Este documento analiza el Evangelio del III Domingo de Pascua donde Jesús se aparece a los discípulos junto al lago de Tiberíades después de su resurrección. Pedro, que había negado a Jesús tres veces, ahora demuestra su amor y fe impulsivos arrojándose al agua para nadar hacia Jesús. El documento sugiere que el Espíritu Santo ha eliminado la cobardía de Pedro y ha instalado el entusiasmo del testigo. Pedro ha recorrido un largo camino desde su negación a Jesús hasta

1. LA PALABRA ES VIDA
La vida que nace del Evangelio para cada semana de Adviento
CÁRITAS DIOCESANA DE ALCALÁ DE HENARES
III Domingo de Pascua. Evangelio (Juan 21, 1-14). 14 de ABRIL 2013
En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se
apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás apodado el Mellizo, Natanael el
de Caná de Galilea, los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: “Me voy a
pescar”. Ellos contestan: “Vamos también nosotros contigo”. Salieron y se embarcaron; y
aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla;
pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: “Muchachos, ¿tenéis pescado?”. Ellos
contestaron: “No”. Él les dice: “Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis”. La
echaron, y no tenían fuerzas para sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo que Jesús
tanto quería le dice a Pedro: “Es el Señor”. Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba
desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca,
porque no distaban de tierra más que unos cien metros, remolcando la red con los peces. Al
saltar a tierra, ven unas brasas con un pescado puesto encima y pan. Jesús les dice: “Traed de
los peces que acabáis de coger”. Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red
repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red.
Jesús les dice: “Vamos, almorzad”. Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era,
porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el
pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos, después de resucitar de
entre los muertos.
“De aquel Simón a este Pedro”
Pedro parece diferente de aquel Simón que, hace sólo unos días, negaba cualquier relación
con el Maestro. Es que la cobardía es una de las osas que peor casan con la fe: de ahí que el
Espíritu la haya barrido del corazón de Simón y, en su lugar, haya instalado el entusiasmo del
testigo. Todo lo que no compagine, pues, con nuestra fe –cobardía y cualquier tipo de
desamor-, deberá quedar muerto, y bien muerto, si queremos resucitar con el Señor.
Era la parte mejor de Simón, que sigue presente en Pedro: el amor. Un amor impulsivo,
ardiente, generoso, sí; pero despojado ya de aquella hojarasca de palabrería hueca y de
gestos altisonantes, purificado del orgullo y de la cobardía, matizado ahora por un toque de
humildad –fruto del recuerdo de aquellas tres negaciones-, que le sienta la mar de bien.
El amor, sí. Ese amor que ya caldeaba nuestro corazón durante el camino de ida, cuando todo
era aún búsqueda, y lucha, y dudas, y esperanza: y que ahora se ha acabado de encender al
contacto con el fuego del Espíritu. Pero también un amor que, consciente de sus limitaciones e
incoherencias, no las tiene todas consigo: prefiere no confiar en sus propias fuerzas, sino en el
amor misericordioso del Padre.
Es larga pues, la distancia de aquel Simón a este Pedro. Como largo es el camino que va
desde Jesús de Nazaret a Cristo resucitado. Como larga puede que sea también, para muchos
de nosotros, la distancia que aún nos falta por recorrer en el camino de la fe en ese Cristo
vivo; hasta conseguir que se nos acabe de bajar desde la cabeza hasta el corazón.
PARA TU REFLEXIÓN Y COLOQUIO:
¿Qué ha cambiado en Pedro y en Jesús?
¿Cuál ha sido el motor de este cambio?
¿Las palabras y gestos de Jesús les abren una misión nueva? ¿Cuál?
¿En la actualidad veis al Papa Francisco o algún cristiano con estas tareas? ¿Y tú?
Publicado por LMV en http://erealcala.blogspot.com por el Departamento de Jóvenes de Cáritas Diocesana de Alcalá de Henares.