Este proyecto propone usar la especie Chrysoperla carnea como controlador natural de plagas en lugar de plaguicidas, debido al aumento de plagas causado por el cambio climático. La hipótesis es que C. carnea actuará como depredador de otras plagas sin afectar a humanos o el medio ambiente. Los resultados muestran que al aplicar C. carnea, las plagas disminuyen considerablemente. Se concluye que C. carnea es un efectivo controlador natural que no es tóxico.