La conquista del actual Ecuador comenzó en 1526 cuando Francisco Pizarro dirigió una expedición por la costa sudamericana que llegó a las playas ecuatorianas. En 1531, Pizarro y Diego de Almagro organizaron otra expedición y desembarcaron en Túmbez, donde secuestraron y ejecutaron al inca Atahualpa con la ayuda de caciques en su contra, lo que les permitió someter fácilmente al Imperio Inca. La captura de Atahualpa y las riquezas entregadas por los incas como rescate facilitaron