1. REFLEXIÓN SOBRE LAS PERTURBACIONES EN LOS PROCESOS DE ENSEÑANZA.
Realizado por Lila Jaramillo y Miguel Anwar Mazuera.
Estudiantes del programa de Maestría en Tecnologías Educativas y Medios Innovadores para la Educación.
Docente Doctor Julio Cabero Almenara.
En la educación presencial sin apoyo de las TICs, las perturbaciones que se pueden presentar son de carácter humano, pues al ser un proceso en el que intervienen el emisor y los receptores se pueden dar casos que dificulten la decodificación de los mensajes por parte de los estudiantes, lo cual termina generando falta de atención, desmotivación y lo más alarmante es que se presente falta de interés del estudiante hacia la clase. En este caso es muy común que el docente tome el papel protagónico de la clase y le reste importancia al estudiante. Este último no es reconocido como un interlocutor válido sino que es tomado como una caja en la que se debe guardar cierto tipo de información como en el estudiante solo se guardan conocimientos, el docente, entonces es el pilar del proceso, el que establece reglas sin mediar con sus discípulos. Esto deja ver que el tipo de modelo pedagógico utilizado es el tradicional y a pesar de intentar erradicarlo de las escuelas, se sabe que aún se encuentra muy presente en las prácticas de las instituciones educativas de Colombia tanto de carácter privado como de carácter público. Una de las grandes dificultades que se presenta, especialmente, en los colegios públicos es el hacinamiento los grupos generalmente oscilan entre 37 y 42 estudiantes lo que obviamente genera un mal clima, el docente debe levantar la voz y dedicarle poco tiempo a cada estudiante, sin contar con el ambiente, que en algunas ciudades de Colombia la temperatura promedio es de 30 grados (Condiciones ambientales) lo que incomoda en gran medida y afecta la actitud ante la clase.
Lo primero que debemos analizar es el número de estudiantes que componen el grupo, bien sabemos que a mayor número de estudiantes el docente se ve obligado a subir el volumen en su voz y mantener el control en un aula que bajo estos aspectos supone todo un reto, pues el docente muchas veces debe demostrar su autoridad para mantener la atención del grupo, maniobra que si bien es necesaria al final resulta siendo contraproducente, pues genera roces y en últimas termina representando un gasto de energía y de esfuerzo que termina afectando la motivación del profesor y de los estudiantes. Como estudiante pude experimentar, en primaria y secundaria, y son precisamente estos dos niveles educacionales los que más sufren con los hacinamientos estudiantiles, logré contemplar de primera mano todas las complicaciones que se pueden presentar en un salón de clases con más de treinta estudiantes; ruido, estrés, dificultad para concentrarse, pues el volumen de voz del profesor no superaba el ruido del ambiente externo y el ruido que algunos compañeros producían a mi alrededor. Así mismo las diferencias culturales, o regionales para ser más exacto, pueden ser una perturbación, pues como anécdota puedo compartir que tuve un profesor que era originario de la Costa Atlántica y enseñaba trigonometría, y debo aclarar que no soy un erudito en los números, pero siempre me defendía y me las arreglaba para poder sacar buenas notas en los trabajos y en los exámenes, el caso es que este profesor venía con un acento porteño muy enraizado y por naturaleza para mi oído y para todo el grupo, el profesor era difícil de entender, todo porque la pronunciación de sus palabras eran una serie de frases

2. encadenadas una tras otra (vocalización confusa, rapidez, diferencias culturales entre el emisor y el receptor) casi que parecía un trabalenguas y esto se debía a que ese era el dialecto de la región de donde provenía, está de más por decir que sus clases eran incomodas por esta razón. El impasse se solucionó debido a que el grupo tuvo una notable desmejora en el promedio durante el primer periodo, lo que obligó a realizar una reunión en la que participaron los padres de familia, los estudiantes, el director de grupo y el profesor, luego de esto el docente adecuó su manera de hablar y ya en las clases era más pausado para ello.
