambomachay. Cuando los descubridores
describen los pictogramas-litogramas, se esmeran en
aproximarse, como herederos presenciales de los arcaicos
artistas, a la cosmovisión primitiva que llevó a plasmar en
imágenes eternas los mensajes sobre la dura vida de aquellos
tiempos de cazadores y recolectores. Este nuevo hallazgo se
produjo en Tambomachay.
La evidente vocación pedagógica de los coautores
debemos valorarla debidamente y sintetizarla como tesis
metodológicas y didácticas para los lectores y, de modo
6. 2
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
especial, para los maestros y para los alumnos de educación
primaria y secundaria del Cusco:
3. La investigación científica no solo tiene como objeto de
estudio los temas de los libros, sino los problemas que
presentan las comunidades, local, regional y nacional.
4. Las orientaciones pedagógico-didácticas provienen de los
paradigmas de la educación peruana vigentes, a los que han
estudiado: el Amauta Walter Peñaloza, fundador de la
educación integralista de la Cantuta; su discípulo José Antonio
Encinas, con su escuela ecológica y forjadora de líderes; y
Paulo Freire, guía de la educación concientizadora y liberadora.
De ellos los coautores derivan lecciones para aprender a
enseñar y a aprender:
- "El espacio geofísico es un libro abierto que educa a los
alumnos".
- "Lograr que sus estudiantes hablen de su territorio, de su
lugar de vida, de su convivencia social" (Antúnez).
- "Las escuelas deben volverse centros de saber local, en vez
de repetir supuestos saberes universales y absolutos"
(Freire).
- "Llevar a los estudiantes al campo, para que gocen de
libertad y experimenten formas de vida más allá de las aulas"
(Encinas).
- "Educar al ser humano en todo lo que tiene de humano" (W.
Peñaloza). ¡Felicitaciones a los colegas, autores y a los
lectores de nuestra gran nación!
Lima, Febrero del 2018
Bladimiro Guevara Gálvez
7. 3
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
A MANERA DE PROLOGO
Los docentes Hugo Carlos Taype Retamozo y Adrián Alejandro
Pocco Cáceres, después de haber epilogado su prolijo trabajo
intitulado “Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis-
Cusco”, nos dicen con el encomio del caso que “este hallazgo
es producto de su aventura pedagógica de maestros y
estudiantes”, un desafío posiblemente irresistible que les
impulsó a recolectar información de las raíces de su tierra. Una
“aventura andina” que empieza desde el año 2017 en las alturas
de Tucsa, luego se corona con mucho regodeo en el sector de
Tambomachay.
Información de las raíces de su tierra, que consciente o
inconscientemente estaba encaminada a impregnar en la
mente de los estudiantes la utilidad del patrimonio cultural de la
zona, de la existencia de muchas ruinas, poco o casi sin
importancia para algunos “investigadores occidentalizados” o
arqueólogos que por falta de presupuesto empezaron a
“picotear” algunas “ruinas” y luego abandonarlo.
Indudablemente, en estos tiempos de la globalización
neoliberal, la arqueología adquiere trascendental importancia
en la revaloración de identidades étnicas. De ahí que muchos
investigadores nos hablen de una “arqueología de la etnicidad”
o la de una “etnoarqueologia”, generando debates y discursos
entre intelectuales de las “ciencias sociales” sobre la utilidad de
esta nueva categoría social, de su rol pedagógico, de
reconocimiento de la transversalidad, que sirva en la
enseñanza-aprendizaje. Pues, como dice la investigadora
Consuelo Gonzales, la arqueología analiza restos del pasado y
su hallazgo plantea más preguntas que las que responden y
cuya actividad se desarrolla en gran parte fuera del aula en
contacto con el campo.
Los autores del “Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis-
Cusco, dentro de los marcos de la enseñanza-
8. 4
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
aprendizaje emularon su “aventura andina” fuera del aula,
trajinando con la anuencia de sus Apus a los lugares sagrados,
primero Pukamachay, después Tambomachay, que describen
con todas sus limitaciones teóricas sobre estas PINTURAS
RUPESTRES. Claro, no podíamos exigirles rigurosidad
científica en su trabajo, de consultar a otros investigadores del
tema o la interpretación social tomando como marco de
referencia al maestro EMILIO CHOY, CHILDE, ESPINOZA
SORIANO entre otras. Sin embargo, el gran mérito de los
coautores es haber recolectado valiosas informaciones que con
ulterioridad servirán a arqueólogos interesados en el tema. Es
más, incitará a que los demás docentes aviven y desarrollen
pensamiento crítico sobre el rol educativo de la arqueología,
sobre etnicidad en la arqueología, de sistematización de
muchas experiencias vividas por otros docentes.
