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1. Regina
Realizado por : Padre Mamerto Menapace osb - Hno. Fernando Fortunato osb
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Gn 3,1 – 24
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Música: Escuchando el “Señor, Jesús” de T. L de Victoria, colaboremos al crecimiento

3. Veníamos comentando que el hombre de la
Biblia parte de una idea muy clara. Todo lo
que está en el mundo es obra de Dios. Y todo
lo que Dios creó es bueno.
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4. Pero también se da cuenta que muchas cosas no
están bien. Y entonces se pregunta:
-¿Por dónde entró el mal en este mundo?
Y se responde:
-El mal entró porque el hombre no obedeció al plan de
Dios. El proyecto de Dios no incluía el mal. El mal entró
de prepo por otro lado.
Y ahí venía el relato del pecado de nuestros primeros
padres.
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5. -¿Cuál fue la reacción de Dios frente al
pecado del hombre?
¿Y cuál la del hombre frente a Dios?
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6. Este Sienten vergüenza por haber desobedecido a Dios,
y por estar desnudos tratan de esconderse de la mirada
de Dios.
Cuando Adán y Eva comieron
de la fruta se les abrieron los
ojos y descubrieron que
estaban desnudos. Entonces
entrelazaron unas hojas de
higuera y se las pusieron de
taparrabo. Y cuando oyeron
que el Señor Dios se paseaba
por el jardín a la hora de la
tarde, se escondieron entre los
árboles para que el Señor Dios
no los viera.
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7. Pero Dios, que lo ve todo lo llamó:
-¿Dónde estás?
-Te oí en el jardín y me entró miedo porque estaba desnudo y
por eso me escondí.
-¿Y quién te hizo ver que estabas desnudo, si siempre lo
estuviste? ¿No será que sentís vergüenza por qué no cumpliste
mi plan y no fuiste fiel a mi palabra?
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8. Y entonces el hombre, en
vez de reconocer
simplemente la verdad
quiso excusarse acusando:
-La mujer que me diste, ella
me tentó y por eso comí la
fruta. La mujer que me diste
por compañera fue la que
me convidó.
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El Señor Dios entonces se dirige a la mujer
y le pregunta:
-¿Qué hiciste?
Y ella en lugar de reconocer simplemente
su verdad, le echa la culpa a la serpiente:
- La serpiente me sedujo.

9. La Biblia narra con mucha finura sicológica la realidad
del pecado. No solo el pecado de Adán y Eva. Está
describiendo lo que suele suceder en nosotros
mismos cuando desobedecemos la voluntad de Dios.
Cuando nosotros pecamos, no es tanto que
ofendemos a Dios, que es infinito.
Si a Dios le duele nuestro pecado es porque sabe el
mal que nos estamos haciendo a nosotros mismos.
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10. Siguiente
Dios viene con ganas de
curarnos. Y nosotros en
vez de presentarle la llaga
y decirle:
-Tata, perdoname.
No. Nos escondemos, y le
echamos la culpa a los
demás. No queremos
reconocer nuestra
responsabilidad. Y así
andan las cosas en el
mundo. Eso es al menos
lo que nos cuenta la
Biblia.

11. Que el Señor los bendiga y les
regale una linda semana y un
mejor Día del Señor.
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12. “fortuweb"
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13. Génesis 3
14 Entonces Yahveh Dios dijo a la serpiente: «Por haber hecho esto,
maldita seas entre todas las bestias y entre todos los animales del campo.
Sobre tu vientre caminarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.
15 Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: él
te pisará la cabeza mientras acechas tú su calcañar.»
16 A la mujer le dijo: «Tantas haré tus fatigas cuantos sean tus
embarazos: con dolor parirás los hijos. Hacia tu marido irá tu apetencia, y él
te dominará.
17 Al hombre le dijo: «Por haber escuchado la voz de tu mujer y
comido del árbol del que yo te había prohibido comer, maldito sea el suelo
por tu causa: con fatiga sacarás de él el alimento todos los días de tu vida.
18 Espinas y abrojos te producirá, y comerás la hierba del campo.
19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan, hasta que vuelvas al
suelo, pues de él fuiste tomado. Porque eres polvo y al polvo tornarás.»
20 El hombre llamó a su mujer «Eva», por ser ella la madre de todos
los vivientes.
21 Yahveh Dios hizo para el hombre y su mujer túnicas de piel y los
vistió.
22 Y dijo Yahveh Dios: «¡He aquí que el hombre ha venido a ser
como uno de nosotros, en cuanto a conocer el bien y el mal! Ahora, pues,
cuidado, no alargue su mano y tome también del árbol de la vida y
comiendo de él viva para siempre.»
23 Y le echó Yahveh Dios del jardín de Edén, para que labrase el
suelo de donde había sido tomado.
24 Y habiendo expulsado al hombre, puso delante del jardín de Edén
querubines, y la llama de espada vibrante, para guardar el camino del árbol
de la vida.
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