1. Las ganancias corporativas están creciendo, la basura corporativa se está acumulando, el
comercio ha incrementado. Pero los empleos no van a regresar pronto para millones de
desempleados. Este es el tema recurrente en los noticieros capitalistas. Demuestra profunda
ansiedad ante la nueva etapa de la economía capitalista y la forma en que la “recuperación sin
empleos” se está presentando. Mientras que 30 millones de trabajadores siguen desempleados o
subempleados, las ganancias corporativas han aumentado a una tasa anual de $1,2 millones de
millones (billones) más altas que en el apogeo de la burbuja. Gran parte de ese dinero proviene
del despido de trabajadores y la extracción de más productividad de los que quedan. “Resulta”,
escribió Steven Pearlstein en el Washington Post del 30 julio, “que las empresas han encontrado
maneras de producir tanto como siempre, pero con menos trabajadores. Como resultado, el año
pasado la productividad por hora trabajada aumentó más de un 6 por ciento, aunque las
ganancias promedio por hora han aumentado menos del 2 por ciento. El resto del aumento de
productividad ha ido directamente a la empresa, creando un botín récord de dinero en efectivo
para las empresas. “Parte del efectivo ha sido usado para pagar deudas o recuperar acciones”
continúa el artículo, “pero hasta ahora una cosa que las empresas no han hecho es
recontratar a los empleados a tiempo completo, prefiriendo contratar trabajadores
temporales o aumentar las horas de los trabajadores que ya tienen”.
Pearlstein luego hizo una observación muy franca a la prensa: “La única sorpresa es que nadie
se sorprende por la falta de contrataciones en el sector privado. Es solo en el mundo de la
propaganda de la Cámara de Comercio que las empresas existen para crear puestos de trabajo.
En el mundo real, las empresas existen para crear ganancias para los accionistas y no empleos.
Por eso es que lo llaman capitalismo, no emple-ismo”. Cuando un portavoz empresarial como el
Washington Post permite ese comentario anti-capitalista, es un signo de preocupación profundo
acerca de la permanencia de este sistema económico. En julio The New York Times describió la
misma tendencia en un artículo titulado “Empresas estadounidenses exprimen enormes
ganancias de los recortes de empleos”. El título lo dice todo. El Times optó por centrarse en la
Harley-Davidson cuyas ventas han caído durante los últimos tres años. Pero a pesar de esa
sequía”, observó el Times, “las ganancias de la Harley están aumentando de hecho,
disparándose. Harley reportó ganancias por $71 millones en el segundo trimestre, más del triple
de lo que ganó hace un año. “Esta aparente contradicción caída en ventas y aumento en
ganancias es una de las razones por las que el estado de ánimo en Wall Street está mucho más
animado que en los hogares, donde el pesimismo es profundo y el desempleo muestra pocas
señales de calmarse”.
Escrito por : Fred Goldstein (Mundo Obrero)