Fundamentalmente la experiencia pedagógica del maestro
JOSE MARIA ARGUEDAS, que laboró como docente en el
colegio Pumacahua, que para muchos es la que se adelantó al
constructivismo, de revalorar Identidad regional.
En suma, los referidos docentes con la pasión académica,
venciendo muchas limitaciones y sin disputar espacios de la
arqueología y de los arqueólogos, nos suministran nuevas
informaciones y datos interesantes, que estamos seguros
servirán en los propósitos de comprender históricamente sobre
los “antiguos hombres de Canchis”.
Maximiliano Ochante Sauñe
9. 5
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
VESTIGIOS ARQUEOLÓGICOS ARCAICOS DE QANCHIS
Las pinturas rupestres de Tambomachay
En la historia, el período arcaico, según propuesta del
arqueólogo Luis Guillermo Lumbreras para los andes centrales,
es la etapa cronológica de la domesticación de plantas y
animales. Duró unos 6000 años (de 8000 a 2000) antes de
nuestra era; se desarrollaron las primeras culturas peruanas en
la costa (Caral, Sechín) y en algunas regiones de la sierra
(Chavín). Mientras que en las zonas altoandinas una parte de
la población se dedicaba todavía a la vida trashumante o
nómada de cazadores de camélidos silvestres y cérvidos.
Algunas comunidades comenzaron a reproducir camélidos en
cautiverio, para así convertirlos en los animales domésticos que
hoy conocemos: la llama, la alpaca y la vicuña. De estas tareas
surgieron las bases de la agricultura y la ganadería, que
favorecieron el desarrollo de las comunidades.
Durante el periodo arcaico, la zona altoandina de la
actual provincia de Canchis, con sus extensas superficies
cubiertas de pastos naturales, debe haber sido hábitat de
rebaños importantes de camélidos silvestres y cérvidos de coto
de caza para grupos de cazadores-recolectores, que se
movilizaban periódicamente por diversos territorios.
Aprovecharon los abrigos rocosos de la zona como refugio
temporal para ejecutar sus actividades de faeneo de la presa
abatida.
Determinados abrigos, por las características
morfológicas de la formación rocosa o por otras causales,
fueron usados también exclusivamente para actividades
rituales. Testimonio de ello son las pinturas rupestres, con las
que se decoraron las paredes de aleros naturales escogidos,
10. 6
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
en cuevas o muros pétreos y lisos, en los que se practicaba el
arte llamado parietal. El apasionado investigador en esta fase
de arte, Rainer Hostnig (2010) manifiesta que las pinturas o
grabados abarcan varios miles de años de producción, desde
el arcaico hasta los tiempos virreinales y republicanos
tempranos, como lo demuestra en varios artículos y textos
editados.
Pero ¿qué pintaban aquellos hombres? Según
Gargurevich (2002) pintaban: astros y constelaciones, huellas
de plantas humanas, temas antropomorfos, zoomorfos y
fitomorfos (felinos, auquénidos, aves, dragones, serpientes,
arañas, ranas, osos, monos, peces, zorros, iguanas, estrellas
de mar, gusanos y mariposas) figuras geométricas (espirales,
cuadriláteros, círculos, rombos, triángulos) armas, instrumentos
musicales, quipus, máscaras, figuras laberínticas, tacitas
(huecos pequeños en las piedras) y muchas figuras abstractas
en pictogramas cuyos significados solo ellos conocieron con
mayor amplitud y a detalle
UBICACIÓN: Los testimonios arqueológicos del Hombre de
Qanchis se ubican en la jurisdicción de la comunidad
campesina de Tucsa, distrito de Combapata, provincia de
Canchis, Región Cusco, rodeado por los apus tutelares de
Mujuni, pukaphallchayuc, kiswarniyuq y wasakjataluma. Es una
de las evidencias de la existencia de los primeros pobladores
de Qanchis, encontrado en Tambomachay, un abrigo rocoso
que probablemente cumplía varias funciones en cada época del
año: como refugio, vivienda, entierro y lugar de reunión o
ceremonia ritual. Para mostrar su sabiduría y transmitir sus
conocimientos de caza y otras acciones propias de la
cosmovisión del mundo de entonces, plasmaron en las paredes
de la cueva impresionantes imágenes, tarea realizada por
artistas experimentados.
