La arquitectura islámica tiene elementos distintivos como las cúpulas, columnas y arcos. Las cúpulas son semiesféricas o se apoyan en un tambor circular, las columnas son delgadas y siguen el estilo corintio, y los arcos más comunes son de herradura. Otras características incluyen el uso del ladrillo, yeso y madera, así como la presencia de mezquitas y iwans.