Los derechos de autor protegen las obras creativas de un autor al otorgarle derechos morales y patrimoniales. Los derechos morales son perpetuos e inalienables y protegen la reputación y autoría de una obra. Los derechos patrimoniales protegen los beneficios económicos de una obra y pueden ser transferidos. Para tener protección legal, una obra puede ser registrada en la Dirección Nacional de Derecho de Autor aunque el registro no es obligatorio.