11. 7
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
El piso ecológico se ubica entre Suni y Puna, a 3600 y
4350 metros s. n. m. de altura, lugar ideal para la crianza de
camélidos, actividad que condicionó la vida de los primeros
habitantes de este sector, que se dedicaron a la caza y
posteriormente al pastoreo de llamas y alpacas, actividad que
continúan practicando los actuales campesinos de la zona.
Para precisar, Tambomachay se localiza casi a un kilómetro
aproximadamente de la escuela primaria de Tucsa, cuesta
arriba y a la margen izquierda de la vía terrestre que va de
Sicuani a Phinaya.
Los profesores Hugo Carlos Taype Retamozo, docente
de la I. E. Walter Peñaloza y Adrián Alejandro Pocco Cáceres
de la I. E. Julio Alberto Ponce Antúnez de Mayolo, señalando
las figuras antropomorfas en la cueva de Tambomachay, . Foto
tomado el 16 de setiembre del 2017 por los coautores.
Lumbreras (2015) fundamenta que las “cuevas fueron
también una suerte de santuarios y los cazadores pintaron en
sus paredes quién sabe qué mensajes mágicos que sus hijos y
los hijos de sus hijos se encargaron de cuidar por siglos”. Hoy
nosotros tenemos el deber de continuar con la protección y la
difusión de estas pinturas para el conocimiento de la comunidad
científica. Al mismo tiempo este abrigo debe ser técnicamente
conservada por el Ministerio de Cultura, de esta manera valorar
12. 8
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
los aportes culturales del hombre de Tucsa, en su paso por
estas tierras de geografía agreste.
Descripción de las pinturas rupestres del abrigo rocoso de
Tambomachay
Nota: Las fotos mejoradas con el programa DStretch, son una
colaboración de Rainer Hostnig.
El panel con las pinturas rupestres de este abrigo se
extiende sobre varios metros lineales. Se pueden observar
varias concentraciones de pinturas, en el lado izquierdo (visto
desde el observador) se evidencia una figura antropomorfa
cabeza circular grande, dos pequeñas antenas, y manos
tridigitales, superpuestas sobre la cabeza de un camélido de
estilo naturalista de cuerpo voluminoso. Por el tamaño y la
forma de la figura humana, ésta debe ser de una época ulterior
a la del camélido.
En las fotos de arriba se observan varios camélidos de cuerpo
13. 9
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
voluminoso de diferentes tamaños orientados hacia la izquierda
o derecha en ellas se perciben que hay al menos dos paneles
con pinturas: uno en el lado izquierdo y otro en el lado derecho
del abrigo. Los camélidos del lado derecho parecen estar
encerrados en un cerco, pero hay otros fuera del mismo. En la
parte central se distinguen dos motivos geométricos, una línea
sinuosa que se asemeja al fenómeno natural (el rayo) y otra,
figura quebrada.
Por la forma de la imagen probablemente representa una
trampa de caza. Lumbreras (2015) al referirse a los cazadores
dice que "cazaban los animales con proyectiles primitivos, pero
también usaban trampas, desbarrancaban y empujaban a los
animales a los pantanos con ayuda de gritos o de fuego”
En la imagen se visualiza una figura antropomorfa con
tocados, probablemente simboliza a un danzante o algún
14. 10
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
personaje encargado de ejecutar ceremonias rituales.
En esta figura envolvente se observa al parecer un cazador en
medio de un círculo o rodeo natural.
A la izquierda, vista panorámica del abrigo rocoso de
Tambomachay, que contiene pinturas rupestres de motivos
zoomorfos, antropomorfos, geométricos, entre otros de color
rojo o puka, similar al Taku (pintura natural). Lumbreras (2015)
al referirse a estas evidencias arqueológicas afirmó: “En esos
restos está nuestra historia de miles de años de ocupación del
territorio peruano”. Por la esquina discurren fuentes de agua,
bendición de la naturaleza. A la derecha, el área lateral derecha
del abrigo de Tambomachay, visto desde 500 metros, se
encuentra a una distancia aproximada en 1 Km. a la escuelita
de Tucsa, cuesta arriba, aún se observa la vía terrestre de
15. 11
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Sicuani a Phinaya. Foto tomada el 6 de enero 2018 por los
coautores.
