2024t203.pptx Leccion de Escuela Sabatica 20/4/24 PPT
Tema 20190112
1. TEMA: 12 enero 2019
Oración: Señor te alabo y te bendigo porque tú eres Misericordioso y bondadoso con todos
nosotros, pobres pecadores.
Tú Señor, sabes de nuestra pequeñez, de las preocupaciones que ocupan todo nuestro tiempo;
de los enfados, que no me dejan ver laalegría del día; de mis limitaciones que me impiden
actuar según tu voluntad; contrariedades que me hacen retraerme y encerrarme en mi mismo;
miedos que frenan mi acción y empuje; pecados que me hacen apartarme de Tu Gracia, que
hacen que me absorban toda mi atención que me apartan de Ti y del prójimo.
Ayúdame a apartar todas estas cosas de mi mente para tenerte a Ti solamente en mi
pensamiento.
Ayúdame a soportarme y soportar al prójimo y comprender que ellos también tienen sus
preocupaciones y limitaciones.
Hazme comprender que tú nos quieres con y a pesar de nuestras miserias y que debemos
querer también al prójimo con las suyas.
Que la razón no siempre esta de nuestra parte y que somos seres limitados, sino solo Tú tienes
la razón.
Haz que sepa y pueda ponerme en el lugar del otro y abre mi mente para saber escuchar y
comprender lo que tú quieres decirme.
Por tu admirable bondad e infinita misericordia apiádate de este pobre mortal y hazme
alcanzar tu Reino en este mundo. Amén.
El tema de hoy no es un tema, más bien es una lluvia de ideas, (mi mente y espíritu no está
para hacer un tema, además las circunstancias no favorecen que suelte un rollo aburrido).
Hasta ayer no tenia absolutamente nada, dejadez, pereza, falta de inspiración, da igual.
Pero una palabra me venía rondando y repitiendo por la cabeza, una palabra que hasta hacía
poco no sabía que existiera “diosidencia”, pero que en Siervos salía mucho, me dije la voy a
mirar por curiosidad, a ver que es.
Estamos en la semana del Bautismo del Señor, Yo ya di un tema del bautismo y no era
momento de repetirlo, pero si diré lo que representa en esencia el bautismo. Todos sabemos
lo que representa y el significado del Bautismo para el cristiano.
El bautismo es la inmersión en un agua y posterior salida, nuevo limpio y renovado. Es entrar
sucio y salir limpio, es entrar en un estado y salir en otro.
Entras “seco” y sales mojado, cubierto de esa agua vivificadora, refrescante, agradable, limpia,
que te hace sentir estar en otro mundo… Este sacramento es llamado también “baño de
regeneración y de renovación del Espíritu Santo” (Tt 3,5),me pregunto, ¿No necesitaremos
2. nosotros ahora un baño de esa agua “bautismal” que nos haga salir de esa sequedad a la que
el trascurso de los años y los avatares de la vida nos ha llevado, esa sequedad que recubre
nuestro cuerpo y nuestra mente…? Dejaremos eso para la reflexión
Pero claro entra ahora el cómo recibir esa nuevo agua, ese nuevo “bautismo”, ya seguiré,
ahora acabo de leer un escrito en el WhatsApp que ha reenviado Bárbara, no sé de quién es
pero recalca lo mismo. Pesimismo, desaliento, falta de comunicación, rencores, heridas,
egoísmos, insatisfacciones, circunstancias negativas en nuestra vida; falta de esperanza, de fe,
de amor, cansancio, aburrimiento. Un sinfín de problemas.
Como vemos todo negativismo y pesimismo en algunas facetas de nuestra vida, no me
atrevería a decir en toda nuestra vida, porque no lo sé, eso lo dejo a la reflexión de cada uno.
Pero si sé, que cuando uno entra en una de esas circunstancias, es muy difícil salir porque ella
misma se realimenta y no te deja apartarte de ella, con lo que va en aumento y te hace sentir
peor, pudiendo llegar entonces a la desesperación y el abandono.
