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El movimiento estudiantil
1. EL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL, UN PRODUCTO DEL CONTRATO SOCIAL.
El presente ensayo tiene como objetivo hacer patente el hecho de que en una sociedad
moderna, el contrato social implica la constitución de los movimientos sociales,
explicándolo por medio de los movimientos estudiantiles.
Se entiende por sociedad un conjunto de individuos que comparten una cultura, y por
comunidad un número menor de individuos, pero con referentes más particulares entre
ellos. Es evidente que para la construcción de cualquier comunidad, se deben establecer
ciertos códigos semióticos comunes que posibilitan la compresión y el funcionamiento
de la misma. Como lo afirma Becker y Luckman el lenguaje es la base que posibilita el
primer contacto directo de la subjetividad de cada uno de los individuos con sus pares,
convirtiéndose de esta forma en un contenido objetivo, que construye la realidad.
Cualquier situación socio-histórica, permite cimentar una sociedad mejor y a su vez
trae como consecuencia un cambio, que normalmente es lo que se busca con dicho
sistema. Jean Jaques Rosseau expone la idea de contrato social como: mecanismo del
perfeccionamiento moral y un pacto que permite proteger y asegurar las libertades
individuales, el establecimiento del mismo es un acto de libertad, pues por medio de
este se estipulan leyes de convivencia, entregan la libertad e igualdad a sí mismo y no a
un soberano. La libertad es autodeterminación, es decir la posibilidad de que la voluntad
individual se convierta en la voluntad común o ley general; tiene como objetivo: El
bien común (individual), Sumatoria de las voluntades individuales que conlleva a la
soberanía, (Democracia). Soberano equivale al Pueblo. Sin embargo aunque Rosseau se
diferencia de las propuestas anteriores del contrato social, recae en el código semiótico
de las relaciones privadas en los individuos, como fue expuesto con anterioridad las
masas están sometidas al un soberano (Rey). En éste contrato social, prima la libertad y
se disipan los aparatos represivos del soberano, las reglas se asumen por medio de la
voluntad, puesto que priman aspectos de empatía y autoprotección, el hombre vuelve a
un estado de inocencia, pero cuando aparece la propiedad privada, los individuos se
sumergen en un estado casi Darwinista donde sobrevive el mejor; lo cual hace que sea
2. necesaria la constitución del Contrato Social, como elemento mediador de las relaciones
sociales.
Ahora bien, hay que tener como referente la sociedad post- industrial para poder
referirse a la naturaleza de los movimientos sociales. El cambio de la sociedad, según
Touraine comienza a darse alrededor de los años de los 60s, ya que se produjo una
separación entre el ámbito privado y el ámbito público y se cimentaban las bases de lo
que prometía ser una nueva sociedad; en el fervor de este espacio social se puede
evidenciar la constitución de movimientos sociales, entendidos como: una expresión
social en el dominio de lo público de intereses colectivos que son desconocidos, éstos
buscan la legitimación en las estructuras de poder, cuya característica principal es la
determinación de subgrupos, que podría ser vista como el carácter multicultural de una
estructura (véase Zizek, el derecho a la intolerancia). Los años sesenta sirven para
consolidar lo que sería un proyecto de nueva sociedad, en el marco de un espacio,
cultural, económico, político “Lo que había que hacer era descubrir los nuevos desafíos
de esta sociedad, en la cual la importancia de la cultura, la educación, la información y
la comunicación, sobrepasa progresivamente a la producción de bienes materiales que
estaban en el corazón de la sociedad industrial. La dominación no se jugaba
exclusivamente en los lugares del trabajo, sino también en otros escenarios como son la
formación escolar o el consumo, en los cuales la manipulación cultural ejercía una
influencia creciente. ¿Qué nuevos actores podrían cuestionar la orientación general
de este nuevo sistema de acción histórica? ¿Quiénes lograrían dar un sentido al tránsito
de un tipo de sociedada otra? “. Los movimientosestudiantilesson la respuesta que enFranciacon
Mayo del 68, mejor define al movimiento como un actor social.
En primer término un movimiento estudiantil es un movimiento social. Las
diferencias y coincidencias entre movimientos estudiantiles y movimientos
populares puede ser un asunto que no se resuelve a fondo homologando a ambos
como movimientos sociales. A su vez, el concepto de movimiento social tiene
expresiones tan variadas y, a veces contradictorias1, por lo cual es necesario
1 De la amplia literatura del tema algunas obras reparan en las acciones estudiantiles: Castel, Robert. 1997.
Metamorfosis de la cuestión social. Paidós, Buenos Aires. Castoriadis, Cornelius. 1996. La democracia como
procedimiento y como régimen, en Iniciativa Socialista, nº 38, febrero 1996. En http://www.inisoc.org/ Holloway,
John. 2002. Cambiar el mundo sin tomar el poder. Universidad Autónoma de Puebla, Buenos Aires. Markoff, John. 1999.
