Este documento discute la noción de la "presencia divina constitutiva", que es el elemento increado del ser humano que nos define y constituye esencialmente a través de nuestra relación con Dios. Según el documento, la presencia divina constitutiva nos es dada en el momento de la concepción y habita nuestro espíritu, poniéndonos en un estado de apertura hacia lo infinito a través de un diálogo con Dios. Adicionalmente, el documento contrasta la estructura de las cosas con la de los seres