La Constitución de 1917 consolidó el juicio de amparo en los artículos 103 y 107. El artículo 103 estableció que los tribunales federales resolverán controversias por violaciones a garantías individuales. El artículo 107 contiene reglas exhaustivas para el amparo que debieron dejarse para leyes secundarias. Más tarde, en 1919 y 1936 se expidieron leyes reglamentarias del amparo, siendo la actual de 1968 con reformas.