1. ROL DE LA INFORMÁTICA EN LA SOCIEDADES Fue en la década de los setenta cuando se comienza a hablar de la "sociedad de la información". El eslogan de "la información es poder" vino a abanderar toda una serie de cambios que iban a configurar nuevas pautas sociales, motivadas por el auge del sector servicios. Ya no se trata de desarrollar bienes tangibles, como se venían desarrollando hasta ahora en una sociedad industrial. Se destinará a "producir" bienes ligados a la educación, la salud, la información, el medio ambiente, el ocio, etc. Y que configuran a grandes rasgos lo que se ha dado en llamar sociedad postindustrial. La información con las nuevas tecnologías, se independiza de los sujetos. Las personas son despojadas de la posesión, de ser la fuente y manantial de la información. En último término, no es la información para los sujetos y gracias a ellos, sino que los sujetos son para la información y, al final, serán los productos de la misma. Es decir, "el mundo físico ha dejado de ser el destinatario básico de la transformación. El destinatario ahora, es la totalidad de lo real, los seres humanos incluidos“.
2. FORMAS DE ORGANIZACIÓN Y DE GESTIÓN La explosión de la información constituye para muchos un problema y no sin razón es que surgió el término "infoxicación", precisamente para referirse a dicho fenómeno desde la perspectiva del usuario. Es difícil para un individuo común sentirse rodeado de información, no disponer de las herramientas necesarias que viabilicen su consulta y, sobre todo, decidir cuál es realmente útil y reúne los requisitos de calidad necesarios. El tiempo para decidir y utilizar la información que responde a sus necesidades y exigencias se prolonga más de lo planificado. El problema entonces está en la calidad y en la visibilidad de la información y no en su cantidad. En la nueva sociedad de la información, en la que vivimos, es evidente el valor de la gestión de la información para las empresas y las organizaciones, un factor esencial para su éxito. Sus productos son indispensables para aumentar la competitividad, mejorar la calidad de los productos y servicios, procurar la satisfacción de los clientes y desarrollar un fructífero mercado.
3. ESTRATEGIAS Y PLANIFICACIÓN INFORMÁTICA El análisis de información es decisivo para la interacción con aquellos profesionales implicados en la dirección, que tienen ante sí la responsabilidad de la toma de decisiones. Ellos requieren información representada gráficamente, análisis comparativos, síntesis, análisis de contenido, resúmenes y servicios a la medida, que garanticen la certeza de sus determinaciones, la transparencia en sus consultas, el despeje de ruidos e incertidumbres para su veredicto. Al mismo tiempo, necesita estar actualizado del quehacer cotidiano interno y externo de la empresa; sólo así, es posible liderar la organización, enlazar grupos de trabajo o centralizar y difundir información en la compañía. Una herramienta importante para un analista de información es el mapeo de tendencias para obtener información alternativa útil a la toma de decisiones y la elección del rumbo más conveniente para el logro de los objetivos y metas de la empresa.
4. BENEFICIOS ESPERADOS CON LA GESTIÓN DE LA INFORMACIÓN Cada día crecen las evidencias empíricas de la relación entre el desarrollo tecnológico y el crecimiento económico, y la importancia de la tecnología, especialmente el papel central que tiene la innovación, en la construcción y sostenimiento de la competitividad de empresas y países. El modelo basado en el empuje del conocimiento científico y tecnológico enfatiza el rol de la ciencia en la producción de los inventos, o la dependencia de éstos de anteriores adelantos en la tecnología; en cambio, el modelo de arrastre de la demanda acentúa la necesidad percibida y la evaluación de necesidades potenciales o latentes, como el evento que precede la secuencia invención – innovación.