Iván André Altamirano Niebla 301 Solar Juvenil Oaxaqueño

1. Los mendigos del zócalo
Dice la leyenda, que en el zócalo de la ciudad de Oaxaca, durante la colonia, la Santa Inquisición
juzgaba y condenaba a quienes viera como sospechosos o culpables de brujería o comunicarse con el
diablo. Toda la gente que se juzgaba en ese sitio, según la leyenda, si era considerada culpable, primeo
era despojada de todos sus bienes y luego los ahorcaban o quemaban enfrente de todo el pueblo,
según la gravedad de sus actos y que tanta gente participó. Toda esa gente era juzgada muy
severamente y no querían morir, aparte de que sus últimos momentos de vida eran muy humillantes y
sentían mucha impotencia, deseaban muy fuertemente poder seguir con su estilo de vida o al menos
seguir vivos.
Por la necesidad de los juzgados de mantenerse vivos y recuperar su dinero en ciertos casos, se dice
que sus almas se quedaron ligadas a ese lugar y estas almas han estado apareciendo en el zócalo como
pordioseros o mendigos desde su muerte. Son gente que no se sabe en qué momento del día llegan al
zócalo y que caminan en el sin rumbo, solo pidiendo dinero y con la mirada caída y triste, y a
determinada hora, como a las 7:00 PM, se meten a la Catedral a rezar para terminar saliendo de la
iglesia y desaparecer justo antes de que se cierre la iglesia.