La bromocriptina se utiliza para tratar varios síndromes de hiperprolactinemia, la enfermedad de Parkinson, la infertilidad, la acromegalia y los adenomas de la pituitaria que excretan prolactina. Estimula los receptores dopaminérgicos tipo 1 y antagoniza los receptores tipo 2 en el hipotálamo y neoestriado, suprimiendo la secreción de prolactina. Tiene dosis específicas para diferentes indicaciones y puede causar efectos adversos como náuseas, vómitos, hipotensión y trastorn