1. Agenda cultural — Libros
Otra
y egocentrismo crearon un clima
de indignación generalizada en la
población: “[…] incluso por parte de
perspectiva
los soldados a los que tanto quiso
y que tanto lo quisieron, porque ya
hasta los soldados estaban hartos de
Eloy Alfaro, por los 4 000 muertos
de Eloy
que se habían producido durante las
tres o cuatro semanas anteriores, en
las batallas de Huigra, Naranjito y
Yaguachi y en la toma de Guayaquil”.
Finalmente, el 28 de enero de 1912,
todo ello desembocó en su asesinato
y posterior arrastre por las calles y
plazas de Quito, hasta El Ejido, lugar
en el que sus restos fueron incinerados
por una horda de ciudadanos, entre
los cuales también había liberales y
antiguos compañeros de armas.
Esta tesis contrasta con la de La
hoguera bárbara, donde afirma que los
responsables del crimen habrían sido
prostitutas, delincuentes y frailes
orquestados por el conservadurismo.
La trama del relato, que está basada
en una investigación “sistemática”
de documentos historiográficos y
crónicas de la época, va desarrollándose
mediante “urdimbres” paralelas,
provenientes de la ficción e imaginación
propias del autor, como la misión
detectivesca que encabeza el teniente de
navío William O’Grady para desentrañar
la muerte de David Matthewman,
comandante del cañonero
A partir de los hechos que sacudieron al país durante el USS Yorktown, frente a las costas
trágico enero de 1912, Alfaro en la sombra busca desmitificar ecuatorianas; o la relación epistolar de
un comerciante quiteño llamado Miguel
la figura del memorable presidente y general del ejército
Echeandía con su hija Isabel. Respecto
ecuatoriano, ofreciendo una versión distinta sobre su al uso de las cartas como voz narrativa,
asesinato y posterior arrastre e incineración. Ortiz confiesa: “Ése es un truco literario
que me permite describir los hechos
H
asta noviembre de 2012, La otra interpretación acerca del ocaso del como si fuera un periodista, porque
hoguera bárbara, de Alfredo ya centenario presidente de la república, las cartas están contando lo que pasó
Pareja Diezcanseco, era una acentuando las connotaciones ayer y eso es lo que hace un periodista.
de las pocas obras literarias —si no la negativas de su carácter y vida política: Es un mecanismo que encontré para
única— que narraba la historia y últimos “Los reflectores que se han puesto sobre darle agilidad al relato”.
días de Eloy Alfaro, el carismático líder él siempre han sido de luces positivas, de Gonzalo Ortiz Crespo, quien
de la Revolución Liberal que intentó endiosamiento. Bajo esa visión, Alfaro actualmente continúa desempeñando
modificar las estructuras e instituciones prácticamente es una persona que no importantes cargos editoriales y
del Ecuador hacia principios del siglo xx. tenía defectos, como Simón Bolívar u docentes en el país, se anticipa a la
Este texto destacaba, por sobre cualquier otros personajes a los que se les mistifica. crítica: “Tal vez digan que yo estoy
otro detalle, las virtudes del “Viejo Mi novela permite humanizarlo, porque culpabilizando a la víctima, pero
luchador” y su injusta muerte. él tuvo inmensas cualidades, pero tampoco sería justo el no hacer notar
Hasta noviembre de 2012, repito, también graves defectos. ¿El principal? que esa víctima cometió errores muy
porque en dicho mes comenzó a circular Querer eternizarse en el poder y serios que provocaron una guerra
Alfaro en la sombra, la segunda novela del sentirse dueño de la verdad”. civil y un desangre en el Ecuador”.
reconocido comunicador y miembro En la mirada de Ortiz, cuyo En democracia, bienvenidas sean las
de la Academia Nacional de Historia, libro de 340 páginas fue publicado discusiones de largo aliento.
Gonzalo Ortiz Crespo. En ella plasma por Paradiso Editores, esa soberbia — por jorge sánchez de n.
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