Dos detectives jóvenes llamados Sergi y Toni son llamados para resolver dos crímenes en su pueblo. Investigan las escenas del crimen y siguen pistas que los llevan a descubrir al culpable en ambos casos. En el primer caso, encuentran un cuerpo en un saco y siguen una pista de sangre que los lleva a una pistola con el nombre "Michael". En el segundo caso, siguen un rastro de joyas rotas hasta una alcantarilla donde encuentran joyas falsas. Mientras investigan oyen pasos acercarse y ven al culpable,