A la izquierda, impresionante imagen de la parte posterior del
abrigo Tambomachay. Es el testigo pétreo de muchos
acontecimientos históricos, desde la llegada del primer ser
humano al Tucsa milenario. Como se observa, al frente, muy
cerca al abrigo, hay una pequeña planicie, al pie de otra
montaña rocosa. Posiblemente este lugar haya sido escogido
por ser una zona estratégica para la caza-vivienda
A la derecha, entusiastas estudiantes Jesús Manuel
Gutiérrez Calachua y Emerson Mamani Ccayavillca, de cuarto
grado de la I. E. Walter Peñaloza Ramella, registrando en su
cuaderno de campo las evidencias encontradas, además
fotografían con su celular la figura antropomorfa y con tocados,
ubicada a la derecha del observador. Foto tomada el 6 de enero
del 2018.
La historia indígena del PERÚ, casi siempre ha sido
postergada y superficialmente estudiada en centros educativos
públicos y privados. Los peruanos debiéramos conocer
profundamente nuestras raíces; pero conocemos más de la
16. 12
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
historia de fuera que la nuestra, y por supuesto que nadie ama
o nadie se identifica con lo que no conoce. Es por esto que los
invito a ingresar a nuestro mundo Andino: filosófico y místico
(Juán Carlos Machicado Figueroa 2002)
El espacio geográfico es un libro abierto que educa
José Antonio Encinas citado por Elías Rossi (2008) nos
hace reflexionar, al decirnos que es “necesario realizar viajes a
los distritos o localidades cercanas, a fin de que los estudiantes
gocen de mayor libertad, experimenten formas distintas de
organizaciones al desplazarse fuera del aula y conozcan otros
lugares”. Ahí tenemos una valiosa orientación para investigar
en los diversos campos del saber humano: historia, arte sobre
rocas (pinturas rupestres, petroglifos), antropología,
arqueología, sociología, geología, literatura popular, etc. Por
consiguiente, el escenario geográfico viene a ser un importante
potencial como recurso didáctico, en el proceso enseñanza -
aprendizaje. De tal suerte el estudiante al interactuar con la
naturaleza: observa, describe, compara, semeja, se imagina,
admira, valora, indaga y toma fotos. Finalmente, con
satisfacción, podrá plasmar sus experiencias en diversos textos
creativos y artísticos.
Alva (2002) al referirse a la importancia económica de la
geografía manifiesta que “con la descripción y localización del
paisaje sabemos muy bien los recursos que se dispone;
podemos así desarrollar diversas actividades económicas
(minería, tala, ganadería, agricultura, industria, servicios, etc.).
Por eso las grandes firmas comerciales y multinacionales
realizan reconocimientos previos del espacio geográfico antes
de instalar sus industrias o brindar sus servicios”. Por
consiguiente, esa geografía andina en palabras de Portugal
(2015) aún sigue siendo el lugar donde mejor se respira el
17. 13
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
ambiente del aura…que nos trae muchos recuerdos de obras
culturales del pasado y del presente”. Ahí tenemos evidencias
del hombre arcaico de Tucsa que también supo elegir con
inteligencia escenarios geográficos ricos en flora y fauna, un
clima adhoc y la localización de abrigos rocosos que le
permitieron protección. Al respecto, Luis Lumbreras (2015)
aclara que “un cazador recolector no es un idiota que va por el
campo detrás de sus presas sin fijarse en el paisaje, en las
plantas, la tierra, el agua y el cielo”
Entonces, desde la cueva continuaron con sus
actividades cotidianas, dejando pruebas plasmadas en las
paredes de las rocas como soporte perdurable. Ahí está su
experiencia acumulada a lo largo de milenios.
Con relación a este hallazgo del Tambomachay el
rupestrólogo Rainer Hostnig, a partir de las evidencias
fotográficas del abrigo rocoso con pinturas rupestres, supo
manifestar que el “sitio con el abrigo en media pampa de la puna
es como un hito en el paisaje y debe haber llamado la atención
a los pobladores desde miles de años atrás. Un sitio que no solo
debe haber servido de refugio, sino también para reuniones del
grupo familiar extendido para celebrar ceremonias y rituales
relacionados con la caza de camélidos y la fertilidad de los
rebaños de los animales domesticados”.
Luego agrega que las pinturas rupestres tempranas
como estas son evidencias de la ocupación humana durante la
época de cazadores - recolectores, hace 4000 a 5000 años
atrás. En aquel entonces, los grupos humanos eran muy
móviles. Circulaban en espacios grandes según la existencia de
animales de caza, que le servían para sobrevivir.
