El documento describe dos modelos de organización para la gestión educativa: el modelo burocrático y los modelos democráticos. El modelo burocrático se enfoca en los objetivos, la división de trabajos y las reglas y regulaciones. Los modelos democráticos son más idealistas e implican más complejidad. El documento también discute principios clave de la jerarquía, autoridad, comunicación y evaluación para una efectiva gestión educativa.