Este documento presenta las principales enseñanzas de la Iglesia Católica sobre el trabajo. Discute que el trabajo es un derecho fundamental del hombre dado por Dios, pero que no debe ser idolatrado. Jesús enseñó a apreciar el trabajo a través de su propio ejemplo como carpintero. El trabajo debe realizarse de manera que no domine al hombre y lo aleje de Dios. La Iglesia apoya los derechos de los trabajadores y el papel de los sindicatos en la defensa de esos derechos.