La arquitectura sustentable busca reducir el impacto ambiental de los edificios mediante el uso eficiente de recursos naturales y energía. Utiliza técnicas como la vegetación en techos y fachadas para disminuir el uso de calefacción, refrigeración y producción de CO2, a la vez que mejora el confort. Sus principios incluyen aprovechar las condiciones climáticas locales, usar materiales de bajo impacto y alta eficiencia energética, y minimizar el consumo a lo largo del ciclo de vida del edificio.