Recomendaciones ante potenciales riesgos de plagas y otros riesgos para las plantas cultivadas y flora silvestre asociados con el fenómeno "El Niño Oscilación del Sur - ENOS"
1. Potenciales riesgos de plagas y otros riesgos para las plantas
cultivadas y flora silvestre asociados con el fenómeno “El Niño
Oscilación del Sur – ENOS”. Recomendaciones1
Introducción
Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM
http://www.wmo.int/pages/index_es.html), hasta principios de abril de 2014, dos
tercios de los modelos estudiados pronosticaron la aparición de un episodio de El
Niño, la mayoría de ellos sugiere que se alcanzarán los umbrales de este fenómeno en
el mes de julio, se agrega que si finalmente se produce, es probable que se prolongue
hasta el final de 2014 (Boletín El Niño/La Niña hoy, disponible en Internet:
http://www.wmo.int/pages/mediacentre/press_releases/documents/EL-NINO-LA-
NINA-APRIL-2014-14639_es.doc).
“El Niño se caracteriza por temperaturas inusualmente cálidas de la superficie del
océano en la parte central y oriental del Pacífico tropical. Repercute de forma
importante sobre el clima de muchas partes del mundo y eleva las temperaturas de
todo el planeta. Su fenómeno opuesto es La Niña, que está asociado al enfriamiento”
(Comunicado de prensa N° 990, Organización Meteorológica Mundial
http://www.wmo.int/pages/mediacentre/press_releases/pr_990_es.html).
ENOS puede provocar exceso de precipitación en unas zonas y deficiencia en otras,
acompañados en ocasiones de fluctuaciones anormales de la temperatura y de otros
fenómenos meteorológicos. Esto conduce a condiciones climáticas extremas en
cuanto a humedad, sequía, calor, frío y vientos que propician el surgimiento de
factores bióticos y abióticos de riesgo para las plantas cultivadas y la flora silvestre.
Entre los factores bióticos se encuentran las plagas, entre los abióticos la fatiga
(estrés) de la planta por la misma condición extrema, daños mecánicos o físicos y
daños provocados por otros agentes que surgen dadas estas condiciones extremas,
por ejemplo el fuego.
Se menciona que ningún episodio de ENOS es igual al otro
(http://www.aemet.es/es/noticias/2014/04/elninoabrl2014), ocurriendo diferentes
factores que influyen en las condiciones climáticas, por lo cual se recomienda elaborar
proyecciones estacionales para evaluar los efectos en escala local. Esto último puede
lograrse mediante predicciones climáticas estacionales regionales o nacionales, tales
como las elaboradas por los Centros Regionales sobre el Clima (CRC) de la OMM, los
Foros regionales sobre la evolución del clima (FREPC) o los Servicios Meteorológicos e
Hidrológicos Nacionales (SMHN).
1 Plutarco Elías Echegoyén Ramos, Ing. Agr. M.Sc. Especialista en Sanidad Vegetal, OIRSA. San Salvador, El Salvador, 6 de junio de
2014.
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2. Recomendaciones
• Con base en predicciones climáticas estacionales regionales o nacionales
identificar las áreas en peligro y los potenciales riesgos de plagas y de otro tipo
que pueden ocurrir e identificar opciones para su manejo o mitigación, por
ejemplo:
o Elaborar mapas de proyecciones climáticas estacionales nacionales y
regionales, de áreas en peligro y de impactos potenciales2;
o Identificar las plagas (peligros) presentes en el área con potencial de
causar daños considerables en la producción agrícola y en la flora
(incluir las de reciente introducción y dispersión en el área, por ejemplo
la cochinilla rosada y el trips del melón). En una revisión preliminar,
Echegoyén Ramos (2002), identificó plagas presentes en la región
centroamericana con potencial de irrumpir en los cultivos durante una
sequía y las que pueden hacerlo durante una inundación (exceso de
lluvia o humedad)3;
o Identificar y evaluar otros factores de riesgo (como los abióticos) para
las plantas cultivadas y para la flora silvestre y las opciones para su
mitigación;
o Entre otras opciones para el manejo o mitigación de los riesgos a las
plantas cultivadas y flora silvestre se pueden mencionar: seguro de
cosechas (seguro agrario); compensaciones o indemnizaciones (del
Estado) por razones de subsistencia; prácticas agronómicas apropiadas
(incluyendo las culturales); técnicas de supresión y prevención de
plagas potenciales; prácticas para la evasión de plagas (por ejemplo
calendarios de siembra y de cosecha); control legal (promulgación de
medidas para el control y prevención de ciertas plagas); medidas para el
control de incendios forestales.
• Establecer prioridades en la mitigación de los riesgos, protegiendo en primera
instancia a los más vulnerables;
• Establecer los mecanismos para la implementación de un plan para la
recopilación y procesamiento de información de las vulnerabilidades en las
áreas en peligro (por ejemplo productores, cultivos susceptibles),
especialmente si se consideraran las compensaciones;
• Elaborar procedimientos para la vigilancia de plagas con potencial de irrumpir
en las condiciones extremas según áreas en peligro.
2 En 2007 ante la presencia de un ENOS, se realizaron foros especializados sobre aplicación de los pronósticos climáticos para la
gestión de riesgos. Mediante estos foros se plantearon perspectivas climáticas para América Central y se mapificaron. También
se identificaron los efectos potenciales en el sector agropecuario según subregiones y se plantearon estrategias de mitigación.
3 ECHEGOYÉN RAMOS, P.E. 2002. Elementos para el pronóstico de plagas durante o después de condiciones climáticas regionales
extremas y para evitar el ingreso de plagas cuarentenarias. San Salvador, El Salvador. OIRSA. s.p.
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