Termina el escrito enunciando que todo nuestro ser, está sediento del Espíritu Santo que nos
de la luz, la vitalidad, la fortaleza, el empuje y la paz. “El Espíritu Santo viene en ayuda de
nuestra debilidad” (Rom 8,26), pero claro como recibir, como sentir ese Espíritu Santo, si toda
nuestra vida está inmersa en los problemas diarios y esos problemas atrapan nuestra vida…
Hay que tener pues, una “cierta” fortaleza de lucha para sobreponerse sobre ellos y vencerlos,
(en mi caso no la tengo). Hay que tener voluntad, perseverancia, constancia y paciencia. Todas
estas virtudes implican lucha con uno mismo, pero quien tiene fuerzas cuando nos invade el
cansancio y el pesimismo.
Como vemos todo esta charla parece ser puro pesimismo, pues no, no es pesimismo es “una”
visión de nuestras realidades de vida en las que las circunstancias que nos ocurren, las vemos
desde nuestra propia y única perspectiva como observadores de nuestra propia realidad, pero
no tiene que ser así, hay otras.
Veamos un ejemplo tonto y clarificador: el clásico del vaso con la mitad de agua: el pesimista
dice que esta medio vacío, y el optimista que esta medio lleno. Desde la visión de cada uno,
unos piensan,-no me va a saciar la sed, hay poca agua-. Desde la visión de los otros dicen: -algo
de agua hay y no me moriré de sed-. El agua es la misma, pero, ¿quién estará más contento y
alegre por esa poco agua? Esto no es tan superficial y baldío como aparece, sino que son
actitudes que tomamos continuamente en nuestra vida sin darnos cuenta.
Estas dos formas de afrontar la vida,está realizada desde una misma y única perspectiva, todo
depende de las circunstancias individuales y la personalidad del observador que puede tomar
una u otra forma de entenderla realidad. Todo esto es obvio y parece que son ideas de
Perogrullo, pero en el fondo no es así, hay aun otras perspectivas, otra visión distinta, desde
otro observador, pero eso no lo percibimos y lo sentimos como no real, a no ser que queramos
hacer un esfuerzo mental y personal. Y es, en el caso del ejemplo, desde la perspectiva del
vaso y, ¿cuál es ésta?; y esta perspectiva es, que el vaso en realidad está medio lleno de agua,
no hay lugar a dudas, no puede estar medio vacío porque por definición un vaso esta vacío (un
vaso es un recipiente que sirve para contener líquidos), cuando se le echa algo, contiene
3. entonces ese algo, si le echo cierta cantidad de algo, contiene ese algo, no es que esta medio
vacío (entendámoslo para los susceptibles). El vaso entonces estará siempre medio lleno.
Pero a qué viene esta tontería, pues al grano. Nosotros vemos siempre las cosas desde nuestra
observación, desde nuestra realidad y ésta depende de nuestro propio estado personal, como
he dicho antes, y a su vez mi estado personal, viene como consecuencia de mi observación,
como vemos es la sardina que se muerde la cola; como ya he mencionado antes con los
estados negativos; si solo lo vemos desde ese punto de vista, será muy difícil salir de él…. Pero
lo más importante no es que la vemos desde nuestra realidad observada, sino que nos
metemos en ella, lo observado y nosotros como observadores nos hacemos uno; eso es lo
peligroso. A modo de ejemplo, una mujer que hace la prostitución por lo que sea, necesidad
puede ser el caso, ve a su vida prostituyéndose y se dice soy una prostituta, cuando se mete en
ella, el acto, el hecho, y se ve como prostituta, toma conciencia de que ella es prostituta y ya
no tiene solución, se considera prostituta y no se ve como un ser humano, como una persona
normal; cuando en realidad, la prostitución es una circunstancia de su vida, una calificación y
no una cualificación personal; cuando en realidad es una persona que hace la prostitución, no
sé si me explico.
Para resolver y solucionar esto hay que ampliar la visión de nuestra vida, de nuestro problema,
buscar las otras perspectivas posibles. Ponerse en la situación del otro es una forma de buscar
otra perspectiva, que automáticamente hará que nuestra observación de nosotros mismo ante
algún problema cambie sin esfuerzo alguno (el problema no cambia, sino nuestra actitud o
visión ante él).
