1. EL GATO FEO
Había una vez un gato llamado Blu, él era un gato carey con muchos colores,
como el negro, el amarillo, etc.; como una noche de muchos pero muchísimos
colores. Un día se fue con sus hermanos a unas casas. Cada vez habían menos
gatitos porque los estaban regalando .
Hasta que llegó el final del día y nadie quería llevarse a Blu. Pasaron semanas y
meses, pero nadie había querido llevárselo, hasta que la señora de la casa se
hartó con el gatito y lo echó a la calle.
Él tenia frío y hambre, hasta que llegó una niña con una florecita en la cabeza se
lo llevó y lo cuido mucho, tuvo mucha atención con él, no se separó de él en
ningún momento. Tan pronto la mamá llegó y vio al gatito lo abrazó y no lo soltó
hasta la mañana siguiente.
- No entiendo como un gatito tan pequeño podría vivir en las calles. – Dijo la
madre de la niña.
Pero ya no importa eso, ya tenemos una mascota y nos hace felices, debemos
conservarlo, no debemos maltratarlo ni dejarlo en las calles porque es un ser vivo;
además, va a ser un miembro más de la familia, le daremos mucho cariño y
viviremos todos muy contentos.
MI AMIGA Y YO
Había una vez una niña que se llamabaCarolina, la mama y la niña tuvieron que ir
a otro país por problemas familiares. Llegaron al Caribe donde les recibieron muy
bien. La niña tenía que ir a la escuela, así que la mama la inscribió en
un colegio llamada Dascalio Santa Maria
La joven fue a la mañana siguiente al colegio, pero Carolina no se juntaba con
nadie, todos sus compañeros y compañeras estaban jugando menos ella. La niña
pidió que jugaran con ella pero no la hacían caso.
Al segundo día tampoco se juntaban con Carolina,pero llegó el tercer día y una
joven llamada Catalina que empezó a ser amiga suya. Se juntaban todos los días
y lo pasaban muy bien. Pero un día se pelearon y el director las castigó a las dos.

2. Pasó mucho tiempo, Carolina y Catalina ya eran adultas. Carolina fue a trabajar a
la municipalidad de San Joaquin, como cada día y de repente se encontró con
Catalina. Se saludaron muy sorprendidas de verse pero a la vez muy contentas.
Después de una larga conversación Carolina invitó a Catalina a cenar a su casa.
En la cena hablaron mucho tiempo sobre su niñez, estaban felices recordando su
bonita amistad de cuando eran niñas.
Al día siguiente también se encontraron y ahí es cuando se pidieron perdón por
aquel día que discutieron en el colegio. Se reconciliaron y así todos los días se
volvieron a juntar hasta viejitas y vivieron felices por siempre.
La joven fue a la mañana siguiente al colegio, pero Carolina no se juntaba con
nadie, todos sus compañeros y compañeras estaban jugando menos ella. La niña
pidió que jugaran con ella pero no la hacían caso.
Al segundo día tampoco se juntaban con Carolina,pero llegó el tercer día y una
joven llamada Catalina que empezó a ser amiga suya. Se juntaban todos los días
y lo pasaban muy bien. Pero un día se pelearon y el director las castigó a las dos.
Pasó mucho tiempo, Carolina y Catalina ya eran adultas. Carolina fue a trabajar a
la municipalidad de San Joaquin, como cada día y de repente se encontró con
Catalina. Se saludaron muy sorprendidas de verse pero a la vez muy contentas.
Después de una larga conversación Carolina invitó a Catalina a cenar a su casa.
En la cena hablaron mucho tiempo sobre su niñez, estaban felices recordando su
bonita amistad de cuando eran niñas.
Al día siguiente también se encontraron y ahí es cuando se pidieron perdón por
aquel día que discutieron en el colegio. Se reconciliaron y así todos los días se
volvieron a juntar hasta viejitas y vivieron felices por siempre.
La gallina de los huevos de oro.
Un día de verano, un granjero que iba como de costumbre a revisar el nido de
sus gallinas en el granero encontró allí un huevo algo extraño ya que era amarillo

3. y brillante. Cuando fue a cogerlo era tan pesado como el plomo y el lo iba a tirar a
la basura, porque pensaba que una broma que le había jugado alguien, pero en
vez de eso se lo llevó a su casa, pensándolo mejor y pronto se dio cuenta que
era un huevo de oro puro y a partir de ese día cada mañana ocurría lo mismo, y
pronto se hizo muy rico con la venta de sus huevos. A medida que se hacia rico
se hacia mas codicioso y pensando en obtener de una vez vez todo el oro que la
gallina le podría dar, tomo la decisión de degollarlo y lo abrió sólo para no
encontrar nada.
La tortuga y las aves.
Una tortuga deseaba cambiar su lugar de residencia, por lo que pidió a un águila
que la llevara a su nuevo hogar, prendiéndole una gran recompensa por su
ayuda. El águila estuvo de acuerdo y tomando la tortuga por el caparazon con sus
garras se elevó en el aire. En su camino se encontraron con un cuervo, quien dijo
al águila: “las tortugas son un bocado exquisito.” “La cáscara es muy dura”, dijo el
águila en respuesta. “Las rocas de pueden romper la cáscara”, fue la respuesta
del Cuervo, y el Águila, tomando la pista, dejo caer la tortuga en una roca fuerte, y
los dos pájaros hicieron una buena comida de la tortuga.
Nunca se debe confiar por completo en un enemigo.
El Zorro, El Gallo y el Perro.
Una noche de luna llena un zorro rondaba sobre el gallinero de un granjero, y vio a
un gallo el techo.
“Buenas noticias, buenas noticias!” -exclamó-.
“¿Por qué, qué sucede?” dijo el gallo.
“El Rey León ha declarado una tregua universal. Ninguna bestia puede dañar un
pájaro de ahora en adelante y todos vivirá juntos en amistad fraternal.”
“¿Y por qué, eso es una buena noticia”, dijo el gallo “, yo veo a alguien mas que
viene con quien podras compartir las buenas nuevas.” Y, diciendo esto, estiró el
cuello hacia delante y miró a lo lejos.
“¿Qué es lo que ves?” dijo el zorro.