Ya aportando antecedentes desde mi experiencia como docente, he notado que en mis estudiantes existe una deficiencia en la decodificación del mensaje, pues debo aclarar que mi ejercicio como tutor se ha enfocado en los adultos ya que los proyectos en que participo así lo establece. Lo cierto es que he tenido la oportunidad de orientar en distintos procesos de enseñanza en el uso de las TICs a muchas personas que pertenecen a diferentes extractos sociales, unos con basta formación y familiarización con algunos recursos tecnológicos y otros con poco conocimiento al respecto, pero lo que es una realidad, al menos desde mi practica es que la gran mayoría, exceptuando unos pocos, no entienden el lenguaje ni los signos que integran el uso de estos recursos, lo cual ha obligado a que los tiempos establecidos y los aspectos curriculares planteados dentro del proceso se vean alterados.
Para el primer caso considero que la educación que sea presencial debe contar con los recursos espaciales que garanticen que existirá una comunicación fluida por parte del profesor y sus alumnos (emisor – receptor y viceversa), personalmente considero que quince estudiantes por aula es un número aceptable y que lo mejor sería que se redujera a diez, lastimosamente para que esto se materialice, el sistema educativo se vería obligado a hacer más esfuerzos de inversión tanto en infraestructura como en contratar personal calificado para cubrir la demanda de los estudiantes, lastimosamente el sistema público está aún muy lejos de garantizarlo, pues los excesivos costos que esto demanda no le permiten al Estado realizar tal inversión, la otra cara la muestra el sector privado que quizá si cuente con los recursos, pero no todos tienen la oportunidad de pagar una educación con calidad, pues el sector privado exige un costo alto. En Colombia un estudio del Dane (Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas) arrojó que finalizando el 2013, en el país 19.3 millones de personas estaban en la pobreza1, y ni que decir de los sectores rurales que regularmente no cuentan con muchos beneficios y menos en el campo de la educación. Así mismo por el lado de los docentes, pienso que deben empezar por hacer un análisis a priori antes de iniciar el proceso de enseñanza, bajo el cuál determinarán el nivel de entendimiento que los alumnos pueden llegar a tener del tema que se les va a exponer, que esperan tanto los estudiantes como el docente, lograr durante la enseñanza, es decir, llegar a unos acuerdos y para esto es determinante la primer clase, pues será el espacio donde se conocerán y empezarán a entablar una relación que durará bastante tiempo. Pero es necesario reconocer el nivel de conocimiento que los estudiantes tienen frente al tema, ya que así el docente implementará las medidas y recursos que garantizarán que tendrá una clase, por lo menos libre de perturbaciones de tono de voz, falta de estructuración de acuerdo a los receptores, dominio de la información y diferencias culturales entre el emisor y los receptores. Aquí un artículo que puede ser de mucha ayuda para ello (http://josechuferreras.wordpress.com/2013/09/05/cinco-pasos-para-organizar-el-primer-dia- de-clase/). Así mismo tanto las instituciones como su recurso humano deben reconocer que
1 http://www.elespectador.com/noticias/economia/colombia-tiene-146-millones-de-pobres-y-45-millones-ind-articulo- 450022

3. la clase deben ser tomada como un espacio de construcción del conocimiento, y no se puede pensar que debe ser medida en temas, en tiempo y en espacio. Los temas importantes son los que se desarrollan dentro del aula y con la dirección del docente. El tiempo para ello es un tiempo limitado por un reloj y un horario, y el espacio para la construcción del conocimiento suelen ser las cuatro paredes del salón y la compañía de un tablero o una pizarra. Aquí se debe propiciar la ampliación de las temáticas por parte de los estudiantes a través de las diferentes tecnologías a las que la mayoría de los estudiantes tienen acceso y en el caso de que a algunos se les dificulte, la escuela debe procurárselos y enseñarle a utilizarlos. Cómo medida se debe priorizar el papel protagónico del estudiante en el aula de clases, y tener en cuenta que debe ser tomado como un interlocutor y parte clave de su propio conocimiento.
Formación presencial con el apoyo de TICs.