Ejemplo. Cuantos malentendidos hay porque alguien me dijo esto o me hizo aquello, o me
escribió eso y me enfade, y la otra persona explica porque lo hizo o porque ocurrió, nos damos
cuenta entonces de que nos habíamos equivocado o no estábamos en todo lo cierto con
nuestra apreciación.
Actuamos por inercia desde nuestra propia perspectiva (punto de vista), sin reparar en otras
perspectivas ajenas a nosotros y la damos como válida porque es nuestra apreciación, sin
mirar más.
Está por ahí, el dicho: cuando estés en caliente no actúes, cuenta diez y después actúa, ese
contar diez, es una manera vulgar de salir fuera del problema momentáneamente. La actitud
para resolverlo el problema, cambiará.
Y ahí radica parte de la solución, salir fuera no es abandonar el problema, es mirarlo desde más
lejos, desde una perspectiva más amplia, más lejana, es separar lo observado de nosotros los
observadores.
Nosotros como cristianos tenemos un aliado valiosísimo para ello, muy barato y al alcance de
todos: “La oración”. Si a ella, no la tomamos como una imposición cristiana, como un acto
“obligado”, se nos hará más liviano, el ponernos a orar. y cuando no sepamos qué decir,
podemos orar diciendo, Señor tengo o veo este problema, ayúdame a ser capaz de ponerme
en la perspectiva del otro, en la situación del otro, a salir de mi propia visión y comprender que
hay más puntos de vista a parte del mío”. Jesús veía el mundo, no como lo veían los mortales,
4. sino como el Hijo de Dios y fue capaz de dar su vida por la salvación del mundo; y Él también
tuvo que ponerse a orar.
Jesús se puso en el lugar de los otros, cuando al crucificarlo dijo “Perdónalos, porque no saben
lo que hacen”. No se puso al maldecirlos, ni insultarlos por lo malos que eran y lo mal que lo
trataban, se dijo: la ignorancia, el miedo, el estatus social, su forma de vida, etc., es lo que les
mueve a crucificarme.
Es difícil sacar de la mente, la idea de que cada uno de nosotros “no somos el ombligo del
mundo”, esa es una idea terrenal, en contra de la otra idea espiritual que describió San Pablo
al enunciar que cada uno de nosotros somos y formamos un órgano del Reino de Dios y que
unos no somos más importante que otros, sino todos son importantes.
Ahora el nuevo “bautismo” del que hable es darnos cuenta de ello, ponernos a orar y dejar
obrar al Espíritu, que nos limpie esa sequedad, esa visión única e inquebrantable y nos de
fuerzas para mirar desde una visión más amplia. Es como la visión de un ratón que solo ve el
suelo próximo sin saber que hay todo un espacio abierto allí arriba y solo la visión del águila la
puede ver.
Un ejemplo de que si se quiere se puede ver la relación de las cosas de distinta manera.
Como dije al principio no tenia tema, ni sabía que poner, en una conversación con Bárbara
ayer en el WhatsApp, me dijo en relación a lo que está aconteciendo con lo de Cristina, etc,
etc., que siendo una comunidad tan pequeña….todo lo que está ocurriendo.
Antes de seguir, no es aventurarse a decir, que la comunidad está atravesando uno de los
peores momentos, no me voy a meter en asuntos, pero la percepción es así, los porqués, como
no es cuestión de debatirlos aquí y ahora, -que si el demonio, -que si el cansancio, lo que sea.
El caso es ese. Conclusión: claro somos tan pocos, somos cada uno de nuestro padre y nuestra
madre, etc. Pero lo que es innegable es que hoy en día cada uno lo ve desde su punto de vista
personal y “único”, que cada uno piense lo que quiera. La visión general es que va mal, pero
….
