La Web 2.0 se refiere a sitios web que facilitan el compartir información y la colaboración entre usuarios, permitiendo que estos interactúen y creen contenido en comunidades virtuales, a diferencia de sitios estáticos donde solo observan contenido creado para ellos. Características clave incluyen el auge de blogs y redes sociales, contenido agregado por usuarios, y aplicaciones web dinámicas. Si bien ha democratizado la publicación de información, también plantea retos relacionados a los derechos de autor.
2. DEFINICION
El término Web 2.0 comprende aquellos sitios web
que facilitan el compartir información, la
interoperabilidad, el diseño centrado en el usuario
y la colaboración en la World Wide Web. Un sitio
Web 2.0 permite a los usuarios interactuar y
colaborar entre sí como creadores de contenido
generado por usuarios en una comunidad virtual,
a diferencia de sitios web estáticos donde los
usuarios se limitan a la observación pasiva de los
contenidos que se han creado para ellos
3. Un sitio Web 2.0 permite a los usuarios
interactuar y colaborar entre sí como creadores
de contenido generado por usuarios en una
comunidad virtual, a diferencia de sitios web
estáticos donde los usuarios se limitan a la
observación pasiva de los contenidos que se
han creado para ellos
4. CARACTERISTICAS
El auge de los blogs.
El auge de las redes sociales.
Las webs creadas por los usuarios, usando plataformas de
auto-edición.
El contenido agregado por los usuarios como valor clave de
la Web.
El etiquetado colectivo (folcsonomía, marcadores sociales...).
La importancia del long tail.
El beta perpetuo: la Web 2.0 se inventa permanentemente.
Aplicaciones web dinámicas.
5. ORIGEN
El término fue utilizado por primera vez por Darcy DiNucci en 1999,
en su artículo "Fragmented future",3 aunque no fue hasta 2004
cuando Tim O'Reilly lo hizo popular. El término acuñado por Darcy
DiNucci fue popularizado más tarde por Dale Dougherty de O'Reilly
Media en una tormenta de ideas con Craig Cline de MediaLive para
desarrollar ideas para una conferencia. Dougherty sugirió que la web
estaba en un renacimiento, con reglas que cambiaban y modelos de
negocio que evolucionaban. Dougherty puso ejemplos — "DoubleClick
era la Web 1.0; AdSense es la Web 2.0. Ofoto es Web 1.0; Flickr es
Web 2.0." — en vez de definiciones, y reclutó a John Battelle para dar
una perspectiva empresarial, y O'Reilly Media, Battelle, y MediaLive
lanzó su primera conferencia sobre la Web 2.0 en octubre de 2004.
La segunda conferencia se celebró en octubre de 2005.
6. Cuando mencionamos el término Web 2.0 nos
referimos a una serie de aplicaciones y páginas
de Internet que utilizan la inteligencia colectiva
(concepto de software social) para
proporcionar servicios interactivos en red.
7. CONSECUENCIAS DE LA WEB 2.0
La Web 2.0 ha originado la democratización de
los medios haciendo que cualquiera tenga las
mismas posibilidades de publicar noticias que
un periódico tradicional. Grupos de personas
crean blogs que al día de hoy reciben más
visitas que las versiones online de muchos
periódicos.
8. La Web 2.0 ha reducido considerablemente los
costes de difusión de la información. Al día de
hoy podemos tener gratuitamente nuestra
propia emisora de radio online, nuestro
periódico online, nuestro canal de vídeos, etc.
9. DEBILIDADES DE LA WEB 2.0
Cada uno de los internautas de la Web 2.0 son
“autores” de los contenidos que vuelcan en la
Red, siempre que se trate de “creaciones
originales". Sin embargo, nada obsta para que una
obra de “nueva creación” pueda incluir, total o
parcialmente, una obra previa de otro autor. Esto
es lo que se denomina “obra compuesta". Para
evitar problemas tipificados legalmente sería
necesario contar con la autorización del autor de
la obra previa o bien usar la misma dentro de una
de las excepciones reconocidas en la propia Ley
(ver Ley de Propiedad Intelectual).
10. Ser autor de una web 2.0 supone, ni más ni
menos, el tener la plena disposición y el derecho
exclusivo a la explotación de dicha obra, sin más
limitaciones que las establecidas en la Ley. Por
tanto, la primera consecuencia jurídica de la Web
2.0 es que todos, más que nunca, somos
“propietarios” de Internet y, en todo caso, de los
contenidos concretos que creamos e introducimos
diariamente en servicios como Blogger, Flickr,
Facebook, Twitter o el ya mencionado YouTube.