Los antecedentes más cercanos a la historieta son las Aucas y Aleluyas francesas del siglo XIX, que narraban cuentos e historias a través de ilustraciones con texto complementario. Si bien la historieta evolucionó a integrar el texto de forma orgánica dentro de las viñetas, utilizando globos para las conversaciones, también desarrolló su propio lenguaje icónico con onomatopeyas y símbolos universales. Inicialmente se enfocó en lo cómico, de ahí el nombre cómic-strip.