4. “Es solamente el perro de mi amo que está viniendo hacia nosotros. ¿Qué va tan
pronto?” , continuó, como el zorro comenzó a alejarse tan pronto como se entero
de la noticia. “No te esperaras para felicitar al perro por el reinado de la paz
universal?”
“Regresaría a hacerlo”, dijo el Zorro “, pero me temo que no haya oído hablar del
decreto de rey león”.
El buey y el sapo.
Un buey estaba bebiendo en un estanque y sin ser su intención pisó una cría de
ranas jóvenes, y aplastó a uno de ellos hasta la muerte. La madre que iba delante
noto que le hacia falta uno de sus hijos y le preguntó a sus hermanos que
ocurrido con él. “Está muerto, querida madre, dijo uno de ellos porque una
bestia enorme con cuatro patas muy grandes vino al estanque y lo aplastó hasta
la muerte con su talón hendido.” La rana, resoplando hacia afuera se inflo y
preguntó: “Si el animal era tan grande como ella y uno de sus hijos dijo: ” madre,
deja de inflarte ”y no te enojes, porque no podras imitar con éxito la inmensidad
de ese monstruo.”
Las cosas imposibles no podemos esperar alcanzarlas, y no es de ninguna
utilidad intentar probarlas.
El hombre, el niño y el burro
Un hombre y su hijo iban una vez con su burro de camino al mercado, mientras
caminaban a su lado pasaba un hombre de campo que dijo: "¡tontos, ¿para qué
es el burro sino para que se montarse sobre?" Así que el hombre puso el niño en
el burro y siguieron su camino, pero pronto pasaron un grupo de hombres, uno de
ellos dijo: "Mira ese joven perezoso, él deja a su padre caminar mientras el monta
cómodamente." Así que el hombre que ordenó al muchacho que bajara, y se subió
el, pero no habían ido muy lejos cuando pasaron dos mujeres, una de ellas le dijo
a la otra: "¡Qué vergüenza que patán perezoso como deja que su pobre hijo
camine mientras el va en el burro." Bueno, el hombre no sabía qué hacer, pero al
fin tomó su niño y lo subió delante de él en el burro. Para entonces habían llegado
a la ciudad, y los transeúntes comenzaron a burlarse y apuntarles. El hombre se
detuvo y preguntó de qué se estaban burlando y los hombres dijeron: "¿No te da

5. vergüenza de la sobrecarga que lleva el pobre burro contigo y tu hijo?" El hombre
y el niño se bajaron y el hombre trató de pensar qué hacer. Pensó y pensó, hasta
que por fin cortaron una vara, ataron los pies del burro a la misma, y levantaron la
vara y el burro a sus hombros, iban entre las risas de todos los que los veían
pasar hasta llegar al puente del Mercado, cuando el burro, con uno de sus pies
sueltos, pateo al niño y en la lucha el burro cayó sobre el puente pero sus patas
delanteras aun estaban atadas juntas y el burro se ahogó. "Eso le enseñará", dijo
un anciano que los había seguido: Al intentar complacer a todos , nunca vas a
complacer a nadie.
El lobo y el cabrito.
Un niño estaba en el techo de una casa mirando hacia abajo vio a un lobo que
pasaba justamente por debajo de donde estaba él e inmediatamente comenzó a
indultar y atacar a su enemigo que era un inofensivo cabrito. “Asesino y ladrón”,
clamó el niño, “que es lo que haces aquí, cerca de las casas de gente honesta y
buena” ¿Cómo te atreves a hacer acto de presencia cuando se conocen sus
vilezas y maldades? “”rayos desde la distancia, mi joven amigo,” dijo el lobo
huyendo de inmediato.
Es fácil ser valiente desde una distancia segura.
El trompetista prisionero
Un trompetista durante una batalla se aventuró y se acerco demasiado al
enemigo y fue capturado por ellos. Estaban a punto de proceder a darle muerte,
cuando él les suplicó que escucharan su petición de clemencia.
“Yo no peleo”, dijo él, “y de hecho no llevo ningún arma, yo sólo tocaré esta
trompeta y seguro que no les haré daño alguno, entonces ¿por qué me mataran?”
“No puedes luchar por ti mismo”, dijeron los enemigos “, pero puedes alentar y
guiar a tus hombres a la lucha.”
Las palabras pueden ser hechos.
El árbol y la Caña
"Bueno, pequeña," dijo un árbol a una caña que crecía a sus pies, "¿por qué no
siembras tus pies profundamente en el suelo, y levantas la cabeza con valentía

6. en el aire como lo hago yo?" "Estoy feliz con la suerte que me ha tocado", dijo la
caña. "Puede que no sea tan grande, pero creo que estoy más seguro así."
"Seguro!" dijo el gran árbol burlándose de la pequeña caña. "¿Quién me sacará de
raíz o me hara inclinara la cabeza en el suelo?" Pero pronto tuvo que arrepentirse
de su jactancia, pues surgió un huracán que lo arrancó desde sus raíces, y lo
convirtió un tronco inútil en el suelo, mientras la pequeño caña, quien solo se
doble ante la fuerza del viento, pronto volvió a estar derecha otra vez como si la
tormenta nunca hubiese pasado La oscuridad a menudo trae la seguridad.