El documento habla sobre dar de beber al sediento como obra de misericordia. Jesucristo se presenta como el agua viva capaz de calmar toda sed. También discute la sed de felicidad, futuro y esperanza en personas, y la necesidad de socorrerlas. Finalmente, destaca la importancia de apoyar a pequeños agricultores para acabar con el hambre.
PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN1.pdf
HOJA PARROQUIAL NÚMERO 66
1. AGENDA DE LA SEMANA
Número 66
18 Octubre 2015
DAR DE BEBER AL SEDIENTO
Todos tenemos sed de agua y al saciarla la bebemos con
ganas. Pero ¿de qué más tenemos sed? Sería bueno que nos lo
planteáramos...
El agua simboliza la vida (por ejemplo, en el paso del mar
Rojo) y la muerte (por ejemplo, en el diluvio). En la Biblia aparece
como un lugar de gracia (como los manantiales del templo) y también
de tentación (como en la crisis de Masá y Meribá).
Jesucristo se presenta como el agua viva, capaz de calmar toda
sed. Una catequesis emblemática la encontramos en el capítulo 4 del
evangelio de San Juan: una mujer samaritana, sedienta de agua y de
felicidad; Jesús poco a poco se le ofrece como fuente de agua viva,
capaz de hacer surgir en ella un manantial.
Cristo pide dar de beber al sediento, aunque sea sólo un vaso de
agua (cf. Mt 10,42). En África, por ejemplo,
grandes sectores de la población no tienen
acceso al agua potable y padecen sequías
que dificultan la producción de alimentos.
Esto implica: descubrir la sed que nos rodea,
discernir la aportación que cada uno puede
dar y estar dispuesto a compartir.
Esta actitud de dar de beber al sediento
se extiende a toda persona que tiene sed de
felicidad, de futuro y de esperanza, a las que
habremos de socorrer para cumplir esta obra
de misericordia.
SEMANA CONTRA LA POBREZA (12 a 18 de octubre)
La encíclica «Laudato si» del Papa Francisco
nos recuerda que Dios pone la creación en
nuestras manos, para que sea el lugar donde nos
desarrollemos como personas y como familia
humana. Somos parte privilegiada de la creación y
tenemos, por tanto, la responsabilidad de respetarla,
de cuidarla y de hacer posible que de ella puedan
disfrutar todas las personas y no sólo algunas.
Cuando nos sentimos hijos e hijas de Dios
es más fácil percibir a las demás personas como hermanos y hermanas, como
familia humana. Y hermanos con derecho a la alimentación. Cáritas Internationalis
ha realizado un estudio sobre el hambre. Son estas las causas y consecuencias del
hambre: la dificultad de acceso a los recursos para los pequeños agricultores, la baja
productividad agrícola, el cambio climático, la especulación sobre los precios de
los alimentos, la falta de infraestructuras, las guerras y la falta de agua limpia. Esto
afecta al hambre y la desnutrición, la salud y mortalidad, la migración, la educación,
la disparidad de ingresos, la corrupción, la delincuencia, y la dependencia de
donaciones y asistencia social.
Cáritas está trabajando en la mejora de la agricultura, fundamentalmente en la
formación de los agricultores, la agricultura sostenible, la distribución de alimentos o
semillas después de emergencias y la mejora de la nutrición y el estado de salud. La
mejor forma de acabar con el hambre es apoyar a los pequeños agricultores, mientras
tratan de adaptarse al cambio climático.
Día 20, martes 19,45: Confirmados adultos del curso pasado
Día 21, miércoles 19,00: Eucaristía en la Ermita
19,30: Itinerario 1 de formación de adultos
Día 22, jueves 19,45: Padres de Primera Comunión
Día 23, viernes 09,30: Eucaristía y Exposición del Santísimo
18,00: Oración comunitaria
18,45: Consejo pastoral
Día 25 DOMINGO 30º DEL TIEMPO ORDINARIO
Obra de misericordia
del mes:
"Dar de beber al sediento"
2. Primera lectura
Lectura del libro de Isaías (53,10-11)
El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento, y entregar su vida como expiación: verá
su descendencia, prolongará sus años, lo que el Señor quiere prosperará por su mano.
Por los trabajos de su alma verá la luz, el justo se saciará de conocimiento. Mi siervo
justificará a muchos, porque cargó con los crímenes de ellos.
Salmo
Sal 32,4-5.18-19.20 y 22
R/. Que tu misericordia, Señor,
venga sobre nosotros,
como lo esperamos de ti
Que la palabra del Señor es sincera,
y todas sus acciones son leales;
él ama la justicia y el derecho,
y su misericordia llena la tierra. R/.
Los ojos del Señor
están puestos en sus fieles,
en los que esperan en su misericordia,
para librar sus vidas de la muerte
y reanimarlos en tiempo de hambre. R/.
Nosotros aguardamos al Señor:
él es nuestro auxilio y escudo.
Que tu misericordia, Señor,
venga sobre nosotros,
como lo esperamos de ti. R/.
Segunda lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (4,14-16)
Mantengamos la confesión de la fe, ya que tenemos un no sacerdote grande, que
ha atravesado el cielo, Jesús, Hijo Dios. No tenemos un sumo sacerdote incapaz de
compadecerse nuestras debilidades, sino que ha sido probado en todo exactamente
como nosotros, menos en el pecado. Por eso, acerquémonos con seguridad al trono de
la gracia, para alcanzar misericordia y encontrar gracia que nos auxilie oportunamente.
Evangelio
Lectura del evangelio según san Marcos (10,35-45)
En aquel tiempo, se acercaron a Jesús los hijos de Zebedeo, Santiago
y Juan, y le dijeron: «Maestro, queremos que hagas lo que te vamos
a pedir.» Les preguntó: «¿Qué queréis que haga por vosotros?»
Contestaron: «Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha
y otro a tu izquierda.» Jesús replicó: «No sabéis lo que pedís, ¿sois
capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el
bautismo con que yo me voy a bautizar?» Contestaron: «Lo somos.»
Jesús les dijo: «El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os
bautizaréis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el
sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo;
está ya reservado.» Los otros diez, al oír aquello, se indignaron
contra Santiago y Juan.
Jesús, reuniéndolos, les dijo: «Sabéis que los que son reconocidos
comojefesdelospuebloslostiranizan,yquelosgrandeslosoprimen.
Vosotros, nada de eso: el
que quiera ser grande, sea
vuestro servidor; y el que
quiera ser primero, sea
esclavo de todos. Porque
el Hijo del hombre no ha
venido para que le sirvan,
sino para servir y dar su
vida en rescate por todos.»
"QuiencelebralaEucaristía
nolohace,porqueseamejor
quelosdemás,sinoporque
sereconocenecesitado
delamisericordiadeDios."
Papa Francisco
REFLEXIÓN
Jesús nos presenta un camino hacia el Calvario, nos anuncia su
destino de humillación, nos enseña la figura del “siervo”; y los que
nos decimos cristianos, nos quedamos como si no nos importara
nada. Nos recomienda que seamos servidores y que no busquemos
ser servidos. Jesús de Nazaret nos repite una y otra vez, que la
verdadera felicidad viene del servicio a los demás, no de ostentar
cargos importantes, ni tener mucho poder. Vivir es servir. Solo así,
podremos participar de la misma gloria del Señor, una gloria que no
es vana y pasajera, sino que será eterna.