1. Canova es uno de los máximos representantes del neoclasicismo en el
ambiente escultóricos de finales del XVIII y principios del XIX y, junto con
Jaques Louis David uno de los artistas que mejor al Neoclasicismo imitando
la perfección de la estética grecorromana sin caer en términos academicistas
o demasiado simples. Canova conjuga en sus esculturas la belleza de
las formas clásicas aplicadas a las más variadas temáticas y formas, por
ello ya durante su vida tuvo multitud de encargos .
2. La joven ha sido representada siguiendo los modelos de las Venus victoriosas de
la antigüedad clásica: recostada sobre un sillón la hermana de Napoleón sostiene la
cabeza con su mano mientras la otra descansa sobre su pierna, esta misma postura
fue utilizada en numerosas ocasiones por los artistas para representar a la diosa del
amor, por ejemplo Boticelli en su obra Venus y Marte. Parece ser que la belleza y la
reputación de la dama hicieron que muchos en la época la consideraran una
verdadera diosa del amor
3. Paulina Borghese tan solo contaba con
veinticinco años en el momento en que
Canova la retrató. La pericia del maestro
hace que ésta adquiera un porte
muy maduro y sensual; su mirada
perdida acentúa aún más el sentimiento
de relajación y belleza que trasmite la
hermana del emperador.
La obra fue realizada en bulto redondo y
cuenta con una composición triangular a
la par que equilibrada.
La obra, tallada completamente en
mármol, adquiere una gran calidad en la
representación de los materiales
destacando la representación del diván
sobre el que la joven aparece recostada
así como el paño que cubre su
desnudez. La luz incide brillante y de
manera regular en toda la composición
alejándose de los claroscuros y sombras
que incitan al dramatismo. En la
escultura de Paulina todo es armonía y
equilibrio.
4. La obra de Canova remite a la época helenística; su figura
femenina de formas maduras y con un lenguaje sensual de
formas y movimiento invita al espectador a contemplarla
desde distintos puntos de vista
5.
6. Los burgueses de Calais es
una de las obras más
importantes de Rodin.
Autodidacta y experimental,
Rodin convivió con el
impresionismo pictórico y
confirió a su obra una estética
singular, precursora del
expresionismo, que puso fin
al esfuerzo de imitación de la
realidad que aún entonces
astraba la escultura tradicional.
Además de eso, se atrevió a
introducir nuevos recursos
plásticos como el énfasis en
la anatomía para expresar la
espiritualidad humana
(aunque ello provoque cierta
desproporción entre los
miembros), el desarrollo de una
nueva concepción de la
escultura como monumento
público, y la importancia del
soporte (que hasta la época
sólo se había considerado
como un pedestal que alejaba
la estatua respecto del
espectador).
7. La obra conmemora un hecho
histórico acaecido durante la
Guerra de los Cien Años: el
monarca inglés Eduardo III tenía
sitiada la ciudad de Calais y ante la
superioridad inglesa, los lugareños
accedieron a la rendición. Sin
embargo Eduardo III no accedió a
la súplica de los franceses e
impuso como única condición para
no arrasar el pueblo que seis
ciudadanos acudieran libremente a
su campamento ataviados
únicamente con una camisa y
sogas en el cuello hacia lo que
parecía una muerte segura.
Cuando el alcalde de la ciudad
explicó las condiciones a sus
conciudadanos el hombre más
acaudalado de Calais decidió
entregarse libremente seguido de
otros cinco valientes. Al llegar al
campamento francés el monarca
inglés les perdonó la vida gracias a
la mediación de su esposa.
8. Rodin diseñó un conjunto de esculturas en bronce y las situó en un podio bajo, a ras del
suelo, para que la gente pudiera contemplarlas mejor. La posibilidad de enfrentarse cara
a cara con cada uno de los personajes, incluso de caminar entre ellos, permitió al artista
explayarse en los detalles de los rostros y las expresiones. Las seis personas
representadas son retratos individualizados por el valor singular de su vestimenta, su
fisionomía, sus gestos, etc. Pero Los burgueses... también es una obra colectiva, en la
que las personas se dirigen juntas hacia su destino inexorable, en una especie de
movimiento rotatorio, de gran profundidad existencial. Rodin expresó con realismo el
drama de estos hombres que habían sobrevivido un año de sitio, y ahora daban su
primer paso hacia una muerte segura. El conjunto no muestra un instante preciso,
congelado en el tiempo, sino un espectro de sentimientos, pensamientos y dilemas
morales expresados de forma muy variada. Algunos personajes se inclinan, otros
muestran su angustia y desesperación, otros se refugian en la apatía, otros tratan de
sobrellevar el dolor con la mayor dignidad y orgullo posibles, todos dudan...
9. EL JURAMENTO DE LOS HORACIOS. Jacques Louis David. 1784
Comentario en el libro de texto.
15. Romanticismo: la Naturaleza refleja el estado de ánimo: violenta, desatada,
agitada (rebeldía, desesperación…) . A veces triste, melancólica, desolada
(nieve, bruma, invierno…); lúgubre, tétrica, misteriosa, histórica (ruinas,
castillos, grutas, ruinas, paisajes nocturno…)
Esta obra se identifica con los parámetros románticos: grandiosidad de la
naturaleza, ruptura de las reglas clasicistas, la pequeñez humana ante los
fenómenos naturales…
En ella se muestra una escena típica de la época, un paisaje surcado por la
figura del ferrocarril; Turner se muestra conciliador con los avances
tecnológicos que surgieron tras la Revolución Industrial. Así, en Lluvia,
vapor y velocidad Turner representa el ferrocarril más moderno que existía
el GWR (gran ferrocarril del Oeste) que en ese momento que atraviesa el
puente de Maidenhead sobre el río Támesis.
