Los ciclones polares son similares a los ciclones tropicales pero generalmente tienen una vida más corta, alcanzan su máxima fuerza en 24 horas y se forman cerca de los 90° de latitud. Los mesociclones son vórtices de aire de 2-10 km de diámetro que se forman por cambios en la velocidad y dirección del viento en diferentes niveles de presión atmosférica.