18. 14
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Con el programa DStretch, colaborado por Hostnig a la
vista fotográfica, se ha podido reconocer numerosas figuras
arcaicas, entre camélidos de diferentes tamaños de estilo
naturalista y cazadores con armas. Por las evidencias
señaladas es definitivamente una zona importante para la
comunidad científica, educativa, turística. Probablemente aquí
se encuentra la partida de nacimiento de los Qanchis, porque
los paneles de estas pinturas es indiscutiblemente un auténtico
archivo de sabiduría ancestral, que encierra un verdadero libro
parietal de mensajes milenarios, que requiere una investigación
multidisciplinaria para entender mejor, todo el proceso histórico
del hombre de Qanchis en Tucsa.
El logro de este hallazgo es producto de nuestra
aventura pedagógica de maestros y estudiantes, cuando nos
implicamos asumiendo el desafío de indagar la información
sobre las “raíces de nuestra tierra”. Consistió en una visita de
estudios al entorno geográfico-histórico, porque allí está el libro
abierto de páginas interminables. Solo falta unificar los datos
esparcidos y luego construir pieza por pieza los hechos
históricos y geográficos, de esta manera se conduce al
estudiante: a saber, pensar, saber actuar, saber hacer y saber
convivir. Como dice Castillo (2003): “Nadie puede enseñar a
manejar bicicleta explicando en una pizarra”. El mejor
aprendizaje es el resultado de la combinación de la práctica con
la teoría. A lo que Antunes (2010) acota: “Hacer que los
estudiantes hablen a partir de su territorio, de su lugar de vida,
de su convivencia”.
En palabras de Paulo Freire: “Las instituciones
educativas pueden volverse centros de saberes locales en lugar
de ser repetidoras de saberes supuestamente universales y
absolutas".
19. 15
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
El nuevo hallazgo de Tambomachay nos trae a la
memoria palabras vertidas por Jorge Basadre citado por
Truyenque (1995) “…Solamente el mínimo porcentaje de
nuestra Historia Nacional, está escrita, y para poder conocer y
entender la Historia del Perú…primero debemos partir por
conocer nuestra historia local; porque allí es donde se
encuentra el mayor porcentaje de nuestra historia que no está
escrita y por consiguiente ignorada”.
Singular testimonio del hallazgo de un asombroso
resto arqueológico del hombre de Qanchis
La historia se escribe a base de fuentes materiales,
escritas, orales y otras evidencias, y algunas fuentes tienen que
ser contrastadas con la realidad. Razón por la cual nuestro
objetivo principal era constatar en el mismo lugar del hecho
histórico el arte rupestre de Pukamachay, hicimos la primera
exploración el trece de agosto 2017, en las alturas de Tucsa no
encontramos nada, retornamos sin éxito, pero en nuestra
perseverancia recordábamos los versos de Machado:
“caminante no hay camino; el camino se hace al andar”, y ese
caminar de paso firme nos llevó a otro descubrimiento nuevo.
Era la madrugada, dos de la mañana del sábado 16 de
setiembre del 2017. Fue una mañana muy frígida, tiritando de
frío salimos de la ciudad de Sicuani en nuestro segundo viaje,
nos embarcamos en un camión de carga con destino a la
comunidad de Tucsa. Luego emprendimos el sendero cerro
arriba, en este trayecto, como andino, hicimos un ritual de
súplica a nuestros apus, Mojoni, Pukaphallchayoq,
Kiswarniyoq, Wasaqhataloma y conrdorjina, encomendando
nuestros propósitos. Continuamos ascendiendo la montaña, en
20. 16
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
el tiempo del recorrido el ambiente se cubre con densa neblina
y envuelve el viento con la lluvia; es insoportable el frio, pero
luego de escalar el camino extenuante llegamos a la cumbre, lo
cual nos tomó unas cuatro horas. Se podía apreciar allí un
escenario fabuloso, paisaje agreste, cubierto de esparcido
pajonal, el clima gélido.
Más tarde, a nuestro retorno, divisamos a lo lejos una
chosita en una quebrada; descendemos lentamente, donde
encontramos a un comunero cuyo nombre es Hilario Quispe
Mamani. Nos recibió con amabilidad y lleno de alegría. Luego
de una conversación muy cordial nos dirigió a un abrigo rocoso
conocido como Tambomachay... Una profunda sorpresa se
apoderó de nosotros: una obra impresionante de nuestros
antiguos hombres de Qanchis, llena de sabiduría impregnada
en la roca del abrigo; arte rupestre de color rojo, a través del
cual nos siguen transmitiendo sus estados emocionales, su
creatividad, fantasía, comunicación gráfica, magia, religión y
entre otros.
Pinturas rupestres de Pukamachay: un enigma…
Luis Barreda Murillo (1995) menciona que el
antropólogo Percy Paz Flores, en 1974, confirma el hallazgo de
puntas de proyectil pulidos de cuarzo, sílex y obsidiana.
