1. “El sistema de los objetos” Jean Budrillard.

2. El crédito.

3. “Derechos y deberes del ciudadano consumidor” Los objetos se ofrecen hoy bajo el signo de diferenciación y de laeleccióntambién algunos objetos clave bajo el signo del crédito. El crédito se sobreentiende como un derecho del consumidor y en el fondo como un derecho económico del ciudadano. Se considera una libertad dentro del sistema por lo que la restricción a las posibilidades se entendería como una represalia de parte del estado hacia la sociedad.

4. “El sistema de crédito no afecta al derecho al objeto de serie más que al modelo, y nada le impide a uno comprar un Jaguar a plazos. Sin embargo, es un hecho que el modelo de lujo se compra al contado y que el objeto comprado a plazos tiene muy pocas posibilidades de ser un modelo”.

6. Grupos pertenecientes a la burguesía sienten una especie de peligro moral al crédito, cosa que cada vez es menor, lo que persiste son supervivencias de la noción tradicional de propiedades, esto afecta a toda la pequeña clase poseedora, fiel los conceptos de herencia, ahorro y patrimonio.

8. El usuario a crédito aprende poco a poco a utilizar con entera libertad el objeto como si fuera “suyo”. Hasta el punto de que el momento mismo en que lo paga es aquel en que se ha gastado. Ejemplo: Comida. “Será mío cuando haya sido pagado”. Es algo como un futuro anterior.

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10. Existe una angustia permanente ya que el objeto hipotecado se nos escapa en el tiempo; en el fondo siempre se nos ha escapado. Y esta huida se suma, en otro plano, a la del objeto de serie que escapa continuamente hacia el modelo.

12. El sistema de crédito, en el fondo, solo ilumina un modo muy general de relación con los objetos en el contexto moderno. Podríamos decir que estamos en constante retardo, respecto a nuestros objetos.

13. “La precesión del consumo: una ética nueva.” Hasta la generación pasada, los objetos adquiridos lo eran en propiedad plena. Materializaban un trabajo consumado. No hace mucho tiempo aún la compra del comedor, auto, era el término de un largo esfuerzo de economía.

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15. El consumidor moderno integra y asume espontáneamente este constreñimiento sin fin : comprar para que la sociedad siga produciendo, para que pueda continuar trabajando el hombre fin de poder pagar lo que ha comprado. Es lo que expresan perfectamente los lemas norteamericanos.

16. “¡Comprar es seguir trabajando!” “¡Comprar es tener asegurado el porvenir”! “¡Una compra hoy es un desocupado menos. Tal vez usted!” “¡Compra hoy la prosperidad y la tendrás mañana”!

17. “El milagro de la compra” Comprar a crédito equivale a la apropiación total de un objeto por una fracción de su valor real. Inversión mínima por una ganancia maravillosa. Los objetos no tienen como destino, de ninguna manera, el ser poseídos y usados, sino solamente el ser producidos y comprados.

19. La publicidad. Se propone como tarea informar de las características de un determinado producto y fomentar su venta. Esta función “objetiva” es, en principio, su función primordial. Posteriormente se vuelve una publicidad no “real” inútil y poco importante. En otras palabras la publicidad “se roba la película” pasando a ser en sí un objeto de consumo.(revistas)

21. De la información, la publicidad ha pasado a la persuación y luego a la “persuación oculta”. Esto asustó a mucha gente ante la amenaza de de un condicionamiento totalitario del hombre y de sus necesidades. Encuestas han mostrado que la fuerza del influjo publicitario era menos grande de lo que se creía: se produce muy rápidamente una reacción por saturación.