Hace miles de años, nuestros antepasados vivían en grupos familiares y se dedicaban a la caza y recolección para sobrevivir. Hace unos 7,000-4,500 años, descubrieron la agricultura, lo que les permitió establecerse de forma permanente en aldeas y desarrollar actividades como la cerámica, el tejido y la arquitectura. Con la especialización del trabajo surgieron los primeros grupos sociales y el estado como forma de organización para gestionar los asuntos comunes de las sociedades.