reflexion

1. ¿Qué hacer con la basura electrónica?
Tu primera computadora, tu primer celular, la televisión con la que la pasabas todo el
tiempo cuando eras niño. Tenían razón, las cosas ya no las hacen como antes, los celulares
se vuelven un pisapapeles fino, los computadores se ponen lentas después de unas cuantas
actualizaciones y las aplicaciones dejan de ser útiles para los sistemas viejos. ¿pero te has
puesto a preguntar que cada vez que cambias un aparato electrónico el daño que haces?
Todos los años en el país se desechan más de 300 mil toneladas de basura tecnológica, la
mayor parte electrodomésticos y eso que no se cuentan todos los aparatos que están
guardado en bodegas, escuelas u oficinas.
Y de tan solo pensar de la gran cantidad de componentes de los que están hechos los
aparatos electrónicos y la mayoría metales que literal mente son tóxicos para los humanos
como mercurio, plomo, cadmio, níquel, selenio, arsénico, cromo y bramo y que, de no ser
debidamente desechados, se convierten en un riesgo para la salud y el ambiente.
¿Es necesario cambiar de aparato cada poco? Tenemos que disminuir el consumo y la otra
es recapacitar acerca de si estamos sacándole el máximo provecho a nuestras inversiones y
si nos pueden seguir sirviendo a futuro.
Hay varios problemas, no solo es culpa de nosotros que no sabemos controlarnos, hay otros
factores como que las grandes empresas de la tecnología cambian pequeñas cosas para
decir que un producto es nuevo ya sea cambiando los puertos o las conexiones del
procesado que si quieres actualizar tu dispositivo, necesaria mente tienes que cambiar todo
el dispositivo porque la nueva tecnología no la van a hacer compatible con la vieja, así
aseguran de que o cambias el producto entero o te quedas con el viejo con cada vez más y
más problemas hasta que te cansas y vas y compras otro.
En conclusión, tenemos que reducir nuestro consumo y sacarles el máximo provecho a
nuestros aparatos tecnológico, así podremos disfrutar de un futuro más limpio y sin menos
basura para nosotros y para nuestros hijos.