Muchos docentes utilizan hoy en día los recursos tecnológicos con el objetivo de aprovechar sus beneficios para obtener ciertas ventajas en sus clases, de todos, algunos lo hacen porque reconocen su potencial y disfrutan interactuar con estas herramientas y otros porque la transformación del entorno los obliga a utilizar estos recursos, ya que la gran población estudiantil reconoce plenamente los sistemas y están ampliamente familiarizados con su lenguaje, además el amplio espectro de información es casi que infinito y los estudiantes reconocen que la red tiene a la orden del día un gran cúmulo de datos que ni siquiera los profesores manejan. Es cierto que los avances tecnológicos son una excelente herramienta para la práctica pedagógica, no obstante se deben tener en cuenta algunas perturbaciones que disminuirán el éxito de lo planeado y en esa medida se le deben buscar soluciones. He notado como muchos compañeros dejan responsabilidad en las máquinas y han tomado una actitud totalmente pasiva ante la educación, sus clases están guiadas por los videos, consultas en la Internet, presentación de diapositivas y así creen que se ajustan a las exigencias actuales de la educación y observo como los estudiantes se desmotivan ante este tipo de actividades por que no le encuentran ningún atractivo, creo que enseñar utilizando las tic demanda muchos esfuerzos. La tecnología es una herramienta que se debe saber utilizar, hablar de conocimiento sobre la tecnología no es suficiente, comúnmente se observa que estas ventajas se sub-utilizan, muchos docentes cuenta con conocimientos en tecnología y se jactan de utilizarlos en sus clases pero no saben hacer uso de ellas, salvo en asuntos básicos.
Para mi el primer grupo de docentes tienen una amplia ventaja sobre el segundo grupo, ya que están casi que sincronizados con sus estudiantes y generan un acercamiento casi imperceptible, porque se identifican y simpatizan con el uso de los recursos digitales, emisor y receptor disfrutan de la navegación en la Internet, usan redes sociales, y en sus quehaceres diarios, existe una amplia injerencia de la tecnificación. Mientras que el segundo grupo, gran parte de ellos se comunican a través del correo electrónico, pero discrimina el uso de las redes sociales porque la ven como un foco de intercambio de hábitos de ocio y el punto de encuentro de jóvenes y adultos desocupados que no tienen nada más que hacer, si bien es cierto que las redes sociales se han convertido en espacios de intercambio de toda clase de información y que un gran porcentaje de ella es banal, también hay que reconocer que es un espacio donde pueden confluir aquellos que deseen expresar pensamientos categóricos, o entablar debates respetuosos que enriquezcan a todos aquellos que se sientan atraídos por participar de ellos y que lo más importante es que pueden confluir un

4. sinnúmero de participantes sin límites, es así como se empieza a evidenciar un cierto tipo de resistencia en estos docentes lo cuál de plano les impedirá aprovechar el potencial que tienen estos recursos para convertir el proceso de enseñanza en un espacio dinámico, de libertad de opinión e intercambio de ideas y ante todo que entretenga, dicho en el buen sentido de la palabra claro, y así desarrolle una predisposición positiva en cuanto a la motivación del grupo. Es importante que los docentes y me refiero a aquellos que aún desconfían de las capacidades que poseen las herramientas tecnológicas, y piensan que con imprimir ficheros y trasladarlos de un lugar a otro, o proyectar un material audiovisual para impartir una clase ya han identificado y están totalmente compenetrados con el conocimiento que determina el buen uso de las TICs, comiencen a mentalizarse que están lejos de entender el verdadero sentido de la era informacional y que es el momento de abandonar los prejuicios que desarrollan la apatía hacia los instrumentos y medios, y que deben dedicarse de lleno a reconocerlos y entenderlos, porque más temprano que tarde, la era de la información cobijará todo, pues en estos momentos son pocos los niveles de la sociedad que aún se mantienen vírgenes de la intromisión de la S.I, pero en pocos años terminarán cediendo. Pienso que en este punto estos docentes tienen una doble responsabilidad, ya que deben empezar por darle vuelta al chip y comenzar con su propio proceso de adaptación y luego de esto deben continuar con el proceso de realizar, como se debe, su responsabilidad de enseñar, pues deberán aprender a orientar a sus estudiantes para que adquieran los conceptos y herramientas necesarias que les permitan navegar