El Imperio bizantino perduró en Oriente tras la caída del Imperio romano de Occidente en 476. En el siglo VI, el emperador Justiniano intentó restaurar el Imperio romano a través de campañas militares y recopilando las leyes romanas, además de embellecer Constantinopla con nuevas construcciones. Entre los siglos VII y IX, el Imperio bizantino se replegó a su zona oriental, donde el griego era la lengua oficial, y se produjo la separación de la Iglesia rom