Esta información nos da a conocer los trastornos de la conducta alimentaria, lo cual son enfermedades que tienen como características principales un comportamiento distorsionado de la alimentación y una extrema preocupación por la imagen y el peso corporal. Son enfermedades de evolución crónica, que han tenido un gran aumento de su frecuencia en las últimas décadas. Es una enfermedad grave, tanto desde el punto de vista físico como psíquico, que ha aumentado enormemente en frecuencia en los últimos años, favorecidos por los factores sociales que impone nuestra cultura.En las últimas décadas, los TCA han adquirido una gran relevancia socio sanitaria por su gravedad, complejidad y dificultad para establecer un diagnóstico en todas sus dimensiones y tratamiento específico. Se trata de patologías de etiología multifactorial donde intervienen factores genéticos, biológicos, de personalidad, familiares y socioculturales que afectan mayoritariamente niños, niñas, adolescentes y jóvenes. Conducta es la manera o forma de comportase una persona. En el caso de la conducta alimentaria, el comportamiento guarda estrecha relación con el alimento. La conducta alimentaria no es tan sólo un acto reflejo que evita la aparición de las sensaciones de hambre, sino que tiene una significación propia en la que intervienen experiencias previas, recuerdos, sentimientos, emociones y necesidades.