1. P.I.B.BARQUISIMETO 22-11-09 ELABORADO POR: JUAN ANTONIO GUÉDEZ CORTI
LADRONES DE BENDICIÓN
MATEO 14:22-33
INTRODUCCIÓN:
Esta historia es la señal y el símbolo de lo que Jesucristo siempre hace por los suyos,
cuando el viento sopla en contra, y cuando corremos peligro de sentirnos abrumados por las
tormentas de la vida. No importa la distancia, las circunstancias, ni la hora; el Señor socorre
a los suyos y brinda su bendición, la cual podemos desperdiciar por malas actitudes que
tengamos o porque permitamos que Satanás, con cualquiera de sus disfraces de ladrón, nos
incite a actuar de tal manera que perdamos las bendiciones que el Señor Jesús está
dispuesto a darnos.
Jn.10:10 “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que
tengan vida, y para que la tengan en abundancia.”
Este pasaje de Mateo nos revela tres cosas del carácter de Pedro:
1) Actuaba por impulsos y sin pensar lo que hacía.
2) Cometía errores y sufría por ello.
3) En el momento de su fracaso se aferró a Cristo.
Este pasaje revela una verdad eterna: Cristo calma la tormenta más violenta que se pueda
levantar. En todos los momentos de tormenta y tribulación la presencia de Cristo y su amor
traen serenidad, paz y calma.
PROPOSICIÓN: Hoy revisaremos tres actitudes humanas que el diablo utiliza para
robarnos las bendiciones de Dios: No reconocer a Jesús, dudar y temer.
I.- EL PRIMER LADRÓN DE BENDICIONES: NO RECONOCER A JESÚS.
V.25-26 “un fantasma”.
1. Para muchos es difícil hacer cualquier reconocimiento. “Ellos (los discípulos) se
habían olvidado del milagro de la multiplicación de los panes; como también de que él ya había
calmado otra tormenta. La reacción de ellos fue de asombro completo porque no comprendían, a
pesar de que los poderes del reino de Dios ya habían sido demostrados con claridad.” (Comentario
Siglo XXI) Jn.1:11 “En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le
conoció. 11A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.”
2. Para obtener grandes bendiciones divinas debes creer que existe. Hb.11: 6
“Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios
crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”
3. Para disfrutar de las grandes bendiciones de Dios debes reconocerlo en tu
diario vivir. Pr.3:6 “Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.”
4. Solo una relación personal con Dios te permitirá percibir, entender y
disfrutar las bendiciones de Dios. 1ª Cor.2:14 “Pero el hombre natural no percibe las
cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender,
porque se han de discernir espiritualmente.”

2. II.- EL SEGUNDO LADRÓN DE BENDICIONES: LA DUDA. V.28 “si tu eres”
“Sea como fuere, al terminar el relato Pedro había llegado a ser un ejemplo de poca fe y de
duda, como lección objetiva para los discípulos que eran tentados a quitar sus ojos de Jesús
y prestar más atención a las circunstancias que les rodeaban.” (Comentario Siglo XXI)
1. Jesús reprendió a Pedro. V.31 “Si pudiéramos creer más, sufriríamos menos. La
debilidad de la fe y el predominio de nuestras dudas, desagradan a nuestro Señor
Jesús, porque no hay buena razón para que los discípulos de Cristo tengan dudas.
Aun en un día tempestuoso, Él es para ellos una ayuda muy presente.” (Comentario
de Mathew Henry)
Mt.21:21 “Respondiendo Jesús, les dijo: De cierto os digo, que si tuviereis fe, y no
dudareis, no sólo haréis esto de la higuera, sino que si a este monte dijereis: Quítate
y échate en el mar, será hecho.”
Mt.28:17 “Y cuando le vieron, le adoraron; pero algunos dudaban.”
2. Satanás es experto en sembrar dudas. “Satanás tentó a Eva para, a través ella,
poder tentar a Adán. Su táctica es enviar las tentaciones por medios que no
sospechamos, y por quienes tienen la mayor influencia sobre nosotros. Satanás puso
en duda si era o no era pecado comer de este árbol. No dejó al descubierto su
designio al comienzo, pero planteó una pregunta que parecía inocente. El que quiera
estar a salvo debe cuidarse de no hablar con el tentador. Citó mal el mandamiento.
Él habló en forma sarcástica. El diablo, así como es un mentiroso, es también un
escarnecedor desde el principio; y los escarnecedores son sus hijos. El arte de
Satanás consiste en hablar de la ley divina como dudosa o irracional y, así, atrae la
gente al pecado; nuestra sabiduría consiste en mantener firme nuestra creencia en el
mandamiento de Dios y un elevado respeto por Él.”
3. La fe y la duda son contrarias. Mr.11:23 “Porque de cierto os digo que cualquiera
que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino
creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.”
Stg.1:6 “Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la
onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.
III.- EL TERCER LADRÓN DE BENDICIONES: EL TEMOR. V.26,29-30
1. Hay que concentrarse en lo vital. “Cuando dejamos de mirar a Cristo para mirar la
grandeza de las dificultades que se nos oponen, empezamos a desfallecer, pero
cuando le invocamos, Él extiende su brazo y nos salva. Cristo es el gran Salvador;
quienes serán salvados deben ir a Él y clamar pidiendo salvación; nunca somos
llevados a este punto, sino hasta que nos hallamos zozobrando: el sentido de la
necesidad nos lleva a Él.” (Comentario de Mathew Henry)
Heb.12:6 “puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el
gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la
diestra del trono de Dios.
Lc.21:26 “desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que
sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas.”

3. 2. Hay que ser valiente. Ser valiente es sobreponerse al temor. Eso requiere
esfuerzo. Jos.1:9 “Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni
desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.”
3. Solo el amor de Dios en nosotros nos fortalece para vencer el temor. 1ª
Jn.4:18-19 “En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el
temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido
perfeccionado en el amor. 19Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.”
CONCLUSIÓN:
RESUMEN O RECAPITULACIÓN: En esta oportunidad les he dicho que negarse a
descubrir a Dios, tener dudas o temores, puede quitarte la bendición que Dios ha preparado
para ti.
APLICACIÓN: ¿Hubiese sido diferente la historia si los discípulos hubiesen reconocido al
Señor en lugar de confundirlo con un fantasma, si no hubiesen tenido temor o si no
hubiesen dudado? ¿Te encuentras tu enfrentando una de estas actitudes?
DEMOSTRACIÓN: Para que tu puedas experimentar las bendiciones que Dios quiere
darte, tu necesita reconocerlo como Señor y Salvador, sobreponerte a las dudas por medio
de la fe y vencer el temor con valentía.