Descubrieron también, en la misma cueva, pinturas rupestres,
en el sector de Santa Bárbara, por la comunidad de Tucsa,
provincia de Canchis. El mencionado profesional presenta el
dibujo de un camélido color blanco ubicado en un abrigo de
nombre Pukamachay, en la jurisdicción de la comunidad antes
mencionada. Desde aquella fecha, durante cuarenta y tres
años, otros investigadores se han documentado y muestran el
mismo dibujo. Motivo por el cual, apasionados en la búsqueda
de nuestras raíces, y especialmente por la necesidad de acudir
21. 17
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
a la misma fuente monumental del abrigo, nos enfocamos en la
búsqueda del sitio citado, en dos viajes, dado que en el cerro
Pukamachay no hay ninguna huella de pintura rupestre con
estas características. Nos preguntamos ¿se trata de un arte
secreto de los antiguos Qanchis? Nadie lo sabe, porque ningún
poblador preguntado encontró jamás este misterioso arte en el
cerro de Pukamachay. Obra que se encontraría escondida en
el corazón de algún Apu tutelar de esta comunidad.
Asimismo, concerniente a este testimonio arqueológico
del Hombre de Qanchis, sin ir muy lejos, en una importante
revista "Visión Pumacahuina. Huellas De Mi Pueblo”, de la I.E.
Mateo Pumacahua, de Sicuani, editado en 2012, refiriéndose al
periodo precerámico de la provincia de Canchis, vuelven a citar
a Pukamachay. Tomando como fuente de información: Cusco,
Historia y Arqueología Pre-Inka, 1995, del arqueólogo Luis
Barreda Murillo y esta misma institución, junto a la I.E. Andrés
Alencastre Gutiérrez, del distrito de El Descanso, el 01 de
diciembre del 2017 organizaron un evento educativo cultural de
trascendencia histórica, de intercambio de experiencias
educativas. Siendo los expositores alumnos de ambas
instituciones, y reconocidos arqueólogos de la Dirección
Desconcentrada de Cultura del Cusco, que, al referirse a las
zonas arqueológicas de la provincia de Canchis, mostró la
misma imagen de la misteriosa llamita blanca de Pukamachay.
Que a la fecha ya habíamos encontrado un significativo
abrigo del Tambomachay, con contenido de arte rupestre
sorprendente, que se hallaba escondido en un terreno de suave
pendiente, hasta ese momento no había sido registrado por los
investigadores.
22. 18
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
A la izquierda dibujo de un camélido color blanco que
representa a la pintura rupestre de Pukamachay diseñado por
Percy Paz Flores en 1974, a la derecha don Hilario Quispe
Mamani, sentado al lado de su cabaña, picchando su coquita;
para olvidar el hambre y protegerse del frío, vive bajo el abrigo
de los apus, recibiendo con profundo agradecimiento los
alimentos de la Pachamama. El mencionado ciudadano nos
condujo al descubrimiento de Tambomachay el 16 de setiembre
2017.
LA CABAÑA
Como sombrero chino
como hongo de bofedal
como puma agazapado
está la chosita pastoril
en la puna brava clavada.
Allí vive el pastor andino
con su pobreza de siglos
y sus harapos.
FUENTE: JESUS DEL ANDE.
23. 19
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
PERIODIFICACION DE LA CULTURA ANDINA DEL CUSCO
DR. LUIS BARREDA MURILLO
PERIODOS ASENTAMIENTOS HUMANOS CRONOLOGIA
ESTADO
INKA
3ra FASE INKA INVASION Y
GENOCIDIO ESPAÑOL……….
2da FASE INKA EXPANSIVO……
1ra FASE INKA INICIAL………….
1,532 d.C.
1,400 d.C.
1,100 d.C.
PERIODO
S
REGIONA
LES
LUCRE
KILLKI
QOTAKALLI
1,000 d.C.
800 d.C
600 d.C
FORMATI
VO
1ra FASE CHAÑAPATA
2da FASE MARCAVALLE
800 a.C.
1,000 a.C.
PRECERAMIC
O
AGRICULTORES
PASTORES
RECOLECTORES
5,000 a.C.
