La educación debe formar personas íntegras capaces de afrontar cualquier reto, despertando el interés por la investigación y la lectura. Desde el ámbito laboral, la educación debe formar personas autónomas y creativas con dominio de idiomas y tecnologías para enfrentar los cambios. Uno de los principales problemas educativos actuales es la dificultad de muchos con la lectoescritura, por lo que se deben proponer estrategias que mejoren la educación y ayuden a salir adelante.