Las ciencias naturales se dividen en varias ramas debido a que el universo es muy amplio y complejo, por lo que resulta difícil que una sola persona estudie y comprenda toda la información. Esto ha dado lugar a campos específicos como la física, la química, la biología y sus subdisciplinas como la zoología, la genética, la botánica y la ecología, para permitir un estudio más detallado de diferentes áreas de la naturaleza.