16. la obra no es ninguna elegía al progreso si no que el artista utiliza este
nuevo medio de trasporte como un medio para estudiar el movimiento y la
desmaterialización en la obra.
El paisaje apenas está definido, el tren viaja a través de las vías en
dirección al espectador y en la obra la velocidad, el vapor de la locomotora
y la lluvia que azota el paisaje forman una atmósfera que el pintor romántico
es capaz de captar.
La locomotora es quien plasma el vapor, la atmósfera cargada está
desdibujada por la lluvia y la velocidad está representada por una pequeña
liebre que corre en el lado izquierdo.
17. Impresionado por los efectos de la luz, su pintura se fue volviendo cada vez
más esquemática y libre, llegando a aplicar la pintura con sus propias
manos sobre el lienzo para alcanzar los efectos lumínicos que deseaba.
También aplicó algunas de las técnicas propias de la acuarela en sus
pinturas al óleo, pues rápidamente se dio cuenta que ambas tenían en
común la transparencia y los focos difuminados. Nunca se contentó con las
técnicas tradicionales que había aprendido en la academia y siempre
estuvo anuente a la experimentación, pues lo que deseaba representar eran
las luces y las atmósferas que captaban sus ojos. Poco a poco dejó de
pintar al mundo esquematizado en la figuración naturalista y se concentró
casi totalmente en la atmósfera matizada por la luz, haciendo que las
formas se diluyeran y alcanzando un alto grado de abstracción.
20. Un hombre y una mujer rezan el ángelus,
oración que recuerda el saludo del ángel a
María durante la Anunciación. Han interrumpido
su cosecha de patatas y todas las herramientas
de este trabajo, la horquilla, los sacos y la
carretilla, están representados. En 1865, Millet
cuenta: "El Ángelus es un cuadro que he
realizado, pensando en como, trabajando
antaño en el campo, a mi abuela no se le
escapaba, cuando oía tocar la campana, de
hacer que nos detuviéramos en nuestra labor
para rezar el ángelus para estos pobres muertos
". Se trata pues de un recuerdo de infancia que
originó el cuadro y no la voluntad de exaltar un
cualquier sentimiento religioso
reacción al más formalista Romanticismo de
Delacroix.
21. Millet, poseía un profundo sentido de la
naturaleza, la interpretaba (más que reflejarla
sin más) comprendiendo las voces de la tierra,
los árboles o los senderos. Millet afirmaba
sentir en la naturaleza más de lo que los
sentidos le daban. El tono a ratos sentimental
de sus obras, en este caso el Ángelus, le aleja
un tanto del otro gran realista, Courbe, más
áspero y rebelde.
El autor buscará retratar a la gente humilde y
campesina en un gesto de admiración por la
gente pobre del mundo rural, seduciendo a los
republicanos y exasperando a la burguesía
por tratar esto como tema central en su obra.
22. En una escena simple, quiere fijar los ritmos
inmutables de los campesinos. Aquí el interés
del pintor enfoca el tiempo de la pausa, del
descanso.
Aislada en el primer plano, en medio de una
inmensa y desierta llanura, la pareja de
campesinos adopta unos aires monumentales,
pese a las dimensiones reducidas del lienzo.
Sus rostros se han dejado en la sombra,
mientras que la luz subraya los gestos y las
posturas. El lienzo expresa de este modo un
profundo sentimiento de recogimiento y Millet
supera la anécdota.
55. Tahitianas. Gauguin. Postimpresionismo
Es en 1891, a la edad de 42 años, cuando Gauguin decide irse a vivir a
Tahití, en el sur del Pacífico. Su intención era llevar una existencia más
sencilla y armoniosa, en contacto con el primitivismo, religiosidad e inocencia
de los habitantes de las islas de Polinesia. Quería ir allí en busca de
inspiración «sin otra preocupación en el mundo más que expresar, como lo
haría un niño, las impresiones de mi mente, usando sólo el medio del arte
primitivo; el único medio correcto, el único medio verdadero. Pretendía
resucitar los tiempos en el que el hombre vivía en armonía con la naturaleza
y volver a encontrar, lejos de Europa, el paraíso original). Gaugin renuncia a
la vida urbana, a la vida burguesa , buscando la vida más natural, más pura,
más primitiva.
56. Tahitianas. Gauguin. Postimpresionismo
Esta composición es típica de las obras pintadas a
comienzos de su primera estancia en el Pacífico,
cuadros que muestran a menudo a tahitianas
ocupadas en sencillas tareas cotidianas. Los rostros
tienen un leve deje de melancolía. Una leve
animación se crea por las olas que se rompen en la
laguna del fondo, solamente sugeridas por algunos
realces de blanco.
Trata de transmitir el primitivismo de la escena;
Gauguin consigue un efecto decorativo
mediante el uso equilibrado del color, que está
presente en tonos puros y brillantes. Son
colores planos, sin dar sensación de
profundidad, como en la estampa japonesa.
Son colores muy vivos que dotan de inmensa
fuerza a la imagen. Es una especie de armonía
poética, musical, al margen de la realidad.
58. Tahitianas. Gauguin. Postimpresionismo
La mujer se convierte en
protagonista de sus cuadros. Son
mujeres con formas poderosas,
elegantes, de gestos armoniosos.
Representan la inocencia de la vida
primitiva. Las flores que llevan en el
pelo y la que hay sobre la playa son
símbolo de esa unión con la tierra,
con la Naturaleza.