La disartria flácida se produce por daño en la neurona motriz inferior, causando debilidad muscular en la cara y dificultad para pronunciar sonidos. Los principales síntomas incluyen flacidez de los músculos faciales, labios colgantes, boca abierta, voz ronca y nasal, y dificultad para pronunciar consonantes. El tratamiento se enfoca en terapia del habla y lenguaje para mejorar la articulación y comprensión.