Este documento describe cómo Dios ama a las madres solteras, los padres adoptivos y la familia. Argumenta que Dios planeó y conoció a cada persona desde antes de la creación, incluyendo sus padres y circunstancias familiares. Afirma que Dios valora profundamente a las madres solteras por su fortaleza, a los padres adoptivos por aceptar grandes responsabilidades, y que la familia es el mayor regalo de Dios. Concluye orando para que Dios bendiga a estas personas y familias.

1. DIOS AMA A LAS
MADRES SOLTERAS, A
LOS PADRES
ADOPTIVOS y A LA
FAMILIA.
Raymundo Carmona Jasso
@Raymundocajasso

2. Introducción.
A un antes de la creación del mundo ÉL ya existía y ya pensaba
en nosotros. ÉL ya había ubicado el lugar exacto de nuestro
nacimiento y dónde viviríamos, ÉL ya sabía quién sería nuestro
papá y nuestra mamá, ÉL ya lo sabe todo.
• ¿Has ido al cine a mirar una película que uno de tus amigos
ya vio antes que tú? Esta es la respuesta a todas tus
preguntas. ¿Por qué Dios permite esto, por qué permite esto
otro? Dios ya vio la película completa de tu vida y ya sabe
qué hay que hacer para ayudarte, por eso en ocasiones
tienes la sensación de perder algo cuando en realidad estas
ganando algo mejor. Dicho así las cosas son más fáciles de
entender.

3. Dios ama las madres
solteras.
Desde antes del inicio de los tiempos ÉL ya había pensado en
una de estas para ser su madre. Sí, María fue madre soltera
desde antes del principio de los tiempos, desde que Dios así lo
pensó, desde la concepción de Jesús en su vientre y hasta unos
días antes de que José aceptara el reto de ser papá adoptivo.
• Conozco muchas madres solteras que vagan por el mundo y
son personas que admiro profundamente pues han tenido la
fortaleza para educar a sus hijos. “No piensen que Dios se
equivocó, Dios las ama sin reserva, sin descanso, las 24 horas
de cada día, desde antes del principio de los tiempos y hasta
el final de los mismos, Dios ha mirado en Ustedes la
oportunidad de redactar una historia de amor”

4. Dios ama los padres
adoptivos.
Desde antes del inicio de los tiempos ÉL ya había pensado en uno
de estos para ser su padre. ÉL, los sigue entregando a las madres e
hijos que así lo necesitan. ÉL ha pensado en todo, en el error y en
el acierto, para ÉL no hay distancia ni frontera entre uno y otro, ÉL
conoce la debilidad humana por eso aprovecha este y otros
muchos recursos para ayudar a los que ama, a los de corazón
agradecido, a los de corazón fiel y sincero.
• Conozco a algunos padres adoptivos que, al igual que José,
dudaron de tomar una mujer con hijo (s) como compañera de su
vida pero aceptaron el reto y el doble regalo «hijo (s) y mujer»
Estoy convencido de que Dios mira esta situación con profundo
amor. “Padres, no teman, Dios les da los compromisos más
grandes a quienes tienen el carácter para generar los mejores
frutos, Dios ha mirado en Ustedes la oportunidad de redactar
una historia de amor”

5. Dios ama la familia.
Desde antes del inicio de los tiempos ÉL ya había pensado en tener
una propia y escogió a María y José como ha escogido a nuestros
padres y madres, sin posible error.
• Si tú piensas que tus papás no son los correctos, al mismo tiempo
estás afirmando que Dios se equivocó, a la vez estás diciendo que
Dios no existe pues ÉL es un ser perfecto y al ser perfecto no pudo
haberse equivocado.
La familia es el tesoro más grande sobre la faz de la tierra. He
conocido a muchas personas que se quejan por su pobreza
económica pero sabiendo que pueden vender una mano, por varios
miles de pesos, no lo han hecho. Pues de mayor valor es el miembro
de una familia que el de un cuerpo. ¿Quién vende una mano para
comprar un carro? ¿O dos pies para comprar una casa? Nadie. Si el
hombre valora tanto un miembro de su cuerpo imagínense cuánto
Dios valora a cada uno de sus hijos.

6. Oración:
Que Dios, padre de amor, bendiga a todas las madres solteras, a
los padres adoptivos y a las familias de nuestra sociedad; que el
espíritu santo les otorgue sabiduría para afrontar la vida día a
día; que Jesucristo, nuestro hermano, maestro y Dios les permita
gozar de esta vida en plenitud; que la Santísima Trinidad les
ayude a perseverar en la fidelidad para gozar la eternidad en
presencia del creador. Así sea.