con rumbo fijo en ese mar caótico y de distracción. Creo que cuando la educación es presencial y permite el ingreso de las TICs se presenta el inicio de un cambio en el paradigma de la enseñanza, pues desde este momento, el docente comienza a reconocer al estudiante como un sujeto activo en el proceso de la enseñanza, pues en muchas ocasiones los estudiantes se convierten en auxiliares y le colaboran al docente en la manipulación de los dispositivos, precisamente esto refleja una de las perturbaciones que se presentan regularmente en esta situación y es aquella que corresponden a la falta de familiaridad del docente con el uso de estos recursos, pues son profesores, que como expuse al principio reconocen a estos instrumentos como aliados que potencializan sus clases pero en el fondo no aprecian estos recursos como debieran, esto les impide tomarlos en serio y por ende les impide reconocer la importancia que conlleva a explorarlos a fondo. También se pueden presentar inconvenientes representados en la mala calidad del audio y el vídeo, o en el mal funcionamiento repentino del instrumento, pero todo esto es resultado de la falta de conocimiento y familiaridad por parte del profesor frente a los recursos, por lo tanto no reconoce que en la perfección de la tecnología, también existen debilidades y falencias. Considero que la mejor estrategia para disminuir este aspecto negativo es que las instituciones se preocupen por contratar docentes capacitados en el uso de las TICs, al menos en un nivel básico y se enfoque en mantener una capacitación constante, a través de talleres, seminarios y diplomados a su planta docente para reforzarlos y fortalecerlos en este campo de constante transformación. En resumen Los niños, adolescentes y jóvenes tienen un acceso continuo a los diferentes medios de comunicación social y esto tiene una marcada influencia en la sociedad en la cual ellos se desenvuelven, pero este es un conocimiento informal, por tanto el éxito de la inclusión de nuevas tecnologías y su eficacia dependerá de una aplicación planificada de dichos recursos. Se puede decir, que la introducción de las tecnologías de la información y la comunicación en las instituciones educativas deben hacerse de forma sistemática y por pasos a través de un proyecto que permita la coordinación del profesorado y le permita enriquecerse con las aportaciones de todos los profesionales. Las tecnologías de la información y de la comunicación se deben estar al servicio de los objetivos de la educación a través del aprendizaje de habilidades participativas, comunicativas y de colaboración, y así

5. seguro que tendrán éxito.
FORMACIÓN VIRTUAL COMPLETAMENTE A DISTANCIA.
Se pretende que con este tipo de enseñanza los beneficios sean inestimables, ya que las limitaciones espacio temporales dejan de ser una barrera y la información se haya por doquier. A pesar de que estas razones no son una invención, es necesario no apresurarnos y ante todo asegurarnos de que el proceso de enseñanza que va a carecer de la presencialidad material del tutor y de los alumnos, no va a implicar falencias que conlleven a un fracaso y peor aún corroboren las hipótesis de quienes desprestigian este tipo de formación, pues hay que empezar por identificar algunos aspectos, como por ejemplo tener en cuenta que existirá la incertidumbre de los estudiantes que experimentarán un cambio, pues como todos, estamos acostumbrados a recibir clases de otra manera y hacerlo frente a una maquina genera inquietud, por lo menos al principio mientras pasa el proceso de adaptación, también hay que reconocer que la gran cantidad de textos que, necesariamente se deben leer para suplir la no asistencia a una aula de clases demanda tiempo que generalmente es escaso, pues las personas que acuden a la educación virtual generalmente lo hacen por que el trabajo o la distancia no permiten que se de otra forma, como podemos apreciar estas son perturbaciones que se presentan pero que pueden ser diezmadas partiendo de la profesionalidad y el reconocimiento de estos aspectos por parte del docente, es decir en esto es importante la paciencia, así mismo la adaptación a las plataformas especiales para la educación virtual necesita tiempo. Los estudiantes de este tipo de modalidad a distancia virtual deben invertir quizá más tiempo que los estudiantes de modalidad presencial, ya que los humanos, por naturaleza estamos más familiarizados con los procesos de aprendizaje escuchando y hablando que que escribiendo y este tipo de educación demanda un constante ejercicio de la escritura por que de esto depende en gran medida el éxito.