Ahora sigo… son palabras textuales de Bárbara. Que siendo tan pequeña, con todos nuestros
defectos, debilidades, perezas, orgullos…que casi nos sentimos inferiores a otras como las
Neocatecumenales que parecen evangelizar mucho más… ahí ha nacido y crecido una santa… y
continua en todo esto se ven reflejadas esas palabras del Magnificat… “te fijas en los pequeños
y humildes”. Yo añadí, no olvidemos que también surgió hace tiempo una monja, y un
sacerdote y lo más raro un materialista terrenal creyente y separado y un socialista católico y
una continuación de la comunidad en Sudamérica. Todos estos acontecimientos pasados,
presentes y futuros, se nos escapan y están inmersos en un tiempo real nuestro, que para Él no
tiene el mismo significado. Todo lo que aconteció, acontece y acontecerá con lo de Cristina, se
nos escapa de nuestra comprensión real y terrenal y en la que Dios es el único que nos puede
dar explicación a ello, pero debemos tener una actitud de escucha.
En resumidas cuentas, tenemos una pequeña comunidad en la que hay cabida para todos. Esto
es otra perspectiva, más global de la comunidad que la que percibimos ahora cada uno de
nosotros, y no saquemos de nuestra perspectiva, que Dios utiliza lo más pequeño, no lo más
5. grande y fastuoso, ahora, no debemos olvidar que, nosotros debemos aportar un poquito de
nuestra parte, cada uno debemos aportar nuestro granito de arena, no lo dejemos en manos
de los otros.
Yo me preguntaría si desde hace algún tiempo, no hemos apartado de nuestra visión de la
comunidad a Jesús y lo hemos relegado a un segundo término. Por ser generoso, vamos, lo
dejo a la reflexión de cada uno. Y vemos a la comunidad como algo más en nuestra vida, como
un centro de reunión, como algo circunstancial que nos estorba en estos momentos por las
circunstancias que sean.
Dejarse llevar cuando uno descubre que hay alguien que sabe más que uno, que tiene una
visión más grande que la de uno y que tiene a su vez un proyecto más grande que el proyecto
personal que nosotros pudiéramos hacer.
Un ejemplo que me gustó mucho y es muy clarificador lo escuche y que me llamó mucho la
atención. Una madre estaba haciendo un bordado, su hijo que estaba en el suelo de vez en
cuando miraba hacia arriba y veía el telamen por debajo, los hilos entrelazados, deshilachado,
mezclados los colores y le dice a su madre, que cosa más fea estás haciendo, su madre seguía
bordando sin decir nada, el mira de vez en cuando hacia arriba y lo ve cada vez más feo, mas
emborronado, hasta que al final su madre le dio la vuelta al bordado y se lo enseñó al hijo, y
este ve la preciosidad que esta bordada, la armonía, la belleza del bordado y se queda con la
boca abierta admirado.
Pues así, somos nosotros mirando las cosas de Dios sin entenderlas, mirando a la comunidad
emborronada, mirando sus cosas desde abajo, pensando que nada tiene sentido ya, hasta que
al final de nuestras vidas o en un momento determinado, nos lo muestra tal como es en la
realidad divina.
El niño estaba en su plano, en su realidad, en su dimensión, tan cerca y tan lejos a la vez, de la
realidad de la dimensión de la madre, solo le separaba una ligera tela, pero que él no podía
atravesar con sus sentidos, con sus limitaciones. Pero envalentado por la ignorancia y
confianza con la madre, se atrevía a juzgar lo que hacía. Su madre por su amor infinito, no se lo
reprochaba y continuaba con su labor.
El telamen era una misma realidad, pero vista desde dos perspectivas y dos observadores
distintos.
Cuando ocurren acontecimientos en nuestras vidas, ya sean para bien de nosotros o para mal
de nosotros, a eso le llamamos coincidencia. La palabra coincidencia la utilizamos para indicar
que somos ignorantes en estos momentos para entender todas las causas, pero si esto lo
vemos con fe, entonces se convierte en una diosidencia y podemos decir Dios hizo esto, que
todo esto ocurriera, para que yo en este momento pudiera sacar esta lección, para que
pudiera sacar algo bueno al final de cuentas.
La diferencia entre coincidencia y diosisidencia, es que la coincidencia puede achacarse a la
casualidad y la diosidencia puede achacarse a la causalidad.
6. Coincidencia --------> casualidad
Diosidencia -------- > causalidad
Esto está basado en el principio de “nada ocurre en la vida sin razón alguna.
Pero entendiendo que una diosidencia es también una casualidad pero con causalidad y esto
está unido a su vez a la búsqueda, a la espera, a la esperanza de la persona.