1) La Iglesia respeta la autonomía de la política pero puede evaluar programas por sus implicaciones éticas. 2) Los laicos católicos deben discernir si opciones políticas son compatibles con la fe y deben promover derechos humanos como el derecho a la vida. 3) La democracia requiere división de poderes, respeto a la libertad y que elecciones permitan elegir libremente entre opciones.