De acuerdo al cuadro de periodificación de la cultura andina del
Cusco, y con el descubrimiento de Tambomachay, el proceso
evolutivo del hombre de Qanchis, se iniciaría en la parte alta de
la provincia de Canchis. Con los primeros hombres en Tucsa,
en el periodo PRECERAMICO, por consiguiente, desde allí,
probablemente descendieron a PUKARA, (PERIODO
FORMATIVO) ubicado en la parte alta del cerro del mismo
nombre, en la jurisdicción de la comunidad de Pampa Ansa y
posteriormente bajaron a Markhayre, que corresponde al
periodo de los ESTADOS REGIONALES, esta información se
HOMBRE DE:
QORQA
CHAWAYTIRI
QANCHIS
CHUMBIVILCAS
YAURI
INVASION
WARI
750 d.C.
24. 20
Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
ha obtenido gracias a la entrevista al Arqueólogo Canchino
Fidel Florencio Ramos.
Los Apus que circundan el abrigo de Tambomachay
¿Qué son los Apus? Según Proandes (2000) son cerros
tutelares con los que se mantiene alguna relación especial.
Algunos de ellos, son cerros coronados de nieve, en cuyas
faldas se realizan ofrendas a manera de pagos o de tinkas.
Dentro del cerro vive un espíritu llamado wamani al cual se le
invoca con mucha reverencia pidiéndole fecundidad humana,
natural y animal, para Mires (2005). El Apu o cerro Waka, en la
cosmovisión andina, no es solo poder en sí mismo: es protector,
dador, guardián, autoridad, por ejemplo, en Sicuani el Apu
Jururo es Juez. Aquí observamos Tambomachay, vistas de
distintos ángulos
Preguntas para pensar y reflexionar
1. ¿Cómo pueden aprovechar y beneficiarse con estas pinturas
rupestres los comuneros de Tucsa?
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Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
2. ¿Qué deben hacer las autoridades del distrito de Combapata
para proteger y difundir este impresionante arte arcaico?
3. ¿Qué importancia tiene las pinturas rupestres de
Tambomachay para la historia del Perú?
4. ¿Se puede probar que la partida de nacimiento de los
Qanchis se encuentra en Tucsa?
5. ¿Por qué las pinturas rupestres, a pesar de miles de años,
siguen vigentes?
6. ¿Cuál es la utilidad pedagógica del arte rupestre peruano?
7. ¿Qué importancia científica guarda las pinturas rupestres de
Tambomachay para los arqueólogos, historiadores y
rupestrólogos?
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Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Vistas del paisaje natural de Tucsa
Vista panorámica de la morfología del territorio de Tucsa, visible
en la parte alta del terreno. Foto: 16/09/17.
A la izquierda Cactus de flores llamativas adherido a las grietas
de la roca, se encuentra en pleno proceso de floración, dando
vida al paisaje natural. A la vez su bella flor roja nos hace evocar
a Jesús Cárdenas Huayllaro al decirnos: En tardes de bellos
celajes/ en madrugadas de fresco rocío, / las flores se quejan
adoloridas/ sobre el polen saqueado/ por las rubias
obreras,/sobre el néctar dulce que robó/ el verde picaflor./Así
ocurre entre los hombres,/unos engañan otros roban/el trabajo
de los hermanos,/de los hambrientos el pan,/el agua de los
manantiales.
A la derecha Cactus de espinas punzantes, más conocido como
Huaraqo, por poseer pelusa blanca. Foto: 13/08/17
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Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Llamas alimentándose en los cauces de un riachuelo; estos
animales en palabras de Guevara (2016) quedaron retratados
en escenas de caza en petroglifos y pinturas rupestres,
representaciones rituales y mágicas que el hombre portaba en
su pensamiento y en su cultura simbólica; fue una forma
peculiar de ver el cosmos en el delicado orden natural de la
geografía donde empezó a desarrollarse y prosperar. Por
consiguiente, en esas imágenes sobre superficie de rocas se
muestra la importancia que tuvo esta coexistencia entre el
hombre y el camélido, según el mismo autor los camélidos
llegaron de Norteamérica hacia Sudamérica vía istmo de
panamá hace aproximadamente tres millones de años. Foto:
13/08/17.
Al lado izquierdo, formación rocosa de figura de un túnel; al
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medio se eleva otra roca parecida al órgano genital del varón.
A la derecha cañón en la parte alta de Tucsa, por donde se
desplazan torrentes de agua, producto del aumento de las
precipitaciones pluviales. Foto: 16/09/17.
A la izquierda, el Hakaqllu, luego de picotear busca su comida,
levanta la cabeza al notar nuestra presencia. Es un ave que
aparece en varios cuentos. A la derecha, una pareja
inseparable de Huallatas, en un bofedal en Tucsa, cerca al río
Yanamayo.