Quiero aportar desde mi experiencia, algunos procesos de formación a distancia, los cuales han sido soportados exclusivamente en el uso de las TICs, a través de estos he podido reconocer varios factores que se han convertido en dolores de cabeza para la institución y para los tutores, lo primero es que para que una persona decida realizar un proceso de formación virtual a distancia, debe estar plenamente consciente del conocimiento y su propio nivel de manejo de estos recursos, me he topado con personas que se integran con toda la motivación y disposición a realizar un proceso de capacitación a través de estos recursos, pero no tiene la más mínima idea de prender un computador o de qué es un motor de búsqueda y ni siquiera tiene una cuenta de correo, esto es algo que debe ser determinado desde el principio porque puede generar retrasos y alteraciones no concebidas en el libre desarrollo del proceso y puede ser frustrante tanto para el docente como para el estudiante, lo segundo es que hay muchas personas, incluyendo profesionales que no les interesa obtener formación y menos en el campo de las TICs, tuve recientemente una experiencia con profesionales de la justicia en mi ciudad, personas con un considerable recorrido y una formación académica admirable, que debían ser formadas en la apropiación de conocimientos y el uso de las herramientas TICs de cara a la implementación del nuevo sistema de justicia que empezará a regir en el país, fue desconcertante percibir la apatía de la gran mayoría de ellos en un proceso de capacitación que tiene como fin beneficiarlos en todos los aspectos, esto a pesar de que se encuentran en una ciudad dotada con todos los recursos en infraestrutura y conectividad, la causa, claramente derivó de una total falta de compromiso y autoritarismo por parte de los receptores. Caso contrario a los profesionales

6. de la justicia que se ubicaban en las poblaciones menos centralizadas y que debían lidiar con las carencias de recursos y conectividad, pues fueron ellos quienes demostraron mayor interés en recibir la capacitación, esto me lleva a pensar que una gran parte de la población que vive en las ciudades más modernizadas sufren de un fenómeno de egolatría intelectual y narcisismo, que posiblemente consideran que al saber enviar un correo electrónico y subir fotos en las redes sociales los hace eruditos en la Sociedad de la Información, esto puedo representarlo como una perturbación, por otro lado considero que la educación a distancia debe estar enfocada en quienes estiman que necesitan de ella ya que no todos pueden sentir o reconocer que dependen de ella, más mientras la educación tradicional sigue vigente, la educación a distancia se debe entender, de momento, como una opción, una ventana que muestra el futuro, un porvenir lleno de un sinfín de posibilidades y que a ella se acercan quienes confían en sus intenciones, esto permite que el estudiante adquiera desde el primer momento compromiso con el proceso de formación, pues fue él quien se acercó y es aquí donde el docente o tutor virtual debe aprovechar su conocimiento e iniciar un proceso que permita al estudiante reconocer que fue su mejor apuesta, es aquí donde el tutor debe invitar al estudiante a que se mire como una fuente de información y conocimiento y lo exalte y motive a que participe activamente y vea la educación como algo novedoso y atractivo, pues el uso de las TICs lo permiten, pero para lograr esto deben ser bien encaminadas. Creo que la mejor manera para materializar los mejores resultados en la educación virtual a distancia es destinar toda nuestra energía para lograr que las Instituciones de Formación cumplan con los objetivos que la Sociedad de la Información pide a gritos, y eso se resume en hacer un trabajo a conciencia y dedicado a la orientación de los estudiantes para que se conviertan en focos de desarrollo social y reconstrucción de los tejidos sociales haciendo sano uso de los recursos y la información.