2. • El honor es una cualidad moral que lleva al sujeto a
cumplir con los deberes propios respecto al prójimo y a
uno mismo. Se trata de un concepto ideológico que
justifica conductas y explica relaciones sociales.
• El honor, en muchos casos, está vinculado a la dignidad.
Por supuesto, no hay que pasar por alto el término
matrícula de honor. Dentro del ámbito educativo se hace
utilización de aquel que viene a establecer la máxima
puntuación posible de un alumno en un examen o como
nota final de un curso o asignatura. En concreto esta
nota está por encima del conocido sobresaliente y en el
ámbito universitario permite que en el curso siguiente el
estudiante tenga una serie de reducciones en los pagos
de matrícula.
3.
4. • Con origen en el término latino disciplina,
la disciplina es el método, la guía o el saber de
una persona, sobre todo en lo referente a cuestiones
morales. El concepto también se utiliza para referirse a
una rama científica o artística.
• La noción de disciplina, por lo tanto, puede estar
vinculada al comportamiento o a la actitud de alguien.
Se dice que la disciplina es buena cuando la persona
respeta las reglas, las leyes o las normativas dentro de
algún ámbito: “Insultar a una maestra es una falta grave
de disciplina”, “Todos los jugadores tienen que respetar
la disciplina impuesta por el entrenador”.
5. • Por lo general, la disciplina exige respetar un cierto
código de vestimenta, cumplir con un horario y dirigirse a
los superiores jerárquicos de una manera en particular,
entre otras obligaciones. Esto quiere decir que, en una
empresa, la disciplina puede incluir usar uniforme,
ingresar a la fábrica a las 8 de la mañana y no tutear al
jefe.
6. • La lealtad es el cumplimiento de aquello que exigen las
leyes de la fidelidad y el honor. Según ciertas
convenciones, una persona de bien debe ser leal a los
demás, a ciertas instituciones y organizaciones (como
la empresa para la cual trabaja) y a su nación.
7. • La lealtad es una virtud que se desarrolla en la
conciencia y que implica cumplir con un compromiso aun
frente a circunstancias cambiantes o adversas. Se trata
de una obligación que uno tiene para con el prójimo. Por
ejemplo: “El ayudante técnico mostró su lealtad al
entrenador despedido y dejó su cargo”.
• Lo contrario de la lealtad es la traición, que supone la
violación de un compromiso expreso o tácito. El caso
más comúnmente citado es la infidelidad en una relación
de pareja: no ser leal a esa persona con la cual se
estableció un lazo sentimental es considerado una
traición.
8. • Se habla de lealtad, además, para hacer referencia a
la gratitud, compañerismo y amor que algunos
animales son capaces de mostrar a las personas.
El perro y el caballo suelen ser mencionados como
animales leales, capaces de arriesgar sus propias vidas
para salvar a sus familiares humanos. Con respecto a
esta visión en particular, es necesario hacer ciertas
aclaraciones.
• En primer lugar, este tipo de lealtad se considera una
entrega absoluta, que no repara en el trato recibido, que
no exige nada a cambio. A pesar de la crueldad que
encierra este tipo de relaciones, se espera que
un animal doméstico sea feliz recibiendo la cantidad de
alimento que el veterinario de turno decida que es la
adecuada, un modesto paseo por la ciudad y eventuales
juguetes para calmar su ansiedad, y que soporte
cualquier castigo por parte del ser en el cual confía.