Cuentan que el Hakaqllu conoce el secreto de las plantas
ablandadoras de rocas; por eso esta ave, construye su nido en
rocas duras; al respecto Lange (2006) manifiesta que Hiram
Bingham había observado que esta ave parado sobre sobre una
roca, tenía hoja en su pico, vio cómo el ave, depositó la hoja
sobre la piedra y la picoteó, día siguiente volvió; para entonces
se había formado una concavidad donde antes estaba las
hojas. Con este método, el ave creó su “taza” en la piedra, para
coger y beber las aguas que salpicaban del río; se sabe que el
jugo de la planta Kechuca hace “gelatina las piedras”. Este
vegetal es encontrado en el Cusco, a más de 4,500 m.s.n.m.
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Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Asimismo, se menciona a otra plantita de nombre Punco-Punco
muy parecida a la “caña brava”, que puede disolver las rocas.
Para Alfonsina Barrionuevo es un pájaro del inkario, convierte
la piedra en barro con el diamante que lleva en el pico. Foto
13/08/17.
Copia fascimilar del diario UNO, de la ciudad de Lima, que informa
sobre el descubrimiento del abrigo rocoso de Tambomachay, con una
singular muestra de arte parietal, mural, rupestre. Publicado el 22 de
Abril del 2018.
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Mensaje Milenario del Hombre de Qanchis
Comunidades criadoras
Es probable que haya sido Charles Darwin (en “El origen del
hombre”, 1871) el primero en acuñar la figura de “cazadores–
recolectores” en relación a las comunidades primordiales de
Europa.
Unos años después, en 1877, el antropólogo y escritor Lewis
Henry Morgan consolidaría esta imagen de la evolución en “La
Sociedad Primitiva”: el estado inferior de la humanidad pasó a
ser conocido como “salvajismo”.
Se debe reconocer, no obstante, que Morgan sostuvo también
que los llamados pueblos primitivos eran en muchos aspectos
y sobre todo en las formas colectivas de la propiedad y el
sentido de comunidad–, muy superiores a las llamadas
sociedades civilizadas.
A la luz de estos trabajos, el filósofo Friedrich Engels, en 1884,
publicó “El origen de la familia, la propiedad privada y el
Estado”, un tratado sobre materialismo histórico en el que
definió a las sociedades primordiales como “la infancia del
género humano”, consolidando de alguna forma la imagen
estereotipada de los “cazadores–recolectores”.
Pero la teoría del “hombre cazador” nunca ha sido corroborada
por el registro fósil. Esto no quiere decir que no exista una
economía nómade: en efecto, la cacería y recolección es una
de las formas de subsistencia humana más persistentes en la
historia. Pero es necesario evitar los prejuicios y las
calificaciones reductoras, sobre todo si pueden ser réplicas
simplificantes de las imágenes estándar moldeadas en
occidente.
Para el caso de nuestro continente y con mayor énfasis en el
caso de los Andes, es imperativo replantear nuestros enfo-ques
y desmontar el andamiaje atenazante de los patrones
impuestos.
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El arte rupestre, la evidencia cultural más antigua de nuestros
pueblos originarios, está más relacionado probablemente con
la virtud criadora, mutua, de las comunidades natural y humana,
fundamentalmente en relación al agua.
Esa capacidad criadora y fecunda que prevalece en la vida
agrícola de las actuales comunidades andinas, debería ocupar
el núcleo y cogollo del quehacer educativo en países como el
nuestro.
Alguien decía que “Hay más cosas olvidadas por recordar
que cosas nuevas por descubrir”. En nuestro caso, la
excepcional y sabia raigambre de nuestra historia podría ser el
mejor remedio contra el azote de la ignorancia y la desmemoria,
contra el flagelo de la corrupción, la vileza y la desmedida
codicia depredadora.
Saludo el esfuerzo de Hugo Carlos Taype Retamozo y Adrián
Alejandro Pocco Cáceres por los pasos emprendidos con este
“Mensaje milenario del hombre de Qanchis, Cusco”, en la
tarea de comprender, enaltecer y proteger la fortuna histórica
de su tierra.
El respeto y ofrenda, desde aquí, a los apus Mojoni,
Pukaphallchayoq, Kiswarniyoq, Wasaqhataloma y Condorjina,
así como el saludo a don Hilario Quispe Mamani: es la sabiduría
y el ánimo de los comuneros que prevalecen lo que hará posible
la consideración y relevancia de nuestra propia cultura.
Alfredo Mires Ortiz, de Cajamarca
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Ubicación de las pinturas rupestres del abrigo rocoso de
Tambomachay. (Fuente de elaboración propia).
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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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