3. precisarlo. Para el caso se adoptará la perspectiva de Renate Marsiske que tiene la
ventaja de estar inscrita en un trabajo sobre el estudiantado, afirma la autora que
todo movimiento social es el resultado de un conflicto de intereses entre un
conglomerado específico y otro que representa la institucionalidad o aspira a
hacerlo2.
El movimiento estudiantil como movimiento social se expresa, por lo menos, con
tres particularidades: es estamentario, transitorio e hibrido. Lo primero porque no
es un movimiento de clase, por lo menos no en el sentido marxista de clase social,
tampoco es un movimiento partidista3 y, por lo menos en sus etapas iniciales, no
tiene un carácter genérico como los movimientos pacifistas, feministas,
antiglobalización, etc. Es circunstancial porque asumen la condición transitoria de
ser estudiante. En ese sentido tiene que ver con generaciones, promociones
académicas o coyunturas. Y es híbrido porque va más allá de las reivindicaciones
estudiantiles y se opone y articula, al mismo tiempo, con modelos de poder social
y político. La hibridez también está expresada en el desdibujamiento de las
diferencias derivadas de los campos específicos de estudio, de la educación pública
o privada, de la región y el epicentro y de las condiciones de género.
Esta aproximación teórica puede ampliarse con las autoreferencia de los
estudiantes sobre sus dinámicas: “…al hablar del "movimiento estudiantil" se hace
referencia a un concepto meramente abstracto, teórico, que sólo tiene valor para
fines analíticos. Lo que existe en realidad son múltiples movimientos estudiantiles,
plenos de peculiaridades y diferencias, que definen su carácter social en el
complejo marco de las relaciones entre el poder, la cultura y la sociedad”4.
Olas de democracia. Movimientos sociales y cambio político. Tecnos, Madrid. Roth Deubel, André-Noël. 2002. Pensar en
la política. Entrevistas a Samir Amin, Andre Gorz, Pierre Bourdieu y Cornelius Castoriadis. Universidad de Cauca,
Popayán. Touraine, Alain. 1987. Actores sociales y sistemas políticos en América Latina. PREALC/OIT, Santiago de
Chile.
2 Marsiske, Renate, coordinadora, Alvarado, María Lourdes [et al.]. 1999. Movimientos estudiantiles en la historia de
América Latina. Universidad Nacional Autónoma de México, México DF. v. 2. p. 13.
3 En particular desde dos clásicos del tema: Michels, Roberto. 1969. Los partidos políticos: un estudio sociológico de las
tendencias oligárquicas de la democracia moderna. Amorrortu, Buenos Aires. Duverger, Maurice. 1992. Los partidos
políticos. Fondo de Cultura Económica, México DF.
4 El folletín del Diablo. Magazine. http://el-folletin-del-diablo.blogspot.com/2010/02/biblioteca-del-movimiento-
estudiantil-i.html
4. Combinando las definiciones de Kurt Lenk5 y Daniel Guérin6 donde una rebelión es
un movimiento de cambio social radical liderada por personajes extraídos
espontáneamente del grupo social rebelde y por lo general con poca formación
intelectual, prolongada en el tiempo y orientada desde la periferia hasta el
epicentro y una revolución es un cambio social abrupto, breve, urbana y orientada
por figuras intelectuales, en la asociación de ambas interpretaciones podría
encontrarse el concepto político de movimiento estudiantes. Los movimientos
estudiantiles son liderados por estudiantes notablemente intelectualizados, donde
es indiferente si es la región o no la dinamizadora, en periodos breves de tiempo y
con una aspiración radical de las consecuencias de su acción.
Diferente al movimiento estudiantil como está interpretado, e incluso previo a él,
se puede determinar la revuelta estudiantil como un estado intermedio entre la
indisciplina general y el movimiento estudiantil como tal. El asunto no es del orden
de la semántica, sino de la caracterización de los procesos. En las notas
metodológicas al estudio de los estudiantes del departamento de Santander, Álvaro
Acevedo7 busca diferenciar movimiento universitario, movimiento estudiantil y
revuelta estudiantil. Diferencias que por pertinencia no se abordaran en este texto.
(Consultar para método: Morin “La internacionalidad de las revueltas
estudiantiles” y Jaime Caycedo, “Conceptos metodológicos para la historia del
movimiento estudiantil colombiano”. Orlando Albornoz. El significado del
movimiento estudiantil).
5 Lenk, Kurt. 1978. Teorías de la revolución. Anagrama, Barcelona.
6 Guérin, Daniel. 1974. La lucha de clases en el apogeo de la Revolución Francesa. Alianza, Madrid.
7 Conflicto y violencia en la universidad en Colombia El proyecto modernizador y el movimiento estudiantil
universitario en Santander, 1953-1980. documento PDF.